𝒕𝒘𝒆𝒏𝒕𝒚

3K 347 22
                                    

( ☆

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

( ☆. 𝐶𝐻𝐴𝑃𝑇𝐸𝑅 𝑇𝑊𝐸𝑁𝑇𝑌 )

𝚞𝚗𝚊 𝚗𝚊𝚟𝚒𝚍𝚊𝚍 𝚍𝚒𝚏𝚎𝚛𝚎𝚗𝚝𝚎.

Los sueños no se habían detenido desde la noche de Halloween, normalmente Alaska no los recordaba en su mayoría o no eran tan importantes como para pensar en ellos. Sin embargo el de la mañana de Navidad fue diferente. No se trataba de un vivido recuerdo de su infancia ni nada parecido, era extraño.

Se despertó de golpe, empapada una vez más de pies a cabeza en sudor frío. Ann se había levantado, era la única que se encontraba en la habitación, se veía preocupada.

Alaska recordaba con exactitud lo que vio mientras dormía. Aquel hombre otra vez, el que la había dejado, parecía estar arrepentido de su decisión y le cantaba de sus razones, la depresión por la que estaba pasando y cientos de otros problemas. Tuvo la sensación de que ese hombre se había metido dentro de su cabeza para dejar todas esas ideas.

—Está vivo. —Soltó la rubia sin pensarlo antes.

—¿Qué? ¿Alaska, de que hablas? —Su amiga hizo un ademán para acercarse, para tocarla pero ella no lo permitió.

—¡No! Por favor, Ann, te lo pido. No me toques, no ahora.

Se levantó de la cama mientras le prometía a Ann que estaba bien, que no ocurría nada malo con ella. Se dirigió directamente hacia el baño para ducharse en agua fría, necesitaba aclarar su mente y pensamientos. Ni por un segundo se creyó el discurso de aquel hombre, sabía que no existía ninguna razón entendible para intentar matar a alguien, a una niña. Alaska nunca perdonaría a ese hombre. Nunca.

Terminó de ducharse, ya estaba lista para fingir frente a Ann y decirle que todo estaba bien, que solo fue una pesadilla normal. La castaña estaba sentada a los pies de su cama y cuando la vio salir del baño se puso en pie, no le dijo nada. Le entrego un paquete envuelto en papel navideño y le dijo:

—Tu regalo de Navidad, espero te guste —Le dirigió una leve sonrisa al entregarle el paquete—. Te esperaremos con los chicos mientras abres tus regalos.

Alaska desvió su mirada a los cuantos paquetes que tenía sobre su cama, cuando regreso la mirada a Ann ya se había ido. Abrió el paquete y vio un libro que se titulaba Hechizos de Dificultad Máxima; el primer regalo que tomó se lo envió Blaise, se trataba de una pulsera y un anillo de plata a juego, realmente hermosos; Lukas por su parte le regalo un viejo libro sobre la magia oscura, le gusto pero lo guardo de inmediato. El último era de Draco, una diadema plateada junto con una nota, donde le pedía que la usara esa noche durante el baile.

El Baile de Navidad, había olvidado por completo que aquello se celebraría esa noche. Se había pasado los últimos días "discutiendo" con Cedric acerca del Torneo, ella quería ayudar con la Segunda Prueba pero el castaño se rehusaba a decirle de que trataba la pista, quería intentar resolverlo por su propia cuneta. Al menos hasta finales de año, le había dado ese tiempo hasta que le permitiría ayudar.

regreso del señor tenebroso ⁴ ━━ harry potter sagaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora