Blessing ~•[Meanie][Seventeen]•~

15.

Al igual que noviembre, su octavo mes de gestación daba inició.

El pequeño frío que anunciaba la inminente llegada del invierno comenzaba a hacerse presenté, las calles preparaban sus mejores decoraciones navideñas y algunas otras aún mantenían los adornos de halloween.

Había salido a caminar, el doctor lo había casi prohibido pero realmente se aburría en casa, todas las mañanas las pasaba sólo ya que MinGyu y SiYeon asistían al colegio y por las tardes era casi lo mismo ya que la menor salía en busca de algún empleo de medio tiempo. Además, si salía a caminar por el centro de la ciudad podría ir revisando alguno de los preparativos para la boda -evento que la hermana y madre de su prometido se habían encargado de empezar a organizar- o incluso podría encontrar algún objeto necesario para cuando nacieran los bebés.

Llevaba más de dos horas caminando y llevaba una bolsa blanca de plástico con dos gatitos de felpa en su interior. El camino de regreso era más rápido de lo esperado y una vez estuvo fuera de su casa se detuvo a ver la hora; a penas era medio día, tenía tiempo para preparar la comida para cuando Siyeon regresara del colegio.

Cuando abrió la puerta el inusual olor a alcohol inundó sus fosas nasales, el cuadro que se encontraba cerca de ahí estaba casi descolocado, aún con el ceño fruncido camino hasta la sala, donde la vista que lo recibió lo inquieto.

—¿Que haces aquí? —preguntó con un hilo de voz— ¿Como entraste?

—Lo difícil no fue entrar —respondío su padre con notoria ebriedad— Fue difícil encontrarte..

—Por favor vete, no tienes nada que hacer aquí

—No digas nada, pequeño —murmuró su padre— Mejor ven y siéntate aquí —golpeo sus muslos— recordemos viejos tiempos, ahora que no esta el estúpido de tu hermano

WonWoo cerró los ojos cuando sintió todos los recuerdos arremolinarse en su mente, tomó su celular del bolso de su pantalón y con las manos temblorosas intento marcar el número de MinGyu. En cuestión de segundos su padre ya había lanzado su teléfono al sillón.

—No vas a llamar a nadie —gruño tomando su brazo con fuerza— Sólo serán unos minutos de diversión

Las lágrimas comenzaban a inundar sus ojos, su padre comenzaba a jalar de el con la intención de llevarlo hacia los sofás, por inercia y las ganas de proteger a sus bebés golpeó el brazo de su padre logrando alejarlo de él, pero sólo fueron segundos de paz antes de que la gran mano de su padre impactará contra su mejilla.

—¡Eres un estúpido! —grito su padre volviendo a golpear su mejilla— ¡Después de tantas veces, aún no entiendes! —su mano sostenía él mentón de su hijo— Por mucho que lo intentes, terminaré por follarte.

—Por favor —sollozo Jeon— No me hagas daño, no ahora...

Sus mejillas se humedecían por las lágrimas, pero las manos de su padre aún no lo soltaban, al contrario lo habían tomado con mayor firmeza.

—Nunca he follado con alguien embarazado —las manos de su padre sostenían su cabello mientras lo empujaba al sofá mas cercano— Será la mejor follada de mi vida...

WonWoo intentaba liberarse del agarre, pero su padre tiraba aun mas fuerte de su cabello.

—¡Papá no hagas esto! —grito WonWoo entre lágrimas— Mamá no estaría feliz de que hagas esto...

El agarre de su cabello disminuyo, WonWoo respiró creyendo que había logrado razonar un poco la mente de su progenitor, pero no fue así. Un incesante dolor invadió su vientre y se extendió por su columna.

Su padre lo había arrojado sobre la mesa de centró, golpeando su abultado vientre...

—¡No metas a tu madre en esto!

El grito lleno de cólera embargo sus oídos cuando la sangre comenzó a manchar el pantalón que llevaba puesto...