¡No te enamores! Me gustas...(Yesung Y Tú)

Capitulo 59 (Parte 1)

Porque ustedes merecen una actualización🤩

Capitulo 59

Estoy decidida.

Después de pensarlo toda la noche lo he decidido.

Lo primero que descarto es enviarle un mensaje, ya que no es el medio suficiente para aclarar lo nuestro, lo ideal es tenerlo al frente para decirle todo lo que siento, todo lo que he estado callando en este tiempo.

Así que camino por la calle de la cafetería en donde hace unos meses lo encontré trabajando. La misma cafetería en dónde pregunté por él y me dijeron que no trabajaba allí. Aunque no sé exactamente dónde trabaja en la actualidad, no se me pasó por la mente preguntárselo, es el único lugar donde se me ocurre encontrarlo.

Poco a poco al acercarme ralentizo mis pasos, las manos empiezan a sudar y los nervios salen a flote. Siento en como la sangre me bombea por todo el cuerpo. A tan solo una cuadra antes de llegar me detengo y doblo por una esquina. Molesta conmigo misma y sofocada por todo, suelto un gruñido de frustración.

No puedo, no puedo hacerlo, no es tan fácil como pensaba y no soy tan valiente, no soy capaz de decirle que Lo siento, que me equivoqué, que yo también quería que sucediera algo más y que también era problema mío. Y peor aún que siento lo mismo por él, que muero por decirle cuanto me gusta, me encanta. Que tengo tantas ganas de abrazarlo, de besarlo y que lo extraño mucho.

Me apoyo en la pared y cierro los ojos con fuerza. Tengo que enfrentarlo, tengo que hacerlo. Tal vez él no quiera verme o qué sé yo pero tengo que enfrentarlo. En realidad, no puedo seguir escapando de todo, tengo que retarme y enfrentarme de una vez por todas a las situaciones que son importantes en mi vida. Exhalo en una respiración profunda y me doy fuerzas mentalmente. Puedo hacerlo.

Segundos después, abro los ojos y levanto la barbilla segura de mí misma hasta que me sobresalto al encontrar a Kate frente a mí.

— ¿Qué haces aquí? — pregunto avergonzada como si hubiera hecho algo ilegal.

— Estaba caminando tranquilamente por aquí hasta que me pareció verte pero como no veo de lejos no estaba segura de que fueras tú, así que te seguí — Sonríe. Ladea la cabeza mirándome con curiosidad. — Ahora preguntaré yo, ¿Qué hacías aquí?

—Nada, solo me agite un poco y estaba tomando un poco de aire.

—sí, a mi vas a engañarme—rueda los ojos— voy a la cafetería a comprar algo que comer. Tengo hambre. ¿Me acompañas?

—Claro.

—Vayamos a la de allá —señala —hace tiempo que no regreso.

Se me escapa un suspiro y asiento. Bien, el destino quiere que lo enfrente.

Me pongo nerviosa, ahora no solo me sudan las manos sino todo el cuerpo y agregarle a mis traidoras mejillas sonrojadas que están quemándome como si tuviera fuego.

Oh, por Dios como detesto que me pase eso.

Entramos, escogemos una mesa y nos acercamos a pedir algo de comer. Miro de reojo a las personas que están atendiendo y me pongo en alerta al ver a un chico de espaldas. Dejo de contener la respiración a los segundos en que distingo que se trata de Jongjin, el hermano de Yesung, que está dando indicaciones a unas personas. Tiene casi el mismo perfil que su hermano de espaldas, es unos centímetros más bajo que Yesung y ahora mantiene el cabello más corto que la última vez que lo vi.

¿Podría haber confundido a Yesung con su hermano alguna vez?

Sí, y creo que lo hice cuando me pareció ver a Yesung por los pasillos de la universidad y cuando lo vi alzando en un abrazo a una chica fuera de la facultad. Incluso, ahora que lo recuerdo, la persona que vi aquella vez era de contextura delgada como Jongjin. Sí, ahora lo tengo claro. ¡Era su hermano!