Mr & Mrs Abernathy (De Mentira)

Capítulo 2 - ¡Help me!

P.D.V Effie

Todos me están viendo y me interrogan con la mirada. ¿Ahora qué hago? ¡¿QUÉ HAGO?! Estoy empezando a reírme como una demente. Tengo que hablar y YA.

— Jajaja... que bromista eres, mi amor —le digo, mientras palmeo su espalda. Él solo se limita a verme raro— Padres, ¿gustan pasar y quedarse en la sala mientras mi MARIDO y yo preparamos el café?

— Por supuesto hija —respondió su madre.

— ¿Marido? —repitió Haymitch evidentemente confundido.

— Ja ja ja... ¡me encanta que me hagas reír! ¡Ven, vamos cariño! —sostengo su brazo y lo arrastro hasta a la cocina.

Una vez ahi, Haymitch fue rápido al interrogarme.

— ¡Preciosa! Me puedes decir ¿¡qué diablos está pasando!? —me dice entre dientes, tomando mi brazo con fuerza

— ¡Auch! Me dejaras un moretón —me quejé y él indeciso me suelta— Perdón Haymitch pero tienes que ayudarme —le imploro, casi en un susurro.

— ¿Por eso querías hablar conmigo? —pregunta enojado— ¿¡Le dijiste a tus padres que según soy tu esposo!?

— Shh.... ¡No! —conteste en voz baja— Se los dije a... mis amigos y ellos a.... mis padres —le confieso y cierro los ojos al ver que se acerca peligrosamente.

— Effie...

— ¡Por favor! Solo van a hacer por unos días mientras se van mis padres.

— ¿Y por qué no les dices la verdad y ya?

— Haymitch ¡Por favor! —le ruego— Si me ayudas, te devolveré el favor. Pídeme lo que quieras.

Cuando le dije que "me pidiera lo que sea", me dio miedo a su respuesta. Se había quedado pensando casi en un minuto.

— Bueno, preciosa. Me dejaras beber todo lo que quiera ¿Trato? —estrechó su mano. Pero a mí no me convence mucho.

Desde que viví en esta casa, no le he permito a Haymitch beber más de media botella cada dos días. Así que no me parece su oferta.

— ¡No exageres! Te dejare tomar media botella por día ¡No más!

— Mmm... una botella completa al día y limpias toda la casa por 2 años —me propone pero todavía no me convence— Bueno, media botella al día, limpias la casa por todo un año y.... —me mira de pies a cabeza— ...dejaras de ponerte esa ropa tan ridicula del capitolio mientras estemos "casados". Hasta ahí llega mi oferta ¿hecho?

Está bien su propuesta pero ¡¿mis cosas?!

Me relajo un poco y pienso mejor las cosas. No puedo ponerme rejega ya que él me va ayudar con esta mentira que cree. Voy a tener que sacrificarme.

— Está bien. Es un trato —estreche mi mano y lo sellamos con un apretón.

— Ahora te declaro Señora Abernathy —bromeó, mientras buscaba su bebida.

— Ja ja ja que gracioso. Ahora ven y ayúdame con el café —le digo mientras tomo cuatro tazas.

— Bueno, pero cuéntame un poco sobre ellos ¿Son igual de molestos que tú? —pregunta mientras me ayuda.

— ¡Lenguaje!

— ¿Que? Necesito estar preparado para lo que viene.

Ruedo los ojos — Por mi madre no te debes de molestar. Su nombre es Ellie, es muy alegre y un poco.... entrometida pero solo conmigo, así que no te preocupes. Y mi padre Erwin es tranquilo pero te advierto una cosa —le digo con seriedad mientras tomo su rostro con ambas manos para que me vea a los ojos— Nunca lo llames suegro, solo dile señor Trinket.