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Las manos de Jungkook sostenía mi trasero mientras que mis piernas estaban enganchadas a su cintura, él se presionaba contra mi, mis manos agarraban su cabello, los besos en mi cuello me hacían soltar pequeños suspiros, todo se sentía como una revolución en mi cuerpo.

Sentí sus manos ir subiendo a mi cintura por debajo de la camisa, eran suaves y cálidas, cada contacto enviaba pequeños escalofríos. Su boca, que ahora atacaba la mía era dulce, sus besos eran suaves pero fuertes. Todo se sentía tan bien.

—Jung...– su boca volvió a atacar, como si no quisiera que hablara. Presioné mis piernas en su cintura y él soltó un gruñido en mi boca mientras que mordía mi labio inferior. Estaba en una completa nube de locura, éste hombre sabía como besar

Pero lo bueno nunca dura, y menos para mí.

—Algo está vibrando– dije entrecortadamente. Jungkook quien parecía muy concentrado en dejarme unos chupetones, no me escuchaba. No hubiese insistido en la vibración que sentía sino hubiese sido por las cosquillas que producía cerca de mi pierna, solté una carcajada porque sea lo que sea no dejaba de vibrar, Jungkook se separó de mí y me miró con el ceño fruncido. —Lo siento es que algo está vibrando cerca de mi pierna– murmuré bajito. Él que apenas parecía percatarse de eso me miró todavía curioso, despacio me soltó para revisar sus bolsillos

—Mierda– su voz salía baja y ronca, como me fascinaba. Viendo su teléfono como si lo quisiera romper, volvió a vibrar. Alguien era insistente en la llamada al parecer. Soltando un suspiro, atendió alejándose apenas unos centímetros de mi– ¿Qué quieres ahora, Seokjin?– su tono de voz era molesto, la oscuridad y el silencio reinaba en la casa, por lo que pude escuchar la bulla y parte de lo que decía Seokjin por la llamada

"Jungkookie~ te he estado llamando. ¿acaso ya no quieres a tu único hermano? Siempre es así cuando te visito, me evitaasss"

—¿Estas borracho?– Jungkook se paseaba de un lado al otro en la sala. Yo había prendido las luces y quitado mi abrigo, mientras me dirigía a la cocina, lo pude ver sentándose en el mueble. Quise darle su privacidad mientras hablaba con su hermano, o por lo menos eso intentaba. Apoyada en el desayunador de la cocina, lo observé. Su fuerte mandíbula y su cabello alborotado, sus labios un poco hinchados.

Inconscientemente toque los míos, todavía sintiendo sus labios, no podía creer lo que había pasado, una parte de mi - en el fondo- no se hubiese detenido a pesar de las consecuencias, y mi otra parte me decía que detenernos era lo mejor.

Estaban tan ensimismada en mis pensamientos que no me había fijado que Jungkook ya había terminado su llamada hasta que lo sentí acariciar mi cabeza. Subiendo la mirada, lo ví fijamente a los ojos.

—Lo siento, yo tengo que irme...– su mirada vagaba por mi rostro, su voz un poco insegura y baja. – Seokjin, necesita que lo busque– soltó un suspiro, su mano había bajado de mi cabeza y ahora ahuecaba mi mejilla, brindando suaves caricias. Su semblante había cambiado, ahora se encontraba más serio y preocupado

—Está bien, no hay problema– dije parandome derecha, su mano había caído encima del desayunador. Nuestras miradas estaban concentradas uno en el otro, silencio.

Más silencio.

Nadie decía nada, Junkook solo me veía fijamente, parecía reacio a irse.

—¿Quieres que te acompañe?– pregunté de forma tímida. No sabía si era buena idea o no, pero sentía una necesidad de acompañarlo. O era simplemente el hecho de pasar más tiempo con él. Jungkook me seguía mirando, ahora con un brillo extraño en sus ojos, casi parecía un niño emocionado. Asintió lentamente mientras me regalaba una sonrisa.

Por Una Noche | [JJK] [BTS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora