Styles ~LS- A-B-O~

18

La habitación era un desastre, ¿Es que acaso podía aún tener la calidad de habitación? No, demonios, era un caos completo, luciendo como si hubiese ocurrido una explosión nuclear justo en el centro del lugar, sin embargo, había pasado algo bastante similar ¿no?

Joder. 

Había sido,sin duda,el peor celo que había pasado en toda su vida, aunque no es que hubiese pasado muchos tampoco, pero, sin miramientos había sido escabroso, los pocos recuerdos de la lucidez que había tenido en medio de la tragedia estaban como imágenes en lento movimiento reproduciéndose de manera incompleta en sus recuerdos. 

Podía verse a sí mismo rugir, gruñir, lanzar y romper cosas, estaba seguro de que en algún momento junto a él se presentaba alguien, quien, lamentablemente sufría también la dura ira que llevaba, echaba a esa persona de la habitación y luego continuaba con su rutina de demoledor. Los recuerdos borrosos pasaban de él rompiendo algo a estar dando patadas y lanzando cosas al aire, gruñendo con los colmillos al aire y el desespero fluyendo por sus venas. 

Siendo sincero, le dolía todo el cuerpo, creería que así se sentía que un camión pasara sobre su cuerpo, no podía diferenciar donde estaban sus extremidades porque todo lo sentía magullado, tenso y jodidamente adolorido, creería entonces que los ojos no podrían estar doliendo, pero no era su suerte, porque le picaban y los sentía pesados, además del constante martilleo en su cabeza, los fanales no lo podían llevar bien, pero aún con eso observó el desorden que inundaba lo que era su cuarto, las cortinas apenas prendidas de los soportes, la tela rasgada dejando colar la luz, y sí, los vidrios del par de ventanas tampoco estaban, eso podría dar una explicación a la corriente de aire frío que circulaba, las paredes verdes no estaban en una mejor situación, muchísimas manchas y golpes donde la pintura y el yeso se había erosionado, los pocos afiches de deportes que alguna vez había puesto en las paredes ya no existían más, los papeles estaban totalmente rasgados y desechos,  el espejo hecho añicos, las lociones y demás artículos que antes reposaban sobre la mesa estaban desintegrados en todas partes, las pocas cosas que había puesto alrededor del espejo, recuerdos de amigos, postales y fotografías diversas ya no tenían lugar a la existencia. Las mesas a los lados de su cama ya no portaban lámparas, los cables colgaban y pudo ver una de las lámparas aún sujeta de su cable, parecía como si se hubiera suicidado ante la ira que destruyó todo. El clóset no tenía una de sus puertas y algunas prendas, las pocas sobrevivientes, colgaban, como temerosas, de sus ganchos. la puerta del baño estaba sujeta con sólo una de sus bisagras y desde la cama alcanzaba a observar que el desastre no se había limitado a la habitación, también había alcanzado el baño. 

Levantó las manos lentamente y no fue una sorpresa hallar los nudillos hinchados y con sangre seca, también le dolían severamente. Apoyó las manos a los costados en el colchón, frunció los labios ante el dolor que le llenó el cuerpo, se sentó lentamente, y, oh sorpresa, el culo también le dolía, ¿Qué mierda había hecho para que eso pasara? él no tenía la más mínima idea.

Se levantó de la cama y se vio obligado en apoyar una mano en la pared, las piernas le temblaron horriblemente, y por poco le da un beso de buenos días al suelo, inspiró profundamente una variada cantidad de veces, intentando también mitigar el mareo que le inundó la cabeza, tratando de estabilizarse. Cuando lo hubo conseguido dio un paso alfrente, y consiguió duramente reprimir el grito que iba a salir, apretó los labios fuertemente, la cara se le enrojeció por completo y dio un saltó hacia atrás. Cayó en la cama, se tragó una maldición y respiró fuerte y rápido. 

Al levantar el pie para observar qué mierda había ocurrido y que fue lo que le trajo ese fuerte corrientazo de dolor atravesando todo su cuerpo. Una ligera corriente de rojo danzando por la planta de su pie fue lo consiguió ver, maldijo bajamente agarrando la sábana y limpiando la sangre, el pie doliendo mucho más debido al contacto brusco que se daba, consiguió limpiar la sangre y resopló un segundo antes de agarrar el trozo de vidrio con la punta de los dedos y halarlo fuera de su piel, jadeó un resoplido y apretó las manos, el trozo de vidrio lo dejó a un lado y se concentró en limpiar la sangre que fluyó inmediatamente por el lugar donde había estado el vidrio. Finalmente no tuvo otra opción que envolver la sábana en su pie, la maldita sangre no dejaba de fluir, así que apretó fuerte y resopló cansado, tratando de ignorar el punzante dolor en su extremidad inferior, cuando miró al suelo se dio cuenta que en realidad había muchos vidrios por toda la madera, apretando los labios se movió sobre la cama tratando de buscar algunos zapatos, cuando halló una zapatilla negra bajo la cama agradeció infinitamente porque era una diestra. Calzó el zapato y luego se levantó de la cama, el pie izquierdo suficientemente protegido con la sábana envuelta fue suavemente apoyado en cada uno de sus pasos, vistió un bóxer de color oscuro y salió de la habitación, la casa luciendo soledad completa mientras se movía por los pasillos, bajo las escaleras lentamente, no colocando mucha presión sobre el pie lastimado, en la sala no había nadie, así que caminó directo a la cocina.