28 ¦ Intención

3.9K 571 215
                                    

Cuando Yoongi se fue a separar de la familia, le dijo algo a Hoseok sin que nadie pudiera escucharlos.

—Hobi, te lo pido por favor.

—Yoon... —dijo él, dejando caer las comisuras de sus labios.

—Vale. No te lo pediré más veces. Sólo míralo.

Ambos miraron discretamente a Jimin. Yoongi vio cómo los labios de Hoseok temblaban ligeramente y sus ojos se perdían en su figura.

—No te tortures más. —concluyó Yoongi, y le dio unas palmaditas en el hombro.

Hoseok lo vio marcharse y luego volvió junto a su familia. Caminaba al lado de Jimin, siendo más consciente de su presencia que nunca.

Pronto llegaron a casa y, cuando lo hicieron, todos se fueron directos a sus habitaciones a descansar. Había sido una gran tarde en familia.

—Hoseok —llamó su atención Jimin. Este se giró para mirarlo—. ¿Y Jinna?

—¿Mamá? Ya se ha dormido.

—Pero no me ha cambiado de ropa. —dijo Jimin sorprendido.

Hoseok tragó saliva y volvió a girarse, haciendo como si nada. Debía centrarse en su tarea, abrir la cama y despejarla de cojines.

—Hey —dijo Jimin, pero esta vez Hoseok no se giró—. Hey —repitió. Ni caso—. Heeeeey.

—¿Qué quiere? —preguntó Hoseok, como si no lo supiera ya.

Silencio.

Hoseok cerró los ojos con fuerza y sacudió la cabeza. Quería ver el cuerpo de Jimin, pero, ¿qué supondría eso? ¿Cómo le haría sentir? ¿Y si... su deseo se hacía más fuerte?

Sin pensarlo se dirigió al cajón del armario para coger el pijama de Jimin. Luego agarró el borde de su camiseta y tiró de ella hacia arriba para quitársela. Intentó no mirar su torso desnudo. Bajó las manos a la cinturilla de su pantalón y se los desabrochó. Al ir a bajarlos, bajó sin querer un poco sus calzoncillos, cosa que le aceleró el corazón.

—Espera. —ordenó Jimin. Hoseok lo miró confuso, algo ruborizado.

—No se preocupe, puedo...

—Lo haré yo, Hoseok —añadió Jimin, con una sonrisa—. Acuéstate.

Hoseok obedeció y se metió en la cama. Se puso mirando hacia la pared, algo nervioso. Había estado apunto de desvestir a Jimin.

Jimin se cambió como hacía a veces, con algo de dificultad, pero enseguida estuvo listo para irse a dormir. Se subió a la cama y se puso de espaldas a Hoseok. Así es como solían dormir.

Pero esa noche Hoseok quería ser capaz de dar otro paso adelante para acercarse más y más a Jimin. Se dio la vuelta y apoyó los labios sobre la nuca del mayor.

Pero Jimin no lo notó, pues ya se había dormido.

Hoseok, en cambio, no pudo dormirse. Demasiadas cosas le rondaban la cabeza. ¿Cuánto tiempo se quedaría Jimin? ¿A dónde iría si no? ¿Y si volvía con Taehyung? ¿Qué estaría haciendo Taehyung en esos momentos? ¿Qué haría él con sus sentimientos hacia Jimin? ¿Por qué le dolía tanto tener a Jimin tan cerca? ¿Por qué tenía que haberse enamorado de él?

Se tumbó bocabajo y trató de librarse de aquellos pensamientos, pero no podía. No podía. No podía...

Jimin se dio la vuelta en sueños, poniéndose ahora de cara a Hoseok. Este giró un poco la cabeza para mirarlo.

Jimin parecía un verdadero adolescente cuando dormía. Tan inocente y torpe... La verdad es que por dentro seguramente lo siguiera siendo. Por culpa de aquel accidente no había podido vivir lo mismo que había vivido Hoseok. Por dificultades, seguramente no hubiera podido ir a muchos sitios, ni conocer a muchas personas.

La mano de Hoseok fue sola hasta la mejilla de Jimin. Tenía la pequeña cicatriz que le había hecho Taehyung. La acarició con el pulgar, tratando de borrar los malos recuerdos.

Jimin movió su nariz. Hoseok sonrió, dándole un toque a esta con el dedo. Su expresión se tornó seria repentinamente.

Da igual si no me ve... ¿No?

—Si vas a besarme, hazlo ya.

Hoseok abrió sus ojos asustado. Los había cerrado sin darse cuenta, dispuesto a besarlo.

—Jimin —tartamudeó él — ¿Qué hace despierto?

—Esperar a que me beses. —respondió, haciendo un puchero. Bromeaba.

—Deje de gastarme bromas, iba a dormirme...

—Entonces dime por qué no podías dormir.

—No...

—Entonces bésame.

—¿Qué... Qué dice? — ¿Lo estaba diciendo en serio?

—Cuéntame lo que te preocupa.

—No es nada, Jimin...

El corazón de Hoseok se congeló cuando los carnosos labios de Jimin acariciaron los suyos. Jimin apenas se movía, sólo los había posado.

Hoseok se dispuso a deshacer ese mínimo contacto, pero no pudo. Aquello escapaba de su voluntad.

Envolvió la cara de Jimin entre sus manos y empezó a besarlo como si fuera un experto. Jimin intentó corresponderlo, pero no sabía por qué, su cuerpo no quería moverse.

Hoseok se separó de él, jadeando, con las mejillas enrojecidas y lo miró.

—Jimin, no sé qué me ha pasado. Lo siento mucho, qué vergüenza.

Se dio la vuelta rápidamente, dejando a Jimin mirando a la nada. Este reaccionó al cabo de unos segundos y se dio también la vuelta. Rozó sus labios con la yema de los dedos y se sintió muy mal.

¿Por qué no había sentido nada?

HopeMin ➼ DiscapacidadOnde histórias criam vida. Descubra agora