Aun sin merecerlo o aun mereciéndolo.

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Aun sin merecerlo o aun mereciéndolo.

Cuando había pensado que las cosas habían llegado en un punto donde no podían ser peores, ese solo pensamiento se convirtió en la invocación de algo mucho peor. No es que fuera demasiado ágil o deportista, por lo contrario era bastante torpe en cuestiones que involucraran un esfuerzo o coordinación física.

Y ahora se encontraba completamente llena de lodo, después de resbalar por un borde del lago y no conforme con eso rodo hasta  ir a parar a las gélidas aguas. Sin duda las cosas siempre tienden a empeorar cuando piensas que ya nada malo puede pasar.

El sentimiento de alivio no le había durado más que unos minutos, dándole una corta sensación de bienestar en el que se dio el lujo de atravesar la columna de setos que se levantaba frente a ella y que ocultaba medianamente esa peculiar salida del castillo. Quedo maravillada al encontrar ese escondido lugar del que estaba segura pocos o ningún estudiante conocía.

Los jardines no estaban tan cuidados como el resto del castillo,  la vegetación crecía con libertad, sin embargo, era precisamente ese detalle lo que le daba al lugar un toque especial. Flores silvestres de exóticos colores y de formas tan variadas crecían como por descuido salpicando el verde del césped bastante crecido que parecía levantarse como una alfombra sobre la explanada, musgo, hongos y de  más plantas armonizaban con la naturalidad propia del lugar.

Curiosa como era se aventuro a explorar esa diversidad de flora y camino claro sin comprobar la estabilidad del suelo que pisaba, se acerca demasiado a la borde donde cedió la tierra que pisaba haciéndola rodar por la pendiente hasta que termino sumida en el agua del lago.

Con bastante trabajo logro salir de las frías aguas que le provocaron de inmediato un entumecimiento tal que engarrotada por el frio no lograba encontrar su varita de entre sus pesadas ropas ya mojadas, a gatas consiguió salir por fin arrastrándose hasta poder ponerse de pie, sus dientes tiritaban de frio y se sacudía de manera violenta en espasmos. Tan rápido como le fue posible considerando su estado, se quito con esfuerzos el grueso abrigo  que ahora estaba hecho una sopa y a penas se disponía a tomar su varita que llevaba bien oculta en la bolsa trasera de sus pantalones algo golpeo contra ella haciendo que se precipitara de nuevo al interior de las ahora agitadas aguas.

Le llevo un par de minutos reaccionar y darse cuenta que era lo que la  había pasado, y la había derribado haciéndola entrar de nuevo al lago y la respuesta llego tan pronto vio manotear a su lado jalando grandes bocanadas de aire al estúpido de Malfoy.

Cuando el descolorido muchacho salía por la brecha observo rápidamente a su alrededor buscando su objetivo, no reparo mucho en apreciar el lugar como lo había hecho Hermione, pero lo que le hizo quedarse pasmado fue encontrar la figura de la castaña y segundos después verla desaparecer mientras escuchaba un fuerte grito salir de su garganta.

Con varita en mano y con una sensación de vacío en el estomago se acerco al lugar donde había desaparecido su enemiga, y al hacerlo respiro aliviado al ver que solo se había resbalado la muy idiota,  estaba preparado para soltar una sonora carcajada ya que leona  ahora parecía mas una gata mojada saliendo a rastras del agua toda empapada y enlodada. Pero no logro su objetivo cuando dio un paso en falso  y sin poder remediarlo resbalo llevándose a la apabullada Gryffindor con el de regreso a las congeladas aguas.

En el impacto ambos habían soltado sus respectivas varitas y ahora estaban con el agua hasta las orejas, enlodados de pies a cabeza y con los rostros contraídos por el odio que se profesaban en cada miraba asesina que se dedicaban uno al otro.

Hermione temblaba aun más pero ahora no era solo por  frio, ahora era más por pura rabia, incluso sentía su rostro excesivamente caliente, salió con toda la dignidad posible de alguien que se encontraba con la blusa blanca completamente transparente pegada al cuerpo como una segunda piel y sus pantalones favoritos antes azules ahora de un color entre café oscuro  y verde vomito, entre el  lodo y las plantas que llevaba pegadas y que decir de su cabello que por sí solo y de manera cotidiana era un lio tremendo ahora era algo parecido a un nido de pájaros con las ramas y hojas secas incluidas.

Draco Busca EnamorarseWhere stories live. Discover now