20 - Chica Lobo

49.9K 4.4K 342
                                    

Capítulo 20

“Chica lobo”
*

.

—Puedes pasar— Me dice la enfermera cuando estoy esperando para ver a William.
Entro lentamente.

—Elena— Al verme, su rostro cambia drásticamente. Una enorme sonrisa se forma en sus labios.

—Hola — digo con timidez camino unos pasos lentos hacia él.
Me sentía nerviosa, quería abrazarlo, pero me mantuve en mi lugar.
— ¿Cómo te sientes?— Pregunté.

—Estoy bien. Gracias por venir. Ven siéntate. — Tomo una de las sillas que había y la llevo junto a la cama tomando asiento lo más cerca de mi amigo. 

—No te imaginas lo feliz que me pone verte bien —Dije sin dejar de sonreír como una idiota.
Sentí alivio al ver qué mi amigo tenía un buen semblante, su cara tenía un poco más de color y su pierna aunque estaba vendada no parecía tener nada grave.

—Gracias Elena —Estiró su mano y tomó la mía con cariño.
Entrelace mis dedos con los de él, y sostuve con firmeza.
Me miró a los ojos y pude sentir la conexión que tenían nuestras almas.

—Tuve tanto miedo, William. No vuelvas a ser el héroe, no puedo perderte. — Susurré aferrándome a su mano.

—Tranquila, no iré a ninguna parte. — Me tranquiliza. — Siento mucho que hayas tenido que pasar por esto. — Ver a mi mejor amigo, siendo atacado por un lobo había sido una de las situaciones más traumáticas que había tenido que presenciar.

—No está en mí lista de los 10 mejores días de mi vida, pero, no fue tan malo. — Miento.

—¿Tienes una lista de los mejores días? — Pregunta curioso. Sonrío

—El día que te conocí es uno de ellos. — Confieso. Su sonrisa aumenta.

—Ese día encabeza mi lista. — Responde.

—¿Cuándo saldrás de aquí? —Pregunté ansiosa e intentando distender.

—Esta tarde, tienen que darme unos medicamentos y estaré listo— Su sonrisa no había desaparecido nunca, pero se veía cansado.

—¿Y tu pierna? No se veía muy bien, parecía que había roto una arteria o algo… importante. —

— Sí, parecía serio, pero al final no fue nada. Solo perdí un poco de sangre, pero estoy como nuevo, me duele un poco, así que tendrás que ayudarme a bañar—Me dice en tono seductor.

—¡Qué tonto eres! —Dije entre risas

—¡Hey! Tenía que intentarlo —Se defendió.
—Vas a llegar tarde a la primera clase!— Me recuerda. Me había saltado el desayuno para poder estar con mi amigo, pero ahora debía irme.

—Pero quiero quedarme contigo— chillé.

—Te castigarán —Tenía razón, me castigarían por esto y ya me había metido en suficientes problemas.

—Le diré a la enfermera que me sentía enferma, así me da un permiso— Le digo este niega sin poder creerlo. —Quiero quedarme aquí contigo el resto del día. — Susurro.

—¿De qué, o quién te estás escondiendo? — Pregunta William mirándome preocupado.
—Por favor Elena, no intentes engañarme. Puedo leerte como un libro.— Me advierte.

—Hice algo estúpido y ahora estoy jodida. — Razonó.

—Me voy por un día y ya estás medita en un problema. ¿Qué ha sucedido? — Lo pensé un momento.

Viviendo Entre BestiasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora