Love Song.

Capítulo 27

Lucy se veía hermosa en su vestido color blanco. Arreglé el velo y acomode un cabello que había salido de su lugar, el día había llegado finalmente y ahí estaba yo con mi vestido color lila, sonriendo para el recuerdo en fotografías.

–Luces hermosa

Dije mientras ayudaba a acomodarle el vestido

–Gracias Sophie, oye antes de que salgamos, tengo algo que decirte.

–¿Qué pasa?

Lucy abrió la boca, pero el maldito organizador entró a la habitación gritando que ya era hora de salir.

–¿Lista?

Pregunte intentando sonar menos nerviosa de lo que me sentía en realidad.

Lucy asintió y me apretó la mano con fuerza.

­­­­–Las damas salen primero junto con los padrinos y al último la más importante, la novia.

¡Maldito tipo bien vestido! Lo único que yo quería era sentarme, esconderme y no encontrar nunca a Tom.

–¡Todas las damas con sus respectivos padrinos, por favor!

¡Diablo! ¿Quién era mi respectivo padrino?

–¡Rachel con David, Laura con Peter, Scarlett con Matt y Sophie, ¿dónde está Sophie?!

Levanté la mano como si estuviese en la escuela

–Supongo que tú vas conmigo.

La voz de Tom a mi lado me hizo temblar de nervios, ¿no podía estar con otro padrino?

–Bien, ¿todos listos?

Negué mentalmente, no, no estaba lista para caminar al altar con mi exnovio y el corazón roto. Volteé la mirada para ver a Lucy y me di cuenta de que eso era lo que quería decirme antes de que nos interrumpieran.

Abrieron las puertas para que saliéramos todos, Tom estiró el brazo para que lo tomara, me quede inmóvil durante unos cuantos segundos hasta que sentí un empujón que me hizo caminar como si estuviesen oprimiendo un botón en mi espalda, pero me evité de tomar a Tom del brazo.

El sonido de la música, la felicidad que llenaba el rostro de las personas mirándonos mientras caminábamos y la sensación de tener a Tom tan cerca de mí, me hizo sentirme sofocada, quería salir huyendo de ahí, perderme para no ver a Tom por el resto de mi vida, pero al separarme de él y acomodarme a un lado del altar, pude ver a Richard soltando una lágrima al ver a Lucy tan hermosa con su vestido de novia, entendí entonces que ese momento no era mío ni de mi drama con Tom, este era el momento de Richie y Lucy.

Durante la ceremonia no negaré que solté unas cuantas lágrimas, sobre todo cuando dijeron acepto, el hecho de que Lucy ya era oficialmente mi hermana me emocionaba demasiado.

Al terminar todo el alboroto corrí por una copa de vino y a encerrarme unos minutos en el baño para poder recuperarme de todo el suceso.

Le di un pequeño sorbo al vino y me limpié el sudor del cuello e intenté relajarme también.

Escuché a alguien tocando la puerta.

–¿Sophie?

La voz de Tom me hizo escupir el vino que tenía en la boca

–Sophie, abre la puerta por favor, necesito hablar contigo.

Di una rápida mirada al espejo para darme cuenta de que lucía igual que un fantasma sudoroso, me limpié las manos húmedas en el vestido, imaginándome el infarto de mi madre si me viera hacer eso con el vestido.