Capítulo 33

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Trota al rededor de la cuadra, manteniendo su mente en blanco y su respiración coordinada con los pequeños saltos que da al ejercitarse.

El día nublado parece perfecto para salir a trotar por la madrugada, y es así como lo siente Connor. Sin embargo, ninguna salida a despejarse hará desaparecer el enredo que hay en su mente.

Porque, si bien se suponía que aquel viaje ayudaría a dejar el pasado atrás y olvidar toda clase de rencores y odio contenido en su sistema. Lo único que hizo fue agrandar la amargura que inevitablemente lo invade.

Piensa y piensa en lo dicho aquel día, en la hipocresía y el falso victimismo. También piensa en su madre y lo idiota que pudo llegar a ser, ¿Por qué no abre los ojos?

Todo es un completo desastre igual que al principio, y durante todo el transcurso de su vida. Pensándolo bien, jamás ha vivido alguna etapa en la que sintió genuina tranquilidad y felicidad de estar donde está.

Es bastante deprimente.

Vuelve a su hogar a eso de las nueve de la mañana. Al gimansio debe ir a las doce, por lo que no se apresura en subir las escaleras, sino hasta que recuerda lo dicho por Redd: "Mañana no tengo clases".

Camina a paso decidido hasta su puerta y toca con sus nudillos la madera. Sonidos desde el otro lado se presentan de inmediato, y una cabeza rubia aparece en su campo de visión. Blake abre los ojos con amplitud, completamente sorprendida de su visita.

- Connor.

- ¿Blake?- pregunta él, confundido.

- ¿Qué estás haciendo aquí?- cuestiona ella con algo de incomodidad.

- Creo que esa misma pregunta debería hacerla yo. Creí que te habías ido- responde con certeza.

Ella frunce el ceño y lo mira con incomprensión - Y yo creí que ya no le hablabas a Redd.

Connor mueve su cabeza con indignación, pero antes de que diga cualquier cosa, Redd los interrumpe.

- ¡Connor!- exclama con una sonrisa estampada en el rostro.

Camina hasta quedar a un lado del Blake, e intercambia miradas entre ambos chicos igual de tensos.

- ¿Pasó algo?- pregunta Redd con precaución.

El muchacho centra sus ojos en la pelirroja e intenta restarle importancia, sin embargo, Blake se lo impide adelantándose al hablar: - Pensé que habían... ya sabes..., terminado.

- Oh...- dice Redd con una sonrisa nerviosa en sus labios. Mira a Connor y se acerca a él con algo de duda. - Pues, aún no hemos vuelto oficialmente. Por eso no te hablé sobre ello.

Blake asiente con la cabeza, mordiendo su labio inferior y entrecerrando sus celestinos ojos. Se le ve infeliz por la noticia, y la verdad es que aquello incomoda a ambos chicos. Al inicio de todo esto, Blake era la más emocionada por que ambos estén juntos.

- Genial...- comenta la rubia introduciendose de vuelta en el apartamento.

Redd se queda allí, abrazada al torso de Connor sin poder eliminar la sonrisa de su rostro. Levanta la cabeza para verlo a los ojos y percatarse entonces, de la tensión que lo invade.

- ¿Sabes si le sucede algo?- le pregunta él en voz baja. Ella niega con la cabeza junto con un leve y rápido encogimiento de hombros.

- Preparé el desayuno- dice cambiando repentinamente de tema y guiñandole uno de sus ojos.

(...)

Pasaron toda la mañana y parte de la tarde charlando, comiendo y viendo malas comedias que transmitía el cable. No se preocuparon de Blake, pues ésta no realizó ningún comentario luego de aquella discusión en la entrada.

CONNORWhere stories live. Discover now