Seth Ford, frío, calculador y terriblemente carismático, adoptado por uno de los mayores criminales de la ciudad se había ganado el respeto de los bajos fondos, inspirando tanto terror como admiración. Nadie se metía en su camino si quería conservar...
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—Principios del periodismo —repitió la profesora mientras apuntaba en la pizarra.
Mi mente desconectó de nuevo, volando a un mundo muy lejos de aquel aula. Comencé a trazar círculos en la libreta, formando miles de patrones diferentes mientras mi cabeza pensaba en las posibilidades que se presentaban ante mi. Dejé de hacer círculos sin sentido y abrí mi libreta, la cual hacía días que había dejado de ser apuntes de periodismo.
En ella tenía apuntados todos los orfanatos, hostales de protección para vagabundos y edificios de caridad que podían necesitar dinero en la zona sur, junto con diferentes objetivos los cuales podíamos atracar para conseguir el dinero.
Mi mente se perdió entre las miles de posibilidades, cada una emocionante a su modo.
Hacía dos semanas que habíamos vuelto del viaje de Grecia, y a medida que mi interés por el mundo criminal aumentaba, mi sueño de ser periodista moría lentamente. En cuanto a Seth, nos veíamos casi a diario, y a parte de alguna que otra discusión tonta, sorprendentemente nos llevábamos bastante bien.
Cuando volví a la tierra, la profesora anunció el final de la clase.
Sin esperar ni un segundo cogí mis cosas y salí de la clase. Saqué mi teléfono y le dejé un mensaje a Seth anunciándole que ya había salido y me dirigí a la cafetería.
Nada más entrar pude distinguir a North, su novio Max y Zach en la distancia. Me dirigí a ellos y me senté al lado de Zach mientras soltaba la maleta encima de la mesa con cansancio.
—¿Alguien ha tenido un mal día? —preguntó North con esa sonrisa tan característica en ella.
—Tengo un odio profundo hacia mi profesora de historia del periodismo y ni siquiera sé como se llama —me quejé.
—¿Llevas meses aquí y aún no sabes como se llama tu profesora? —preguntó divertido Max.
—Laura no se qué —divagué —O Lara .. algo con L. —Todos en la mesa rieron.
—Esta noche hay una fiesta. —Cambió de tema North.
—¿En tu casa de nuevo? —pregunté a Zach, éste negó.
—No, una de las mansiones del campus. Sólo para gente de la universidad —reí internamente al recordar a Mia y Chad en la última fiesta universitaria.
—¿Vendrás? —preguntó North.
—Sí, seguramente me pase con Seth.
—¿A Seth le gustan ese tipo de fiesta? —preguntó North extrañada, quien comenzaba a conocerlo.
—No, ahí está la gracia —sonreí.
—¿Así que es algo oficial? —preguntó Zach. —Lo del tío ese y tú.
—Eso parece —sonreí. —Estamos en ello. —Asintió no muy contento y bebió de su refresco.
Mi teléfono vibró, dejándome ver un mensaje de Seth; ''Estoy en el aparcamiento.''
