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YOONGI: Cuando fui a buscar a Jimin el único que quedaba en el aula era Jungkook, que como siempre, estaba en los momentos más oportunos. Suspiré, Jimin se había ido. Giré sobre mis talones para irme también de allí, pero su voz me detuvo.

-Se lo han llevado al baño.

Giré mi cabeza para poder verlo. La situación no pintaba bien, y Jungkook al ver mi cara tan solo se encogió de hombros.

-Eres un puto gilipollas, y juro que algún día te devolveré las que le has dado.

-¿No deberías pegarte a ti primero entonces? -mi pecho se encogió al instante.

-Sé que fui el primero en cagarla, pero sabes que todo empezó porque me gusta, tú lo haces por rencor -se encogió de hombros de nuevo.

-Pierdes el tiempo hablando de esto conmigo.

Tenía razón, no sé cuál de nosotros tres era el más cabezota, pero no era momento de pensarlo. Salí corriendo hacia el servicio más cercano, y nada más abrir la puerta sentí cómo toda la rabia acumulada durante meses llegaba a mí y controlaba mis terminaciones nerviosas. Podía sentir mi sangre hirviendo y la impotencia haciendo de mis manos puños en busca de algo que golpear. Ni si quiera sabía qué hacer, si partirle la cabeza a alguno contra el lavabo o correr hacia Jimin, tampoco es que pudiera pensarlo mucho.

Mis nudillos impactaron en la mandíbula del chico más cercano, en el primer lugar al que atiné. Todos me estaban mirando algo sorprendidos por la repentina intrusión, pero la impresión que causé no tardó mucho. Uno de los chicos tiraron de mi chaqueta para separarme del cuerpo con el que intercambiaba golpes. Mi codo llegó al estómago del chico y, girando hacia ellos, quedé con Jimin a mis espaldas, intercambiando miradas con el pequeño grupo de chicos.

-Quizás yo no tengo la fuerza ni el poder para hacer que paréis, pero sabéis que en el momento en el que me pongáis una mano encima podéis daros por muertos -advertí. No podía reconocer mi voz, nunca me había sentido tan enfadado como para querer matar a alguien a golpes.

Uno de los chicos, el que se juntaba parcialmente con Jungkook, chasqueó la lengua antes de murmurar.

-Vámonos, se me han quitado las ganas de mear -los chicos rieron y tuve que contener mi impotencia de nuevo.

La puerta del baño se cerró. No era capaz de girarme a ver a Jimin. Se suponía que no estaría con él, que me distanciaría un poco, ¿por qué seguía buscándolo?

Me giré y agaché en silencio, sin mirar a Jimin a la cara. Tomé por los bordes su sudadera y su camiseta, ambas manchadas, para tirar de ellas hacia arriba y quitárselas, tosiendo por el olor. Las tiré a un lado y cogí su brazo para levantarlo y guiarlo al lavabo.

-¿Pue... puedes lavarte la cara?

JIMIN: Comencé a sollozar en silencio ante la impotencia de la situación.

Me había humillado muchas veces, de muchas maneras distintas, pero esta, había sido demasiado.

Me daba vergüenza ahora mismo, que Yoongi me viese asi, que me dejase con la piel desnuda, como si aquello hiciese que me sintiese más limpio.

Asentí levemente y me incorporé despacio, mis costillas dolían un infierno, mientras mis lágrimas seguían cayendo por mejillas.

Me apoyé en el lavabo y encendí el grifo, para lavarme la cara, camuflando así mis lágrimas.

Me sequé con toallas de papel y dirigí mi vista a los zapatos de Yoongi, no podía mirarle a los ojos.

-¿Podrías prestarme tu chaqueta, por favor? Te la devolveré mañana, no quiero ponerme de nuevo mi ropa.

Dije con ningún tipo de color en mi voz, estaba cansado de todo.

YOONGI:

-Es lo que iba a hacer Jimin -respondí en un susurro mientras le daba la chaqueta.

Una vez metió los brazos en las mangas llevé mis manos a la cremallerá. Suspiré al ver cómo su cuerpo tenía marcas rojas que acabarían siendo moradas, pasé las yemas de mis dedos por una de esas marcas, acariciándola con cuidado como si pudiera llegar a sanarla.

Terminé de subir la cremallera tras un momento y lo abracé con cuidado. Uno de esos bajones que me daban últimamente por Jimin volvió a venir a mí de nuevo. Apoyé la cabeza en su hombro y arrugué la chaqueta con mis dedos mientras un pequeño gimoteo escapaba de mis labios.

A pesar de que todo esto le estaba ocurriendo a él, era yo el que acababa sin poder soportarlo, ¿cómo podía ser Jimin tan fuerte y a la vez tan idiota?

JIMIN: Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo cuando Yoongi tocó mi piel con las yemas de sus dedos, ese tipo de contacto con su piel no era al que yo estaba acostumbrado.

Me abrazó y escuché como, por algún motivo que yo desconocía, gimoteó. No le devolví al abrazo, no tenía ganas ni fuerzas, pero me atreví a bromear sobre la situación.

-¿Qué ocurre, estás triste por no ser el único que me hace daño? - mi risa apenas salió.

Ahora sí, acaricié a Yoongi por el cuello y levanté su cabeza de mi hombro para posar un beso en su frente, algo que hice sin ni si quiera pensar en por qué, tan sólo querís hacerlo.

-No importa Yoongi, estaré sin dolor en unos días, y gracias por la chaqueta.

YOONGI:

-Por favor Jimin -susurré ante su broma. No podía bromear en esos momentos.

Cerré los ojos ante su beso y suspiré, mirándolo luego y alzando una mano para acariciar su mejilla.
 
-Me da igual que dentro de unos días ya no te duela Jimin, ya ha sido suficiente, no quiero ver esto de nuevo.

Bajé la mirada un momento. Mi pecho se encogía de nuevo, quería suplicarle que cambiara.

-Mi casa está cerca, podemos ir y te dejo más ropa si tienes frío, o puedes... ducharte -cambié de tema al saber lo que me iba a responder.

JIMIN: En cierto modo me enfadaba que Yoongi me hablase así, cuando él había hecho lo mismo durante meses. Un beso y un día buenos no eran suficientes para ganar la confianza de alguien, pero yo era débil, siempre lo había sido, y no pude evitar sentirme triste al verle tan afectado "por mi culpa".

Dudé bastante en aceptar su propuesta, pero lo cierto es que me entraban arcadas cada pocos segundos debido al fuerte olor que desprendía.

-Está bien, vayamos...gracias.

HIT ME《Yoonmin》Where stories live. Discover now