I Miss You (Rita x Ryuunosuke)

Capítulo 34: "Noche"

Aquella noche, Ryuunosuke estaba tan contento y despreocupado, que a diferencia de hace un rato atrás, la hora no era un tema que en ese momento le pareciera importante. Estaba mucho menos consciente de los minutos que pasaban mientras se encontraba compartiendo con Rita, y antes de que lograra percatarse, había superado el horario de visitas establecido. Por otro lado, Rita sí se había percatado de la hora, pero había preferido no decir nada al respecto.

De pronto, se escucharon los pasos de una persona caminando por el pasillo, y deteniéndose justo enfrente de la puerta de Rita.

— Escóndete — le susurró Rita, justo cuando el chico iba a encender la consola para que jugaran.

— ¿Por qué? — preguntó sin comprender.

— Son las diez y media — respondió Rita, y entonces Ryuunosuke se dio cuenta de que hacía ya media hora que debería haberse marchado.

No supo bien por qué lo hizo, pero sin pensarlo demasiado, al notar que giraban la manilla de la puerta decidió esconderse debajo de la cama... Inmediatamente después de hacerlo, pensó que en realidad habría sido mejor explicar que se le había pasado la hora, disculparse y abandonar la habitación. Después de todo, tendría que marcharse pronto de igual forma, o se le haría cada vez más complicado caminar por las calles de Londres a plena noche para dirigirse al hotel. Sin embargo, ya estaba hecho, y salir por detrás de la cama mostrando que se estaba ocultando, le resultaba embarazoso.

Por suerte, el modelo de la cama lograba ocultarlo bastante, y su vista sólo lograba dar con los zapatos de la persona que había ingresado en el cuarto. En ese momento, comenzó a sentirse muy nervioso, y no pudo abandonar la idea de que probablemente lo descubrirían.

— ¿Cómo te has sentido? — se escuchó la voz de un hombre.

— Muy bien — respondió Rita.

— Así te veo — comentó aquel hombre, y se escuchó que removía unos papeles — ¿qué tal las terapias? ¿Todo bien?

— Sí — respondió la chica — hoy me fue muy bien...

— Eso me dijeron en kinesiología — dijo él — así que, es probable que pronto te den el alta, si sigues esforzándote de ese modo.

A Ryuunosuke se le empezó a complicar un poco la comprensión fluida de la conversación, ya que algunas de las palabras que utilizaban no lograba reconocerlas. Estaba acostumbrado a leer textos en inglés, pero escucharlo era mucho más complejo. Aun así, siguió pendiente de la conversación en todo momento.

No se dijeron mucho más, y aquel sujeto abandonó el cuarto de Rita. El chico sintió un gran alivio cuando el hombre salió por la puerta, ya que hasta el último momento pensó que notaría su presencia. Cuando se escucharon sus pasos lo suficientemente lejos, Rita le habló.

— Ya puedes salir de ahí...

Ryuunosuke obedeció a la sugerencia de ella, y se levantó del suelo, sacudiendo su ropa.

— Fue una locura — comentó el chico, todavía con un poco de adrenalina en el cuerpo.

Rita lo miró, y simplemente rió levemente, mirándolo de forma juguetona.

— ¿No crees que fue entretenido? — preguntó ella sonriendo.

— Por supuesto que no, ¿estás loca? Estuve muy nervioso — respondió Ryuunosuke.

— Siempre lo estás — le recordó ella, y el chico se ruborizó levemente.

— N-no es cierto — esquivó un poco la vista, mirando hacia un costado y volvió a escuchar una pequeña risa de Rita.