Todo por ti (Camren G!P)|Editado|

Capítulo 61 (Final): Solo di que sí...

-¿Qué te parece? ¿Es buena idea? Regálame alguna palabra, mi amor...- la miro esperanzada.

-Bbbrrrruu...- mi bebé tan solo se limita a balbucearme y sonreírme divertida, una sonrisa embobada brota en mi rostro.

-tomaré eso como un sí...- le toco la puntita de su nariz con mi dedo índice.

-Camila...- escucho la voz de Lern algo alterada, me incorporo quedando sentada en el suelo con mi espalda recostada en el borde del sofá.

-Eh... ¿Sí?- le respondo algo dudosa dirigiendo mi mirada hacia ella y encontrándome con sus lindas cejas levemente fruncidas- ¿Qué pasa?- le pregunto posando mi mirada en Mía, quien se encuentra tomada de su mano con su cabecita gacha.

-anoche otra vez olvidaste cerrar con llave la puerta del cuarto...- me dice severamente, Daphne en mis brazos suelta una risita al ver a su madre ojiverde.

-¿Cuarto?- le digo ladeando mi cabeza- anoche...- trato de entender lo que me dice, Lauren me mira severamente, con cada segundo que pasa su rostro se torna mucho más indignado.

-Ooohh...- digo finalmente recordando lo que habíamos hecho anoche, mis mejillas se tornan de un rojo intenso al rememorar todas las cosas que hicimos en el cuarto rojo luego de que las niñas se durmieran.

-Exacto...- me reprocha rodando los ojos- Mia, cariño...- su tono de voz y su semblante cambia rotundamente por uno dulce e indulgente al dirigirse a mi hermanita- ya te he dicho que no puedes jugar en el cuarto rojo...- le dice con cariño inclinándose a su altura.

-Pero yo... Es muy entrretenido...- le responde inocentemente Mía elevando su mirada hacia Lauren, mi prometida le sonrie tiernamente y le acaricia sus mejillas sonrojadas- Hay... Hay muchos juguetes... Y cuerdas- comenta con emoción, dejo salir una risita baja al recordar la vez pasada cuando Mía saco uno de los látigos de la habitación, lo amarro al collar de Leo y lo saco a pasear por el vecindario, Lolo esa vez estaba muy alterada y avergonzada, y todo porque el látigo tenía escrito en toda su extensión ¡Fuck You! En grandes y llamativas letras brillantes. Prácticamente casi todos los vecinos vieron como Lolo corria detrás de Mía y Leo para quitarle el vergonzoso accesorio.

-No son juguetes, Mía- Lolo trata de convencer a la pequeña, pero si son juguetes, pienso- son cosas que solo pueden utilizarlas personas grandes...- le continua hablando con cariño mi prometida.

-¿Porr eso las paletas de pin-pon son grrandes?- le pregunta interesada la pequeña. Debe referirse a las paletas que se utilizan para hacer spanking, siento como mis mejillas se sonrojan al recordar la ocasión en la que nalguee a Lauren con una de esas paletas, al parecer mi ojiverde también lo recordó  por la mirada que me dirige y por su rostro que se torna rojo.

-El... El caso es que no puedes entrar en el cuarto, Mía.- Lauren esquiva la pregunta algo nerviosa.

-perrrro también hay un cuu... Culumpio- le dice cabizbaja mi hermana, Lauren me dirige una mirada de auxilio para que intervenga.

Acomodo nuevamente a Daphne entre todos los cojines y sus juguetes, me pongo de pie y me acerco hacia mi hermanita- ¿Mia, quieres un columpio?- le pregunto inclinándome hacia ella, de inmediato a mi hermanita se le ilumina el rostro- Si prometes no volver a entrar al cuarto rojo... Yo pondré un columpio en el patio- Lolo a mi lado niega divertida al escuchar mis palabras.

-¿En serrrio?- a Mía al parecer no le importa mi sutil intento de convencerla.

-Claro...- le sonrio revolviéndole su cabello.

-está bien...- nos brinda una radiante sonrisa- lo prrometo...- lleva una de sus manitas al pecho como siempre lo hace para prometer algo, Lauren la mira enternecida.