¡No te enamores! Me gustas...(Yesung Y Tú)

Capítulo 30

Y como lo habia dicho...un capitulo más😂😂

#NoTeEnamoresMeGustas 😍

Capitulo 30

Era fin de semana, exactamente las nueve de la noche, y me encontraba acostada en mi cama leyendo un libro nuevo que había comprado hace unos días atrás, necesitaba frenar. Porque ya estaba por la mitad del libro y ya no tenía dinero para comprarme el siguiente libro.

Pasé toda la mañana trabajando en la cafetería esperando que Alice respondiera mi mensaje de "¿Saldremos a pasear hoy?". No respondió, así que supuse que tampoco quería hablar conmigo

Sabía que estaba enojada conmigo.

—¿Qué haces? —preguntó Kate al entrar.

Rodé los ojos—Leer.

—Pensé que hoy saldrías con Alice.

—eso pensé yo también, pero recordé que ella está enojada conmigo.

—¿Enojada? ¿Por qué?

—¿Y todavía preguntas?

Esbozó una sonrisa tímida—Lo siento, de verdad. Además, era solo una broma. ¿Qué harás más tarde?

¿Más tarde?. Si ya era tarde.

—Supongo que... ¿Dormir?

—Es fin de semana—chilló.

—¿Y?

—¿Cómo que "Y"?. TN, es fin de semana y nadie debe quedarse a dormir hoy.

—Ay, Kate. ¿A dónde quieres que vaya? –pregunté con cansancio.

— A tomar unos tragos, por ejemplo.

Bueno, no suena tan mal que digamos...

—Vamos, TN — insistió — no te hará daño un poco de diversión.

—Y, ¿A dónde iríamos?

—A un bar.

—¡¿A un bar?! —pregunté sorprendida.

Asintió.

Lo pensé, no tenía malo ir a un bar, ¿no?

— Esta bien, está bien....creo que debería beber algo de todas maneras.

A Kate se le iluminó los ojos.— Llamaré a Kyu.

Contenta agarró su celular y lo llevó a su oreja, luego de unos segundos habló —¿kyuhyun?, convencí a TN para tomar unos tragos. Nos vemos más tarde.

Rápidamente busqué en mi pequeño armario ropa para ir a un bar. ¿Qué ropa se utiliza para ir a un bar?, Como una niña malcriada, me senté en mi cama "enojada" y con los brazos cruzados. Resoplé, no encontraba nada para ponerme.

—¡Hey!. Cámbiate ya. O quieres que Kyuhyun te vea desnuda. —rió bajito.

—No es eso, solo que...no tengo que ponerme. —me dejo caer sobre mi cama—no tengo nada que ponerme.

—¿Cómo qué no?. Déjame ver...—rebuscó entre la ropa. —Definitivamente no tienes ropa para salir.

Resoplé. —Ya vez, te lo dije.

—De acuerdo. Veré que puedo prestarte. —dijo regresando a su armario. —Que tal este—me enseñó unos pantalones cortos rasgados junto a una camiseta con escote de color negro. A simple vista bonito y exhibicionista.

Pero...un cambio de look no era tan malo.

Me probé su ropa y...no me quedaba.

—Ponte la ropa con la que te sientas más cómoda. —me alentó—algo que resalte tus curvas.