It's Just A Game ; Rubelangel

Capítulo 13

Ya habían pasado unas cuantas semanas desde aquel último encuentro de Mangel con Rubén. Desde entonces había cumplido su pedido de no volver a molestarle jamás, Rubén apenas y lo veía en el Instituto, está vez podía vivir en paz, sin que él quisiera buscarle, pero algo muy dentro de sí le decía que lo necesitaba.

No quería admitirlo, pero esos días lo había extrañado más de lo normal, y no era correcto. Incluso había pensado en perdonarlo, pero… ¿Cómo perdonar a alguien que te traicionó de esa forma? Que te usó sólo como un juego y una forma de apuesta para hacerse el más chulo del colegio. Rubén se había dado cuenta de que aún lo amaba, pero ni todo el amor del mundo podía perdonarle semejante traición.
Hubo algo en la última plática del andaluz que llamó la atención de Rubius, y eso fue que le había dicho que lo amaba y se sentía la sinceridad en sus palabras, además de que casi había estado llorando mientras hablaba. Pero aún así Rubén no podía confiarse por completo, su orgullo no se lo permitía.

Por otro lado, Alex, quien ahora era novio del mejor amigo de Miguel, le había contado que Abraham estaba muy preocupado por el. Según sus palabras no salía de casa, la pasaba todo el día encerrado llorando y lamentándose el haber perdido a él que sería el amor de su vida. Que incluso había tenido discusiones fuertes con sus padres, y eso lo había deprimido más. Lo único bueno era que había aprobado todas sus materias en clases. Ya que Miguel se había prometido a si mismo estudiar para ser alguien en la vida. En cuanto la graduación terminará tenía planeado irse de Madrid, incluso lejos de España a vivir el sueño americano, y conseguir un buen empleo. Quería dejar su pasado atrás, y con pasado se refería más que nada a Rubén.

Rubén había comenzado a salir formalmente como novio con Christian y todo estaba yendo de maravilla los primeros días. Pero una semana después ya le era insoportable. Christian le llamaba a cada segundo del día, invitándolo a salir y queriendo estar con él a cada instante. Rubén sabía que eso hacían los novios, pero Christian exageraba demasiado y Rubén sentía que cada vez era mas empalagoso que antes.

Irina, una de sus amigas había notado eso, pero simplemente prefirió callar y no meterse. También había notado como Rubén no dejaba de observar a Miguel durante los almuerzos, lo cual dejaba en claro que no había terminado de olvidarlo por completo. Pero esos eran problemas en los que ella prefería no meterse.

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Pronto sería la graduación, por lo que los alumnos estaban en exámenes finales. Rubén había estudiado demasiado para ello, y se sentía conforme con los resultados, ya que no iba a repetir ninguna materia, y se graduaría con un promedio excelente.

-Bien, chicos, el tiempo ha terminado, es hora de entregar los exámenes.- comentó la  profesora recibiendo algunos sonidos de queja, pero por parte de Rubén todo estaba perfecto. El examen no había sido la gran cosa como solían alardear algunos.

Tomo sus cosas saliendo del aula de clases e inmediatamente se topó con sus amigos, quienes tenían una cara de pocos amigos. Probablemente por el examen recién dado.

-Hostia, menos mal que estudie, macho, sino ya tendría una F en mi prueba.- decía Alex con su típico tono de voz, seguido de una risa molesta muy común de el. -Espero que Abraham apruebe, porque sino le voy a dar un par de yemas inolvidables.- Rubén sonrió. No podía creer como su amigo mala leche salía con alguien como Abraham, todo lo contrario a el. Incluso recuerda lo mal que le caía, pero al parecer los polos opuestos se atraen y estaba muy feliz por el más chico.

Willy y Celia iban platicando entre ellos, probablemente de lo mismo, sólo que al contrario de Rubén y Alex, ellos iban un semestre menos, y sólo presentaban para aprobar y pasar a último grado.

Al estar fuera, Rubén sonrió, pero esta sonrisa desapareció al sentir un brazo rodear su cintura, sabiendo de quien se trataba de inmediato. Con ello, un beso en la mejilla le fue dado, dejándolo un poco más incómodo que antes.

-Hey, Rub. ¿Qué tal el examen?- cuestionó el más alto, pero Rubén sólo atinó a sonreír un poco. Realmente incómodo, tanto que intentó quitar el brazo que rodeaba su cintura, pero este sólo se apretó más.

Irina observaba la escena con el ceño fruncido, estando más a favor de Rubén. Christian podía ser demasiado empalagoso a veces.

-Chicos, ¿Qué os parece salir hoy todos juntos? Sería lindo, ya que se acerca la graduación, así vosotros convivís con nosotros.- dijo refiriéndose a Willy y Celia, quienes asistieron emocionados. Alex también acepto, incluso Rubén, pero Christian negó.

-Rubén y yo saldremos hoy al cine. ¿O es que lo olvidaste? – giro el rostro en dirección al noruego y este sonrió falsamente, mientras negaba.

-No lo olvidé, id vosotros, ya después saldremos todos juntos. – El noruego por fin había logrado quitarse el brazo de encima, tomando su espacio entre su novio y el. Sus amigos asintieron y se fueron.

Rubén llamo a su madre para decirle que llegaría más tarde a casa, esta acepto diciéndole que tuviese cuidado, y colgó.

Ahora tendría que aguantar una salida con el empalagoso de su novio. Y odiaba tener que referirse de esa forma a él, pero no quería romperle el corazón.

Seria una tarde interesante.

Y vaya, que lo sería.

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Lo escribí a tiempo récord. Ni se imaginan. Pero aquí lo tienen, y aunque no es lo que escribí en un inicio, estoy conforme. Se viene un buen salseo, chicas.

En fin, voten pls. Las amo (?)❤