Capítulo 16

7.4K 567 94
                                    

Tormenta.

Isaac, Scott, Stiles y Kira estaban en pleno examen de historia cuando la campana del receso sonó, y por suerte casi todos acabaron la prueba justo a tiempo. Excepto Stiles. Al chico aún le faltaba la mitad. Y si no hubiese sido por su mismísimo profesor, lo hubiera terminado.

Se levantó a regañadientes de su asiento y fulminó al profesor Hale, quien tomaba los exámenes que los alumnos le entregaban y se retiraban.

—Te falta más de la mitad, Stiles —exclamó Isaac por lo bajo, fisgoneando desde atrás, por sobre el hombro del castaño. Stiles le miró mal y se salió de la fila hacia el escritorio de Derek, para esperar a que todos entregasen sus pruebas y poder reprender a su novio una vez que todos se fueran— ¿Vas a subir tu nota colocándote debajo del escritorio? —bromeó bajito.

—Cállate o te golpearé hasta que tus rulos se vuelvan lacios —se enfadó el más bajo. Se sentó sobre uno de los pupitres y esperó impacientemente. Y una vez que Isaac terminó de reírse sin importar que Derek le viera, cerró la puerta y dejó a los novios solos.

—¿Por qué me miras así? —empezó Derek frunciendo el ceño. Amaba hacer enojar a Stiles sonando prepotente y serio. Sabía que aunque el castaño le hacía caras, le enloquecía que bromeara así.

—Te odio.

—¿Y eso? —El moreno se cruzó de brazos.

—Si no hubieras entrado a mi cuarto, iba a ser el primero en entregar esta prueba, Derek —musitó enojado, entregando el papel en sus manos.

—Profesor Hale —le corrigió— Y avisé sobre la prueba hace cuatro días, Stilinski. No me eches la culpa.

—Sabes que yo solo necesito un rato para estudiar y tú no me lo permitiste —devolvió enojado— Tienes que considerar eso.

Derek dejó el papel en el escritorio y caminó alrededor del mueble hasta el chico. Le miró de pie a cabeza y volvió a cruzarse de brazos frente a él. Pero el chico no se amedrentó.

—¿Crees que por ser mi novio tengo que darte tratos especiales?

—Sí —contestó tajante, también cruzando los brazos a la altura de su pecho.

—No. Pero sí puedo castigarse si te va mal o recompensarte si te va bien.

Con aquello último el chico no aguantó más y sonrió radiante al ver lo autoritario y sexy que se veía Derek actuando así.

—Tienes suerte de estar tan bueno —musitó bajito, dándole un casto beso y alejándose otra vez.

Derek tampoco lo soportó y sonrió con ganas.

—Tienes razón, cariño —le dijo acariciándole la mejilla con el pulgar— Pero no te preocupes. No eres el único que no terminó el examen pero pueden seguir después del recreo.

—¿En serio? —preguntó con sus ojitos brillando de alegría. El moreno asintió esbozando una sonrisa y Stiles le besó la mejilla antes de ir hacia la puerta.

—Stiles... —le llamó su novio en cuanto el menor agarró el picaporte.

—¿Sí?

Lentamente el mayor se acercó y se colocó a su lado.

—¿Te gustaría ir a Canaán el fin de semana que viene? —preguntó tranquilo.

—¿A Canaán? ¿Para qué? —Stiles le observó dudoso.

—Conseguí dos entradas para el juego de los Dodgers el domingo y creí que querrías ir conmigo. Pasaríamos el sábado recorriendo la ciudad y nos levantaríamos el domingo temprano para desayunar e ir al campo al mediodía. El juego es a las dos.

La casa del Tío Peter | Sterek | Where stories live. Discover now