Min YoonJi

10

YoonGi mantenía sus ojos puestos sobre el emocionante partido de práctica que llevaban acabo los jugadores; en su mano se encontraba una libreta, la cual utilizaba para anotar el rendimiento de cada participante y las mejoras que deberían hacer como equipo.

Mientras que SunHee tenía aquel rostro (como diría Min YoonGi) de bruja oxigenada, aunque claro, "oxigenada" es lo que menos era esa mujer.

—¿En qué tanto piensas, eh?—preguntó Nam, quien se había acercado curioso.

—En lo fea que-... ¿Tú por qué no estás jugando?—Yoon le miró intrigado.

NamJoon dejó escapar un suspiro entre dientes; quizás un poco con burla mezclada con tristeza. Bien, tampoco es algo que debería mantener en secreto.

—¿Qué te parece si lo hablamos de regreso a casa?—a pesar de todo, a Kim le seguía incomodando el hecho de hablar de su pequeño accidente.

El pelinegro ladeó la cabeza confundido—. Oh vamos, ¿tan malo es que no quieres decirlo ahora?

—No... Es sólo que- olvídalo, ya sabes cómo soy. Eso debería ser suficiente para al menos hacerte una idea.

El peligris se alejó para regresar a la banca; YoonGi llegó a pensar por un momento que había hecho enfadar a NamJoon y también teorizó que debió esperar para no hacer sentir mal a su amigo.

—¡YoonJi!—gritó la odiosa entrenadora—, presta atención...

La muchacha se acercó sigilosamente para entrar más en confianza. Min no sabía qué estaba pasando, así que supuso que es eso a lo que llaman "cosas de chicas" y no estaba muy seguro si quería escuchar lo que Sun tenía que decirle.

—Tú- NamJoon y tú se llevan muy bien, ¿no es así?—preguntó en voz baja.

¿'Muy bien'? ¿Por qué lo había dicho en ese tono? ¡Es más! ¿Qué idiotez se le había ocurrido para pensar que pasa algo entre él y Nam? Demonios, ¿a qué quería llegar con esa pregunta?

"¿Por qué lo pienso tanto?"

—Somos amigos—respondió cortante.

SunHee enredó sus dedos alrededor de su silbato rosa mientras asentía a las palabras dichas de su aprendiz.

Yoon carraspeó—. ¿Por qué la pregunta?

—No te preocupes, no es nada—la chica le restó importancia con un movimiento de mano al aire—. Ya sabes, el primer día estabas embobada y no parecías concentrada. Pensé que era por JungKook, me alegro... Así nos evitamos problemas, ¿no crees?

Y he aquí de nuevo. YoonGi experimentó el famoso «sexto sentido de la mujer» por primera vez. Quitando a su señora mamá, porque él lo consideraba más como «instinto materno».

¡Justo como SeokJin cuando se pone sobreprotector!

—¿Cómo crees, unnie? Jamás me gustaría alguien que ya tuviese pareja.

"¡Es una asquerosa mentira!"

—Me alegro escuchar eso—sonrió risueña y enredó su brazo con el del pelinegro—. ¿No te alegra que seamos amigas?

—Sí... muchísimo...

"¡Claro que no, tonta!"

—¡Ey! Ustedes parecen llevarse más—JungKook apareció en el momento más oportuno.

"Quiero llevarme contigo"

—Estaba pensando en que salgamos juntos a tomar un helado—propuso el menor del grupo.