Capítulo 46: Tan Lejos, Tan Cerca

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— ¡Amanda! ¡Está temblando! —exclama Hemsworth, bastante alarmado con el movimiento. 

— Ya sé... en Chile tiembla a cada rato, Liam. —Ella bosteza pero no se mueve de la cama.

— ¡Está temblando fuerte, Amanda! —Liam está sentado en la cama, a punto de levantarse.

— ¡Es sólo un temblor chico! ¡Ya pasó!—espeta Amanda bostezando de nuevo, cuando disminuye la intensidad del movimiento, levanta apenas la cabeza para mirar y regañar a Liam, añadiendo con el ceño fruncido—: ¿Y me despertaste por un temblorcito cualquiera?

— Fue fuerte... no sé tú, pero en Australia, esto es un terremoto —dice el actor.

— Ni siquiera llegó a los 6º Mercalli, te apuesto. Lo sentimos más fuerte porque estamos en altura, estamos en un quinceavo piso... es lógico que el edificio se mueva con el temblor porque es antisísmico. Relájate. Sólo fue otro temblor más...

— Me asombra tu tranquilidad.

— Soy chilena, Liam... estoy acostumbrada a que se mueva el piso. Y fue sólo un temblor más. Sigue durmiendo. —Otro largo bostezo, Amanda acomoda su cabeza en la almohada.


Liam Hemsworth continúa sentado sin moverse por un rato, hasta convencerse que el temblor efectivamente haya pasado. Entonces se acomoda junto a Amanda y la envuelve en sus brazos, ella pasa su cabeza al torso de Liam. Se queda dormida pronto, porque ha tenido un largo día estudiando en la universidad. Hemsworth todavía no vuelve a conciliar el sueño, el temblor y una siesta que durmió por la tarde lo han desvelado, toma su celular y revisa correo y chat . Chris está conectado en Londres, junto a Elsa, falta un mes para el nacimiento del primer bebé de la pareja. Se saludan y hablan un rato hasta que Liam decide volver a dormir.


— Buenos días, mi amor.

— Buenos días, nena.


Amanda y Liam se abrazan y se besan aún en la cama. Ella enreda sus manos en el pelo claro de Liam y él acaricia su cadera y una pierna. Ella se levanta y él la sigue, fascinado con sus glúteos y caderas oscilantes.


— ¿A qué hora vamos por Dannae? —pregunta Liam mientras ambos se lavan los dientes.

— En cuanto estemos listos. ¿Desayuno a la cama o ducha primero?

— Primero quiero hacerte mía... ven aquí conmigo. —Hemsworth atrae a Amanda de vuelta a la cama para acariciarla y ella se monta arriba de él sonriente.


Hicieron el amor, se ducharon y bajaron a desayunar a uno de los restaurantes del hotel. Casi a las nueve con treinta estaban llegando al hogar Santa Miccaella para recoger a Dannae, que desbordaba de felicidad por pasar todo el fin de Semana Santa con su madrina y tío Liam. Decidieron llevarla primero al Parque Forestal en el centro de la ciudad, donde se entretuvo en los juegos infantiles, soplando y reventando burbujas, también la ayudaron a recolectar bayas de encinas y castañas de la India para manualidades del jardín. El parque ya estaba teñido con los colores dorados, rojizos y anaranjados del otoño, se sacaron varias románticas selfies y también con Dannae. 

Almorzaron en el Mercado Central. La tarde se les fue en el cine y tomando té con galletas con la tía Clara y Mauricio. Salieron ya de noche del departamento y subieron al vehículo para volver al hotel con la niña. Dannae recorre fascinada la suite. Amanda ha traído DVDs de las películas favoritas de su ahijada, pero Liam decide entregarle la mochila de regalo y Dannae pierde todo interés por la pantalla. Tras abrir el cierre para ver el contenido, la pequeña chilla y salta de felicidad: la mochila contiene dinosaurios, crayolas, libros de pintar y un koala de peluche. Amanda tiene que negociar con su ahijada para bañarla con los dinosaurios porque no quiere soltarlos. Finalmente se queda dormida sobre la cama matrimonial de la suite, en medio de los juguetes y las crayolas, entonces Amanda y Liam la acuestan en la otra habitación de la suite, cerrando luego la puerta de la alcoba matrimonial.

Amanda y Liam. Tú + Yo = 3Where stories live. Discover now