Capítulo 32: Pequeño

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- Respira...solo son mis padres. No van a morderte...- dijo YoonGi mientras subiamos por el elevador

- Siento que voy a desmayarme- dije mientras lo abrazaba

- Te imaginas como me sentí pidiendole permiso a Jungkook para salir contigo?- me preguntó con una sonrisa

- Así como yo me siento ahora?- le pregunté con una sonrisa nerviosa

- No lo sé, fue algo raro...

- Mi padre no te hubiera dejado que te me acercaras- dije de la nada

- Que bueno que no estas cerca de él- frunció el ceño, pude distinguir un aroma de enojo y solo dejé un beso en su mejilla

- Esta bien...estoy contigo- le sonreí- Ademas yo habría huído contigo de todas formas- me encogí de hombros- La relación con mis padres se destruyó...yo no podía armarla solo, yo no era suficiente para eso, quizás habría dejado la escuela, habría vagado por el mundo...

- Lo sé cariño...- me abrazó calmando el estado de mi lobo- Yo te habría pedido huir conmigo...aunque tal vez Jungkook no me hubiera dejado llevarte...

Reí y no pude evitar besar sus labios, de momento a otro mi espalda estaba pegada al metal del ascensor con las manos de YoonGi en mi cintura y mis brazos envueltos a la altura de sus hombros. De momento a otro dejaba mis labios y besaba mi mandibula o mi mejilla haciendome suspirar. O si no besaba mi frente o mi nariz de manera juguetona haciendome sonreír al contacto de sus labios con mi piel.
Me sentía pequeño entre sus brazos.
Pero no era la sensación de debilidad, era mas bien que sentía su necesidad de protegerme en todo momento, su lobo se lo hacía saber al mío.
Me sentía apreciado, valorado y suficiente. Habían sido muchos años escuchando insultos. YoonGi no necesitó de palabras para llamar mi atención, sus miradas eran mas que suficientes para que yo notara su existencia, pues no era como las demás. Su mirada siempre reflejaba el deseo de querer conocerme. Sin querer hacía sentir a mi lobo emocionado, aunque al principio le molestaba en demasía tanta atención. Nunca nadie me había visto de la forma en la que YoonGi me miraba cada que lo veía por los pasillos, a pesar de estar en edificios diferentes. Quizá su lobo no solo olfateo la sangre, sino que escuchó a mi lobo pedir por ser consolado. Sin darse cuenta YoonGi me estaba ayudando a quererme.
Mi mente me torturaba, y aunque a veces vienen esos recuerdos indeseables, en estos momentos solo puedo pensar en la sensación que produce el contacto de nuestras pieles cuando entrelazamos nuestras manos, el sonido de su risa cada que ve a Jungkook de dramatico, la forma en la que sonríe y la forma en la que sus brazos me sujetan como si yo fuera a irme pronto...

Sentí un beso en la unión de mi cuello y hombro y no pude evitar suspirar y restregar mi nariz en el cabello de YoonGi...

- Tu...padre...- dije aun con un poco de sobresalto por la caricia que recibía-...sabrá...lo...que ha pasado...

Hizo caso omiso a mis palabras y su sonrisa se estampó sobre mi cuello, el cual era besado de manera cálida.

- Solo estoy mimando a mi bello omega, no hay ley que me impida hacerlo...- dijo en un pequeño susurro y dejó una prqueña mordida.

- YoonGi- dije en tono de advertencia

- Si cariño?- sonrió haciendose el inocente ante la situación

No pude evitar sonreír, me gusta todo de YoonGi. Su forma de ser, sus sonrisas que son para mí, la forma en la que rodea mi cintura o la sensación que provocan sus labios....estoy enamorado...

Volví a besar sus labios fugazmente antes de escuchar como la puerta del elevador se abría en el piso del apartamento de YoonGi.

- Mis padres te amaran- susurro dejando un beso en mi mejilla

Antes de que YoonGi intentara abrir una mujer abrió la puerta, vestía de manera elgante pero sencilla, su piel clara contrastaba con el vestido vino que portaba y la negrura de su cabello que se veía muy suave. Tenía la misma presencia que emanaba YoonGi, tenía un rostro muy delicado y el mismo color en los ojos que YoonGi, supuse que la mujer frente a mi era la madre de YoonGi.

- Mamá- saludó YoonGi y yo solo hice una pequeña venía

- Hola cariño...- sonrió y me miró- Tú debes ser Jimin verdad?- preguntó sonriente, a pesar de ser una mujer alfa era muy amable y dulce

- Mucho gusto...soy...- suspiré pues ese apellido aún me recordaba cosas tanto buenas como malas y desagradables- Soy Park Jimin...

YoomGi tomó mi mano al darse cuenta que mi lobo se había sentido levemente mal.

- Es un gusto, pequeño...pasen...- se hizo a un lado y entramos- Hyun los chicos llegaron!

- Mamá por favor....- YoonGi se veía nervioso

- No te preocuoes cielo, tu omega es muy lindo...

- Nosotros aún no...

- Las pequeñas marcas rosas en su cuello dicen otra cosa...- la madre de YoonGi me miró sonriente y yo solo pude encogerme en mi lugar sonrojandome, hasta YoonGi se habia sonrojado y eso no es muy común- Vamos no sean tímidos...

- Ya llegaron?- la voz de un hombre llegaron a nuestros oidos haciendonos mirarle- Oh...YoonGi, mi niño...

El hombre corrió a abrazar a YoonGi y él le devolvió el abrazo. Suspire y pensé en mis padres.
Estas mismas festividades pero junto a quienes eran mi familia. No debía pensar en eso, debía aprovechar pasar tiempo con su pareja y futuros suegros, no quería sentirse triste ni nada por el estilo.

"Esta bien sentirnos así, somos pequeños pero fuertes..."

Sonreí y el señor Min me miraba tratando de analizarme.

- Asi que tú eres quien hace suspirar a mi niño cada que me llama por telefono- me sonrió y me abrazó, al principio no sabia como reaccionar y lentamente correspondí el abrazo, no era como cuando era pequeño y mi madre me abrazaba para despues llamarme la atención, no se asemajaba a ningún abrazo que hubiese recibido a excepción de los de Kookie y los que YoonGi me daban.

- Papá estas avergonzando a Jiminnie...- dijo YoonGi mientras se acercaba a su madre quien estaba en el sofá

- Mucho gusto, soy Park Jimin...- dije haciendo una pequeña reverencia avergonzado pues si la madre de YoonGi habia visto las marcas de los multiples besos que propinó en mi cuello era seguro que su padre las viera igual

- Es muy lindo, por que tardaste tanto en presentarnos?- dijo el señor Min mientras nos sentabamos igual, yo a la par de YoonGi y él a la par de su pareja, la señora Min

- Solo llevamos tres meses juntos...- refutó YoonGi

- Aun así debiste decirnos antes ya que son predestinados...- la madre de YoonGi nos hizo que le vieramos de inmediato- No lo habían notado? Sus aromas estan mezclados, me ofende que tú hijo mio con tu olfato no lo hayas notado...

- Nosotros no lo habíamos asegurado...si sentí el aroma de Jimin mezclado con el mío pero pensé que era por la cantidad de tiempo que pasamos juntos...

- Yo percibia las emociones del lobo de YoonGi y ya habiamos pensado en ello pero...- dije sonrojado pues no era un tema del que me hayan hablado o tuviese un conocimiento pleno sobre esto

- Supongo que es una confusion aceptable- sonrió el padre de YoonGi

La cena transcurrió de manera agradable y llena de risas y de mis sonrojos.
El padre de YoonGi habló conmigo sobre muchas cosas sobre omegas, incluso sobre como sería tener un cachorro y lo que traía incluido, malestares y demas.
Me hicieron sentir comodo.

E incluso la madre de YoonGi me abrazo de manera protectora....

Un año se iba y con el emociones dolorosas y tristes.
Los Min me hicieron olvidarme de lo malo y me hicieron sentir querido dentro de su circulo familiar...

Heridas...Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt