Para: Ayleen, mi amor.
Amor, esto es bastante extraño, ni sé por qué lo estoy haciendo, es sólo... Presentimiento. También estoy un poco aburrido aquí en Miami, sabes que no soporto estar TANTO tiempo sin ti. Bueno, al punto. Se supone que si lees esto significa que esté muerto.. Repito, es raro.
Bien, aquí voy.
Amor, si estoy muerto es porque Dios lo quiso así, y quizás el destino te quiso dar una lección la cuál espero y la aprendas. Te amo demasiado y siempre estaré para ti desde el más allá.
Ayleen, no te vayas a estancar por mi muerte, no lo hagas. Sabes que eso no es lo que yo querría. Avanza. Vive. Disfruta cada segundo de tú vida como si yo estuviera a tú lado, porque ahí estaré.
Vuelve a enamorarte, es un sentimiento hermoso y es lo que quiero para ti. Que vivas feliz, que sonrias más de lo normal.
Me prometí hacerte feliz el resto de tú vida, espero y lo haya logrado el tiempo que estuve.
Te amo. Te amo. Te amo.
Nunca dejaré de recordartelo.
Incluso si tengo oportunidad de asustarte siendo un fantasma y eso, no dudare en escribirte en el cuaderno lo mucho que te amo. Okay, eso sería espantoso..
Bueno, el punto es que te amo, te quiero, me gustas, eres todo.
Ya me tengo que ir, hay averías en el sistema.
No te estanques, avanza.
Con demasiado amor, tú hermoso y sensual novio.
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No Digas Nada
Любовные романыAyleen Sparrons conoció la felicidad, supo lo que se siente ser feliz, pero como todos sabemos, nada es para siempre, pues, su felicidad tampoco lo fue. Ian Levnin fué su felicidad, fué su esperanza, sus fuerzas de seguir luchando contra la misma na...
