Capítulo 6: "Preocupación"

650 61 4
                                    


 "Seguramente debe tratarse de Sorata pidiendo alguna explicación", pensó. Y luego de pensar en lo que diría, abrió la puerta de forma impulsiva, con los ojos cerrados y el ceño fruncido, e intentó explicarse mucho antes de escuchar alguna pregunta.

— Mira, Kanda... No sé qué le pasa a Mashiro. Pero por alguna razón, está obsesionada con la idea de que tiene el deber de cuidarme. Seguramente esto se relacione con alguien más, algún estúpido que le dio la idea, alguien que me está jugando una broma, o simplemente algún trol envidioso que busca molestarme... No lo tengo claro aún. Sé que suena muy extraño, pero esto es todo lo que sé por ahora — Ryuunosuke escupió todas esas palabras tan rápidamente, que no dio a Sorata tiempo de responder ni de digerir todo lo que le había dicho.

Se produjo un silencio momentáneo. Ryuunosuke abrió los ojos y allí vio a Sorata, con la mirada esquiva pareciendo que luchaba con algo interno... Pensó en volver a encerrarse en su habitación, pero se notaba que Kanda tenía algo que decir, sólo que no sabía aún cómo expresarse.

Ryuunosuke decidió esperar hasta que Sorata al fin se decidiera a responder.

— Dime algo, Akasaka... — Sorata aún miraba hacia un costado y se veía levemente molesto. A Ryuunosuke no le dio una buena impresión.

— ¿Qué ocurre? — Ryuunosuke preguntó con indiferencia en su tono de voz, aunque por dentro sentía un poco de miedo.

— ¿Estás completamente seguro de que quieres estar solo? — Sorata al fin volvió la vista a Ryuunosuke, mirándolo a los ojos mientras continuaba — ¿No hay realmente nadie con quien quieras hablar?

— No hay nadie. Simplemente... quisiera que me dejaran en paz.

— ¿Estás seguro que no hay realmente... nadie en específico que quieras ver? ¿Alguna persona que extrañes?

Ryuunosuke se mostró sorprendido por unos segundos. No pudo evitar acordarse de Rita. Realmente... a ella sí deseaba verla, o al menos escucharla. En el fondo se sentía incluso un poco molesto con ella por no haber aparecido en todo este tiempo, pero eso era injusto. Después de todo, él tampoco la había buscado, y las veces que ella intentaba acercarse, él no hacía más que rechazarla. No podía culparla por haberlo olvidado...

¿Entonces sí lo había olvidado? Sintió una molestia en su corazón, un dolor angustiante en el pecho.

— Nadie — Respondió finalmente Ryuunosuke, con total frialdad, ocultando con éxito el dolor que le había causado la pregunta de Sorata.

Sorata mostró una mueca de decepción; se notaba triste. Ryuunosuke decidió que ya no tenían nada que hablar, y se dispuso a cerrar la puerta, pero Sorata lo impidió interponiendo su pie delante de la puerta.

— ¿Q-qué haces? — preguntó Ryuunosuke extrañado por el comportamiento de Sorata, quien todavía llevaba esa expresión de tristeza en su rostro.

— Me gustaría dejarte solo... — respondió Sorata mirando al suelo —Pero no lo aguanto más. No tienes idea cómo están las cosas aquí. Todos están preocupados por ti, incluso Maid-chan... Está bien que decidas aislarte y no hablar con nadie, pero... ¡cómo quieres que permitamos que te estés matando! — Sorata gritó estas últimas con una rabia y un dolor notorios. Ryuunosuke simplemente se cruzó de brazos mirando hacia un costado.

— Creo que estás exagerando las cosas... — respondió intentando ignorar la gravedad con la que Sorata se había expresado.

— ¡Tú las exageras! — dijo Kanda un poco molesto — Mírate, te ves enfermo... incluso me sorprendió verte hace un rato en el pasillo. No has comido nada, ni dormido, ni dejado de trabajar. Necesitas ayuda, una terapia, algo... Si sigues así terminarás matándote.

— Ya comprendo... — Ryuunosuke lo miró con una leve expresión de molestia en su rostro — Así que tú fuiste quien le ordenó a Shiina que me molestara — Sorata lo sujetó del cuello de su camiseta levantándolo con un poco de rabia.

— ¡Por supuesto que no! ¿Que no te das cuenta? ¡¿Eres tan torpe en verdad?!

— N-no sé a qué te refieres... — respondió Ryuunosuke mirándolo seriamente, no dejándose intimidar por la actitud agresiva de Sorata — De todos modos, quien lo hizo es un idiota. Shiina ni siquiera puede cuidarse sola...

— ¡Tú tampoco, Akasaka! — Ryuunosuke lo miró molesto.

— En fin... solo suéltame.

Sorata lo miró un poco más tranquilo, viendo la mirada penetrante, seria y molesta de Ryuunosuke, por lo que decidió soltarlo. Ryuunosuke sacudió el cuello de su camiseta con la palma de su mano y volvió su vista a Sorata.

— Bueno, ahora voy a entr-

— Desearía que Rita estuviera aquí... — comentó Sorata con una sonrisa triste, mirando al suelo. Ryuunosuke no dijo nada, simplemente lo miró seriamente con el ceño un poco fruncido — Ella de seguro sabría qué hacer. Ha sido la única que ha podido acercarse a ti realmente...

— Pero no está — respondió Ryuunosuke con las manos un poco temblorosas sin saber la razón. Quería echarse a llorar, pero intentó tragarse sus ganas — Ella... simplemente se olvidó de mí... — Suspiró su angustia y continuó hablando — Pero no la culpo... incluso admiro su tenacidad.

— Akasaka...

— ¿Qué ocurre?

— Rita también está preocupada por ti.

Sorata dijo esas últimas palabras en un tono serio, honesto, mirando a los ojos al joven programador. Ryuunosuke lo miró impresionado, sin poder decir nada. Sus manos aún temblaban, y sentía que su corazón latía a mil por hora.

I Miss You (Rita x Ryuunosuke)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora