8

2.3K 318 36
                                    

YOONGI: -No te niego que seas un gilipollas -susurré mientras me agachaba para quedar a su altura-, pero Jungkook también lo es, incluso más.

Miré su rostro, a pesar de que no me devolvía la mirada.

-Me enfada que hayas pagado conmigo lo que ese retrasado te he hecho, pero parece que has perdido tanto peso que me da miedo pegarte por si no eres capaz de soportarlo, así que vamos -volví a levantarme-, solo iremos a la cafetería a desayunar e irás a clase antes de que empiece -advertí-, un desayuno a cambio de dejar pasar mi mal humor, no es un mal trato.

JIMIN: Miré confundido a Yoongi. Desde ayer, parecía otra persona, más bien, desde "ese" momento, y su intento por ser agradable conmigo, aunque fuese a su manera, no hacia más que desorientarme.

Ni si quiera mis padres habían notado mi bajada de peso.
Una sonrisa se formó de manera inconsciente en mis labios.

-Está bien, pero sigo siendo más fuerte que tú. -aproveché que yo seguía sentado en el suelo para alargar mi brazo hacia sus piernas y pellizcar una de sus rodillas -Mírate, que palillo, ¿a quién pretendes engañar?

Me levanté del suelo y al mirar sus brazos hablé sin pensar.

-Tus brazos sin embargo son agradables.

YOONGI: Mi cuerpo se relajó una vez que vi cómo a Jimin le había servido el haberse desahogado. Reí y aparté la pierna por las cosquillas que me había hecho en la rodilla.

-Soy más delgado que la mayoría porque tengo este tipo de constitución delgada Jimin, pero puedo llegar a tener más fuerza que tú si sigues en modo depresivo.

Lo observé fijamente, inclinando mi cabeza para tratar que se diera cuenta de lo que acababa de decir.

-¿Agradables? -pregunté-, ¿por qué?

JIMIN: No sé si era posible conseguirlo o no, pero me concentré seriamente en no sonrojarme antes de contestar.

-Ayer, cuando me rodeaste por la cintura...fue agradable. -Me aclaré la garganta- Agradable y raro, no es normal que la persona que te pega a diario te toqué para algo distinto a hacerte daño.

YOONGI: Sonreí levemente, intentando obviar la segunda parte para no sentir mal después haber recibido un... ¿halago?

Pasé mi brazo por sus hombros y acerqué mi rostro al suyo para intentar avergonzarlo un poco más.

-¿Prefieres abrazos o golpes?

JIMIN: Cuando se acercó a mi rostro, junté nuestras frentes.

Yo también sabía jugar al juego que fuese que estuviésemos jugando.Posé mi vista en sus labios y sonreí antes de alejarme y emprender el rumbo a la cafetería sin haberle contestado.

YOONGI: Eso me había pillado totalmente desprevenido. Me quedé pasmado mientras Jimin se adelantaba un par de pasos. Fue mi turno para aclararme la garganta, intentando tragarme el nerviosismo antes de ponerme a su lado.

Cuando llegamos a la cafetería me pedí un café y un bocadillo, necesitaba algo fuerte con lo que despertarme y llenarme, o moriría en plena clase por hambre. Una vez que tanto Jimin como yo tuvimos nuestro desayuno nos sentamos en una mesa al azar, comenzando a comer en silencio.

Quería preguntarle de nuevo si prefería los abrazos, pero sabía que no era el momento y que solo lo estaría forzando todo, así que preferí permanecer engullendo mi desayuno placenteramente.

JIMIN: Estaba a punto de preguntarle a Yoongi por qué era agradable de repente conmigo, cuando alguien mucho más importante entró en la cafetería.

Jungkook y sus amigos abrieron la puerta, y mi mirada se encontró con la de Jungkook, que enseguida puso una mueca, como si estuviese a punto de vomitar.

Aparté mi vista y la fijé en la mesa que tenía en frente.

-¿Podemos irnos, por favor?

Le susurré a Yoongi sin apartar mi mirada de aquella mesa.

YOONGI: Giré mi cabeza inconscientemente hacia donde Jimin miraba. Jungkook.

Miré a Jimin y suspiré, luego miré mi café, aún por acabar, estaba empezando a cansarme de Jungkook y el día no había hecho más que empezar, perfecto.

-Está bien, vamos -dije ligeramente enfadado. Me levanté bruscamente y me colgé la mochila para luego salir de allí.

JIMIN: Me levanté junto a él, y de forma inconsciente me pegué a él, como si mi maltratador pudiese proporcionarme protección ante otro maltratador, aunque sólo fuese por orgullo, por ver quien podía dañarme más.

Y sólo me di cuenta de que le había agarrado de la mano cuando uno de los amigos de Jungkook, rió y dijo.

-Maldito maricón, ¿ahora vas ahí tocando a todo el mundo?

Solté mi mano de la de Yoongi y agaché mi cabeza antes de cerrar la puerta.

Tenía ganas de llorar, pero no pensaba derramar ni una sola lágrima frente a Yoongi.

-Quedan 5 minutos para que suene la campana, es mejor que nos separemos ya.

YOONGI: De un momento a otro, sentí el pulso de Jimin temblar en mi mano, apreté con suavidad su pequeña mano y apreté la mandíbula en pura ira cuando la soltó al escuchar a uno de los amigos de Jungkook.

"Calma Yoongi, por todo lo que quieras, mantén la calma". Eso era lo único que podía decirme en silencio a mí mismo para no ir y tirarle una silla a la cabeza al gilipollas que había hablado.

Cuando salimos de la cafetería solté todo el aire que había estado conteniendo por la naríz, de forma entrecortada gracias a la impotencia que en esos momentos era incluso más grande que mi propio cuerpo.

Jimin estaba mal y yo ya no sabía cómo arreglarlo, no sabía cómo hacerle entender que Jungkook lo único que merecía de él era el deseo de que se muriera.

Apreté los labios aún enfadado y tiré de su brazo para poder abrazarlo, apretándolo entre mis brazos.
                          
-Esto es porque tengo ganas de pegarte ahora mismo -me excusé.

JIMIN: Cerré mis ojos cuando Yoongi me abrazó, y le correspondí fuertemente.

Hundí mi barbilla en el hueco entre su cuello y hombro y suspiré.

-Abrazos, Yoongi, sin duda prefiero abrazos.

Dije en voz baja.

HIT ME《Yoonmin》Where stories live. Discover now