Ava Collins era una chica ordinaria, con una vida medianamente feliz y extraordinariamente aburrida... Ethan Jones era un chico problemático, medianamente fiel y extraordinariamente atractivo, ellos tuvieron un encuentro dos años atrás ¿Qué pasará c...
No podía quitarme a esa niñata de la cabeza, la noche anterior había estado tan cerca de nosotros, pude notar que es una chica auténtica y muy hermosa, no aparenta ser alguien más y eso me había gustado aún más, además era la primera en no estar detrás mío molestando pidiendo una oportunidad, para ella yo era otro chico estúpido más y tenía muy bien ganado el titulo por lo idiota que me había portado pero no sabía de qué manera actuar ante ella, es decir, había estado con muchas mujeres muy hermosas pero ninguna como Ava, todas habían sido liberales y de mucho mundo pero nadie tan sutil e inocente como ella por eso se me hacía difícil tratarla y mirarla con malicia y deseo era algo que no podía, mis pensamientos y deseos para con ella eran distintos, para ser más explícito a ella no me la imaginaba debajo de mí gritando mi nombre, a ella me la imaginaba acurrucada en mis brazo... ¡pero que mierda te está pasando Ethan!... Ava no se merecía un tipo de porquería como yo. Solo esperaba verla otra vez, estar pensando tanto tiempo en una sola persona me asustaba, era nuevo para mí.
Estuve en mi motocicleta esperando a ver si ella llegaba y pedirle disculpas por cómo me había estado comportando pero nunca apareció.
Mi día de porquería como todos los días de porquería en el instituto de pronto comenzaba a cobrar sentido esperaba verla y saber que estaba bien y que era real. Nos sentamos en nuestro lugar de siempre mis amigos y yo, luego llegaron las chicas.
-¿Puedo sentarme junto a ti Et?- preguntó coqueta Sam pero no podía permitirme seguir teniendo la misma imagen ante Ava aunque ni siquiera me volteara a ver.
-Algunos también necesitamos nuestro propio espacio- Le dije y automáticamente la sonrisa en su rostro se borró y se sentó enfrente.
-Creo que el señor del instituto dejó el humor en casa- Bromeó Robert pero no hice caso seguí serio. Ellos comenzaron a platicar y la vi entrar a ella y a su amiga, detrás suyo venia un tipo, sentí una extraña sensación de molestia... "¡¿Quién era ese idiota?!"... ellos iban sonriendo y a ella se le notaba feliz, que estupidez sentir celos de alguien que no te pertenece.
-¡Ya viste Sam!... ¿Con qué galán está tu hermana?- Alison y sus comentarios idiotas
-Es de segundo año se llama Connor Krausz viene de intercambio es el mejor tirador de fútbol americano en su instituto, será el sustituto de capitán en el equipo- Dijo John, a nadie le importaba tanta información, yo solo quería saber una cosa ¿Qué hacía con ella?.
-Tal vez mi hermanita ya se cansó de ser virgen- Dijo Sam y todos comenzaron a reírse, apreté la mandíbula, no me había hecho ninguna gracia lo que había dicho.
-Nunca ha metido a alguien en su habitación, quien quita y estaba esperando a un bombón como ese- -¡¿Podemos hablar de otra jodida cosa que no sea tu hermana?!- casi grité interrumpiendo a Sam, y algunas personas de las mesas alrededor voltearon a vernos incluida Ava y sus acompañantes.
-Et ¿Qué te pasa?- preguntó desconcertada Madison. -Es solo que me irrita que estén hablando de las personas- -De las personas o de ella en particular porque pareciera que no la soportaras. ¡Ella no te ha hecho nada Ethan!, Ava es una chica al parecer extraordinaria y lo que menos necesita en su vida es un problema como tú- Dijo Tom, mi mejor amigo siempre tenía la razón, ella no necesitaba un problema como yo.
Me levanté de la mesa enfadado y salí de ahí molesto, no con Tom por lo que me había dicho si no conmigo mismo porque mi amigo tenía la razón, me fui al muelle en las afueras de la ciudad a desestresarme y alejar todos esos estúpidos pensamientos necesitaba divertirme, beber, hacer algo que alejara a la pequeña Collins de mi cabeza.
Después de que Ethan dejó el comedor no lo volví a ver en la escuela y eso era un poco desesperante, yo estaba en esa cómica situación de querer esconderme de él pero conformarme con solo verlo. Tom él mejor amigo de Ethan entró a la optativa y él me dijo que al parecer Et (como le decían sus amigos) había llegado de mal humor y habían tenido un pequeño desacuerdo llegué a pensar que se trataba de mí porque en el comedor me volteaban a ver y murmuraban cosas pero al parecer estaba equivocada.
A la hora de la salida Connor el chico de intercambio se acercó a mí para invitarme a los helados en agradecimiento por ayudarlo a conocer el instituto y aunque me negué rotundamente varias veces él insistió y terminé aceptando.
Connor era un chico muy atractivo, llegó con las mejores notas de su antigua escuela y sería el sustituto de capitán de fútbol americano, era un año mayor que yo, él tenía diecisiete años ya que había perdido un año de clases por irse de intercambio a jugar durante un año a Rusia, además en tan solo un día había hecho varios amigos cosa que yo no había hecho en las semanas que llevaba ahí, él también había robado más de un suspiro en las chicas, definitivamente Connor era un chico ejemplar.
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Después de ir a los helados Connor me llevó a casa en su auto. Durante la toda la tarde estuve en mi cuarto leyendo, luego me puse a ver una película e intencionalmente volteaba a ver hacia la casa de Ethan para ver si había llegado pero no había señales de vida... ¿Que habrá pasado con él? ¿Dónde estará? ¿Qué le sucedía? ... No dejaba de pensar en él ni un segundo, aunque sabía que no me toleraba y yo no era el tipo de chica que le agradaba no podía dejar de pensar en él, y no era solo desde que empecé a tratarlo si no desde mucho tiempo atrás, desde que me había robado un beso, nunca nadie jamás me había besado otra vez.
Me despertó un sonido que venía del pasillo, aparté el libro de mi cara que seguramente me había caído encima al conciliar el sueño, eran aproximadamente la dos de la madrugada, salí a ver que pasaba, estaba oscuro así que caminé con pasos inseguros intentando no chocar con nada, entonces tropecé con algo o mejor dicho, con alguien... quedé congelada al ver de quien se trataba... Ethan...
Él se acercó a mí -¿Qué estás haciendo aquí?-pregunté algo desconcertada, ¿Cómo era qué él había podido entrar?, Ethan solo me agarró de las mejillas y me acercó a él...
