Capítulo 14 Paraiso

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— Bien llegamos—  dijo Byul para quitarse el casco y acomodarlo frente a ella

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— Bien llegamos— dijo Byul para quitarse el casco y acomodarlo frente a ella.

Solar solo estaba concentrada en sus alrededores todo le parecía hermoso y vio una cabaña -bien bonito su exterior, por cierto- cerca de donde se sentía el sonido del agua correr.

— Byul, ¿dónde estamos? — pregunta curiosa.

— Cuando cumplí quince años mi familia compró el terreno y construyeron aquella cabaña que ves allí, vengo de vez en cuando, sobre todo si estoy muy cargada de problemas, es mi refugio— respira profundo — solo he traído a Hani conmigo una vez, cuando cumplió dieciséis, la traje para tener una fiesta personal como regalo.

Hani, ahí se encontraba ese nombre otra vez, por alguna razón le molestaba tanto que la nombraran como su presencia, parecía que sintiera celos, pero Yongsun siempre descartaba este pensamiento como si fuera lo más absurdo del mundo.

— Hani eh— dijo Solar inconscientemente camino a la cabaña.

— Si, Hani ha estado muchos años a mi lado y la quiero mucho en verdad— Solar de algún modo sintió como una aguja le daba un piquete en el corazón por lo que acababa de escuchar.

¿Para eso la había llevado? para restregarle en la cara la buena relación que tenía con ¨Hani¨.

— Bueno si la quiero, claro como mi hermana— al escuchar la palabra hermana Solar sintió un alivio en el pecho de manera que la hizo sonrojar al darse cuenta acababa de ponerse celosa— otra vez— a causa de Byul y Hani «qué sucede contigo cerebro, o más bien corazón» se decía en su interior.

Mientras se acercaban a la cabaña Solar se sentía más curiosa ¿qué le diría Byul?, fantaseaba de vez en cuando imaginando a la peliazul diciéndole que la quería, muchas veces llegó a pensar que la trataba con amor, pero luego se daba cuenta que era amorosa con todas sus amigas.

— Byul, ¿acaso quieres secuestrarme para luego pedir una recompensa por mí? por eso me trajiste a un lugar tan apartado— dijo sin haber pensado las palabras que acababa de decir «genial, ahora digo boberías»

— Claro linda, eres un hermoso tesoro que encontré en mi camino por lo que he decidido traerte conmigo para que llegues al paraíso junto a mí— dijo con una voz intimidante y sensual siguiéndole la corriente mientras la arrinconaba a una de las columnas de la cabaña.

— Y por lo que veo la víctima no piensa huir de mí así que todo bien... por ahora— dijo esto último volviendo en sí para alejarse a abrir la puerta principal de la cabaña, dejando a Solar en un estado inexplicable.

Al entrar se veía una decoración humilde pero hermosa, todo se encontraba en perfectas condiciones y... limpio, Byul llamó bien temprano para pedirle a un amigo que vivía cerca que limpiara, obviamente le pagó. La cocina fue lo que más enamoró a Solar, tenía un toque único un toque de Byul, había cosas en esa cabaña que le recordaban a ella.

— Y qué haremos ahora— pregunta Solar sentándose en el mueble de la sala de estar.

— Mientras yo preparo el almuerzo puedes ir tomando un baño en el río créeme te devuelve la vida.

— ¡Pero no traje nada para bañarme! — hace un tierno berrinche.

— No te preocupes en la mochila que traje esta todo, tu traje de baño y el mío y ropa para luego cambiarnos— respondió enseguida a lo exclamado por Solar.

—¿Tú sí que lo piensas todo eh? — dijo y deposita un beso en la mejilla de la peliazul para luego ir a cambiarse dejando en blanco a Byul, ¿a qué había venido eso? se preguntaba mientras agitaba la cabeza para volver en sí.

.

(...)

.

Ya habían pasado unas horas desde que Solar había ido a bañarse al río mientras que Byul preparaba todo, cada cierto intervalo de tiempo Solar aparecía por la ventana de la cocina preguntando si faltaba mucho como una niña pequeña.

— Yongsun ya todo está listo ven a almorzar— gritó desde la cocina la cual no quedaba muy lejos del río.

— Solar, venga que se enfría— grito al sentir la demora de la mayor.

— Kim Yongsun si tengo que ir a buscarte te las verás conmigo— dijo ya un poco irritada por la demora.

Al darse cuenta de que en todo ese tiempo no recibió respuesta por parte de la mayor sale a ver si la localizaba.

Para su sorpresa y terror Solar no se encontraba por ahí, buscó cerca del pequeño muelle que estaba en el río, alrededor de la casa y juraba no haberla visto entrar, así que en la cabaña no estaba.

Se estaba desesperando al no encontrar a la chica — ¡YONGSUN! — grita por el desespero.

— ¡VENGA SI ES UNA BROMA NO ES NADA AGRADABLE! — decía tratando de hacer que la chica saliera si es que estaba escondida.

Lo que menos quería pensar era que podía haberse ahogado en el río, no, eso no era posible, Solar era buena nadadora, a pesar de haber vivido toda su vida en Seúl siempre que podía iba a la piscina de su colegio a nadar, al menos eso fue lo que le había contado.

Con la poca tranquilidad que le quedaba, por no decir que ya no tenía, se adentra al río buscando esperando no encontrar el cuerpo de la mujer que amaba ahogada.... No, eso no podía pasarle, el día en que le diría todo, en qué le diría cuanto la amaba —No, no, no — repetía agitando las manos en el agua buscando lo que no quería encontrar.

Por Idiota Donde viven las historias. Descúbrelo ahora