Capítulo #18

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-Entonces, ¿cómo te fue?-Preguntó la ojiverde mientras golpeaba levemente el hombro de su amiga, llamando su atención. Tenía una gran sonrisa traviesa en su rostro, cosa que hizo enrojecer aún más a Verónica.-Mírate, parece que te ha ido muy bien.

-Bueno, si. Estuvo genial.-Admitió la castaña con una pequeña sonrisa.-Lucy es jodidamente adorable y...nos besamos y todo.

-¡¿DE VERDAD?!-Gritó entusiasmada Lauren recibiendo un golpe por parte de su amiga.-¡No me pegues!

-Te lo merecías. Por ser tan idiota.-Le contestó Verónica rodando los ojos.

Ambas chicas conversaban animadamente en la cafetería de la escuela. Resultaba que Vero no tenía ganas para entrar a la clase de química, mientras que el profesor de teatro de la ojiverde se había ausentado.

-¿Y entonces?

-No sé. Nos estamos conociendo. Más....íntimamente.-Explicó Verónica, haciendo a Lauren esbozar una sonrisa traviesa.-¡No de esa forma!-Exclamó golpeándola otra vez, completamente sonrojada.

-Sólo estoy bromeando.-Lauren le dijo después de dejar de reír y terminó por darle un suave y amistoso apretón en el hombro a su amiga.-Pero me alegra mucho que tu estés feliz también. Deberías agradecerme.

-Es cierto. Si no fuese por tu drogadicto culo probablemente no le habría hablado antes.-Bromeó ella haciendo que la ojiverde rodase los ojos.-De cualquier forma, ¿por qué estás aquí? Podrías estar durmiendo en este momento.

-Voy a esperar a Camz.-Le contestó mientras Vero hacía caras de asco en broma.-Sólo quiero saludarla.

Charlaron durante un rato más, hasta que Lauren vio a Camila pasar rápidamente por el pasillo y decidió seguirla, ya que su novia parecía bastante nerviosa.

-Camz, Camila.-Llamó haciendo que la morena se girase para mirarla y siguiese caminando aún más rápido.-¡Eh, Camila! ¿Qué te pasa?-Preguntó finalmente tomándola del brazo sin mucha fuerza.

-¿Qué haces aquí? Tengo prisa.-Le dijo mientras se cruzaba de brazos y golpeaba con el pie el piso nerviosamente. Era extraño, porque no era la primera vez que Camila reaccionaba así mientras estaban en público. O más bien, en la escuela.

-Tenía teatro pero el profesor no ha venido y tan sólo quería saludarte, ¿eso está mal?-Preguntó con una pequeña sonrisita esperanzada, mientras trataba de mirar a su novia a los ojos, pero la morena no le correspondía y envés de observarla a ella, Camila miraba detrás o a los lados de Lauren, monitoreando que nadie estuviese cerca.-Eh, ¿me vas a decir por qué te comportas así? Estas actuando muy extraño.

-No me pasa nada, Laur. Por favor, me tengo que ir. Nos vemos luego.

Y sin decir más, Camila prácticamente corrió fuera de la vista de su novia, quien se quedó parada en medio del pasillo, aún mirando la dirección en la que se había ido.

Algo extraño está pasando. Eso era lo que pensaba la ojiverde. Y vaya que estaba en lo cierto.

Claro, ella no iba a quedarse de brazos cruzados, así que en cuanto reaccionó, comenzó a caminar rápidamente hacia la misma dirección en la que se había ido la morena, pensando que iría al patio o la cafetería, pero unos murmullos dentro del baño hicieron que ella parase en seco y se quedase delante de la puerta, acercándose para poder escuchar con claridad.

-¿A dónde te ibas, idiota?-Escuchó mientras miraba entre el pequeño espacio que había quedado gracias a que no habían cerrado del todo la puerta. Eran tres chicas. Dos de ellas estaban de espalda, y gracias a eso no podía ver la cara de la chica que estaba en su dirección, siento tapadas por las otras dos.-¿Te crees que no te vi hablando con tu noviecita? ¿Eh? Tortillera.

Una de ellas empujó a la que estaban acosando, haciendo que a Lauren le hirviese la sangre.

Y después de ese empujón, vino un golpe. Y con eso la chica a la que antes habían empujado, cayó al piso, finalmente pudiendo ver su cara.

Era Camila.

No lo pensó dos veces. Abrió la puerta inmediatamente y en cuanto las tres chicas se dieron cuenta de su presencia, una de ellas huyó, haciendo que sólo Camila y la otra chica, la cual había reconocido como la que había molestado antes a su novia quedasen dentro del baño.

-L-Laur yo puedo explicár...

-No.-Interrumpió la ojiverde sin siquiera mirarla, mientras tenía la mirada fija en la chica que había empujado a Camila, que también la miraba pero con bastante miedo en sus ojos.-No hables ahora. Y tú, no sabes con quién te has metido. ¿No te quedó claro que no debías molestarla? Ahora si que va quedar claro, hija de puta.

Al escuchar esto, la cara de su novia palideció, porque sabía que Lauren era completamente capaz de golpearla. Había visto a la ojiverde enojada, pero nunca a este punto. Sus ojos estaban más oscuros de lo normal, lo que era un poco espeluznante, y tenía tanta confianza en sí misma que te dejaba débil con tan solo mirarte.

-¡Deja de tocarme tú también, tortillera!-Dijo cuando la ojiverde se fue contra ella, tomándola de las solapas de su camisa.

Lauren no abrió la boca, quedándose aún más furiosa y sin dudarlo, golpeó directo a la cara de la chica, haciendo que está soltase un grito.

-¡Suficiente, Lauren!-Camila caminó hacia su novia y la arrastró con ella fuera del baño, caminando hacia el estacionamiento. Tomó su teléfono y con la mano libre le pidió a Dinah que mandase a la enferma al baño porque Lauren había golpeado a Jane.

En cuanto se encontraron en el estacionamiento justo al lado de su auto, Camila soltó la mano de la ojiverde, parándose frente a ella sin expresión alguna. Se pasó una mano por el pelo, sin saber muy bien que decir.

-¿Me vas a decir por qué reaccionaste así?-Preguntó después de un largo silencio, en el cual ninguna de ellas se atrevió a cruzar miradas.

-Porque estaba enojada. Y estoy muy molesta contigo también.-Admitió cruzando los brazos sobre su pecho, mirando a Camila bastante furiosa.-¿Por qué no me dijiste sobre esto, Camila? Sabías perfectamente que yo podía ayudarte. Estuviste tratándome mal frente a todo el mundo o simplemente me esquivabas y luego venias a mi casa y me rogabas perdón. ¡¿Qué es lo que quieres?!

-Perdóname, Lauren. Es que estaba muy asustada y no quería que ellas te lastimaran.

La ojiverde ni siquiera podía verle la cara. Estaba muy enojada, pero también decepcionada de su novia. Había estado ocultando esto durante bastante tiempo, y eso le dolía.

-Me voy.-Dijo finalmente Lauren, haciendo que Camila fuese hacia ella, tomándole el rostro con las manos mientras negaba desesperadamente con la cabeza una y otra vez.

-No, no, Laur. Vamos a hablar. No te vayas.-Le rogó sin soltarla, mientras que la rojiverde se mantenía cabizbaja. 

-No quiero hablar ahora. Me voy a casa.-Respondió la mayor de ellas separándose finalmente de su agarre.-Yo...te mando un mensaje o algo, después.

Y con eso, la rojiverde terminó por desaparecer del estacionamiento, caminando en dirección a su casa.

Y Camila por fin entendió que la había cagado. 

Pero no había dudas de que lo solucionaría.


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I KNOW, I KNOW. Muy corto. Sorry, estoy sin inspiración, pero hacía muuuuucho tiempo que no actualizaba y lo creía necesario.

Nos leemos!

Customer (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora