Bastian
Dejé a Nanny sobre su cama para que pudiera descansar y salí corriendo hacia la casa de Lucas. Algo tendría que hacer, algo se me tenía que ocurrir para salvarla. Sabía que haber quemado esa caja no iba a ser suficiente, así que pensé que Lucas podría admitir que fue él y decirme cómo terminar con la maldición. Fui ingenuo, la desesperación provocó que actuara como un estúpido, ¿Cómo voy a pedirle ayuda a alguien que no quiere a mi hermana? Lucas la maltrató durante años, no creo que me ayude a salvarla en este momento.
—¡Adelante!
—Soy yo, Bastian.
—Sí, sí. Pasa. —Abrí la puerta y lo vi. Estaba sentado en el sillón, con un ojo morado y el labio partido. ¿Con quién se habrá peleado?
—Tengo que hablar con vos.
—Soltalo todo. —Lucas se levantó, rengueó hasta la mesa, y me invitó a sentarme frente a él—estamos solos, así que no te preocupes.
—¿Qué te pasó en el ojo?
—Una pelea, nada más… ¿Qué necesitabas decirme?
En ese momento pensé que sería estúpido preguntarle algo como esto a alguien que solamente era un sospechoso. No tenía pruebas, no tenía nada para acusarlo.
—Nada. Mejor me voy, ¿sí? —Me levanté y caminé hacia la puerta.
—¿Algo malo le está pasando a Nanny? —Su pregunta me heló. Di media vuelta, estaba furioso. Quería matarlo; fue él, ahora sí que estoy seguro.
—¿Qué le hiciste a mi hermana?
—A demás de lastimarla psicológicamente, nada. ¿Por qué?
—Vos. Vos fuiste, ¡Sos una mierda! —Me abalancé sobre él y lo golpeé. Lucas me bloqueó rápidamente y me inmovilizó.
—¿Yo qué? No lo entiendo, ¿qué es lo que le hice ahora?
—Admitilo Lucas, vos metiste esa caja de madera dentro de la muñeca para que Nanny se enfermara.
—¿Qué? ¿Qué mierda estás diciendo, viejo? —Lucas me soltó y me observó confundido. Sus ojos no se veían culpables.
—Vos fuiste el de la maldición, ¿No?
—¿Qué maldición? ¿Qué cosa? ¡Ah! Ya entiendo todo… ¿Pensaste que fui yo? ¿Por qué no miras más de cerca?
—No entiendo…
—Yo que vos, sospecharía de personas más cercanas. No sé, podría ser Omar ¿o me equivoco?
—No.
—¿Es que no te das cuenta, boludo? Omar está metido en la delincuencia, ahora se junta con los chorros, ¡se droga! ¿Nunca lo viste?
—¿Y qué tiene que ver eso con todo lo que te estoy diciendo? —No entendía a Lucas, sus palabras no completaban el rompecabezas de mi mente.
—Pensá un poco—, dijo. —Omar está así por alguna razón, por la culpa de alguien. ¿Y quién es la que lo cuida? ¿La que lo crió?
—Susana.
—Bien, ella misma. ¿Nunca la observaste bien a esa vieja? ¡Tiene una cara de bruja! Estoy seguro que esa mujer está metida en la brujería. Bastian, conozco personas que practican magia negra y estoy seguro que Susana es una de ellas. Lo sentí cuando la vi por primera vez, lo sentí.
—Alguien quiere destruir a Nanny.
—Créeme que ese no soy yo. Es ella, claramente es ella.
—¿Cómo voy a creerte si lastimaste a Nanny todo el tiempo? Quiero pruebas.
