Capítulo 7

1.4K 157 98
                                    

La confianza que había dentro de mí después de saber que le gustaba a Tom, era tan grande que sentía que era un globo de helio a punto de salir volando de tanta confianza. Incluso Lucy me había notado completamente diferente, y lo sorprende es que solamente habían pasado dos días y ya me sentía completamente esperanzada. Me llamaba siempre que salía de su guardia, cuando estaba en un descanso o cuando estaba comiéndose una ensalada. Era tan común todo en nuestra conversación que lo hacía completamente maravilloso.

Hablamos por horas sobre cómo había ido su día, sobre cómo había sido mi ensayo y mis clases, y sentía que todo aquello se reflejaba en mi manera de tocar. Nunca lo había hecho de aquella manera, ni siquiera me importaba que Michael luciera más irritado de lo normal con mi actitud de chica enamorada. Por lo normal siempre que me encontraba alguna clase de error, yo me sentía devastada por dentro, pero esta vez era diferente, podía escuchar la voz de Tom diciéndome lo magnifica que yo era y aquello lo compensaba todo.

–Ese Tom sí que hace milagros.

Me dijo Julie mientras desayunábamos. Sonreí como una boba ante la simple mención de su nombre.

– ¿Por qué lo dices?

–Nunca te había visto tan feliz.

Y aquello me asusto un poco, no podía dejar que mis emociones cayeran tanto en una persona, de nuevo el miedo me atacó, la inseguridad de mi cuerpo, del no saber si en realidad el querría algo enserio conmigo, de si yo sería suficiente para él, después de todo yo nunca había tenido un novio y él ya tenía 32 años, era más que probable que sufriera de demasiada experiencia. Tragué en seco recordando que él pasaría por mí en unos cuantos minutos para dejar en Ellis.

Sería la primera vez que lo veía desde que me había dicho que yo le gustaba.

– ¿Cuándo lo verás de nuevo?

Preguntó Julie.

–Hoy, en unos minutos...

–Ay, eso me recuerda la primera vez que salí con David, ¿alguna vez te he contado sobre mi primera cita con él?

Claro que lo has hecho ricitos, pero en este momento dejaré que me lo cuentes por quinta vez para tener algo más en que pensar a parte del hecho de que me siento horrible conmigo misma. Mi celular vibra en media historia de Julie y me siento completamente aliviada de no seguir escuchando la historia de su primer beso.

Estoy abajo, ¡no puedo esperar a verte! T.

A pesar de mis dudas y miedos no puedo evitar sonreír al ver aquél mensaje, nadie nunca había parecido estar tan deseoso de verme. Me despido de Julie y tomo mis cosas de un jalón. Bajó las escaleras con una velocidad de la que no me creí capaz y en cuanto abro la puerta principal lo puedo ver recargado sobre su auto, usando unas gafas de sol, pantalones de vestir y una camisa color azul que queda perfecta en su cuerpo, parece estar revisando algo en su celular y cuando se da cuenta de que he salido, levanta la mirada se quita las gafas y me mira con una sonrisa que me roba el aliento por completo. Sus ojos parecen iluminarse al momento en el que se acerca para saludarme.

–Hola hermosa.

–Hola.

Respondo con una tímida sonrisa, me besa tan cerca de los labios que siento que en cualquier momento lo tomaré del cabello y lo obligaré a besarme. Me quita la bolsa en la que traigo todas mis cosas y la lleva él hasta el auto, me abre la puerta como todo un caballero y me pone el cinturón de seguridad con mucho cuidado, me mira a los ojos mientras lo hace y parece hesitar unos momentos.

El camino hasta Ellis se me antoja tan rápido, que se siente como si apenas y nos hemos dicho unas tres palabras, cuando ya mantuvimos una conversación completa de lo que planeo hacer hoy.

Love Song.Where stories live. Discover now