Capítulo 71: Películas

948 96 149
                                    


El viernes por la tarde, había estado matando hasta mis últimas neuronas para pensar en cuál sería la cita ideal con Armin.

Había pensado en muchas cosas, como volver al arcade, rentar un local de películas, ir a alguna cafetería temática, incluso había pensado en llevarlo a una pista de karts, sin embargo, mi situación económica me había limitado enormemente.

—¿En serio debo llevar mis ojos vendados? –Murmuraba el chico mientras yo sujetaba su mano para guiarlo.

—Si, o si no no será una sorpresa –reí observándolo.

Después de tanto darle vueltas y tras oír una conversación ajena de mi tita y mamá, donde acordaban que ambas pasarían la tarde juntas afuera, había concluído en que debía hacer la cita en casa.

—Pero llevamos mucho tiempo caminando –Se quejaba el chico riendo. —La gente debe estar observándonos raro...

—No veo a gente por aquí –mentí. —Tú solo sígueme, te prometo que no falta mucho.

Con ayuda de Pinterest, había planificado una divertida tarde de películas y videojuegos.

Hace unas semanas, entre las cajas de mudanza había encontrado un proyector, así que me había venido perfecto para esta ocasión.

Usando una de las paredes de mi habitación como pantalla, había instalado el protector sobre mi escritorio y creado un acogedor espacio llenos de sábanas y almohadones para que pasaramos la tarde.

—¿Estamos en un edificio? –Balbuceó mientras yo lo ayudaba a entrar a casa.

—No voy a darte pistas –reí.

Me sentía un tanto insegura por mi elección, sobre todo porque Armin ya había organizado citas realmente increíbles y las expectativas estaban demasiado altas.

No quería decepcionarlo, después de todo, era la primera vez que me animaba a hacer algo.

—Me estás matando de la intriga –soltó mientras lo ayudaba a subir las escaleras.

—Son los últimos escalones y llegamos.

—Esto ha sido como una eternidad... ¿Seguimos en la ciudad?

Yo sonreí.

—¿O es que acaso me trajiste a algún lejano para que nadie logre escuchar mis gritos?

—¿Cómo es que lo adivinaste? –Bromeé.

—¡No puede ser! –Me sacudió de un lado a otro. —¡Vas a matarme!

Ambos soltamos una risita.

—No te preocupes, ya llegamos –lo detuve frente a mi habitación.

Rápidamente me dirigí a la puerta para poder abrirla y que, apenas el chico abriera sus ojos, pudiese ver lo que había planeado.

—¿Vas a dispararme cuándo menos lo espere, verdad?

—No... La idea de apuñalarte suena más entretenida, ¿No crees?

—Al menos moriría teniendo tu rostro cerca –sonrió.

Enseguida le di un golpecito.

—Vamos… Ya puedes quitarte tu venda –sonreí ansiosa.

—¿No hay muerte?

—No al menos el día de hoy –respondí haciéndome a un lado.

Armin, sin esperar un segundo más, levantó el pañuelo hasta su frente y al observar el lugar, solo reaccionó abriendo su boca y ojos sorprendido.

Ya No Soy Aquella - CDMWhere stories live. Discover now