We're drunk on love (Nathan Sykes y tú) TERMINADA

-Capítulo 23-

Traté de levantarme por todos los medios, pero mis esfuerzos resultaron en vano, ya que la terrible jaqueca que tenía no me lo permitía. Sonreí al ver a Jay apoyando la cabeza en mi barriga y roncando con una cerveza en la mano. No tenía ni la menor idea de cómo había llegado hasta el suelo. Sinceramente, no recordaba nada.

Algunos flashbacks se reprodujeron en mi cabeza y todos tenían lugar en el mismo sitio: el armario. Aquellos recuerdos vividos la noche anterior con Nathan fueron suficientes como para que callera en una oscura y solitaria depresión.

Aproveché que todos dormían plácidamente para acercarme sigilosamente al de ojos verdes. "¿Qué hice yo mal para perderte?" Me pregunté una y otra vez mientras lo veía descansar al lado de Dionne. Con aquella chica era con la única que no se comportaba como un idiota. La verdad, no entendía qué le había visto a ella. Quiero decir, vale que fuese guapa y con buen cuerpo, pero era una cabeza-hueca. Eso solo significaba que era un superficial. Vaya, y yo pensaba que lo conocía.

-____ -una voz me exaltó a mis espaldas-, ¿qué hacías?

-¡Jay! -sonreí falsamente- Pues nada, aquí, haciendo unos estiramientos de mañana -disimulé.

-Ya... Que rara eres -reí por su comentario.

Jay me hacía sentir muy bien; lo veía más como a un hermano que a Nathan. Algo dentro de mí me decía que podía confiar en él y ahora más que nunca necesitaba desahogarme con alguien que no fuese Noemi.

-Jay, quiero hablar contigo, de amiga a amigo.

-Adelante -se sentó en un sillón.

-No, pero aquí no. Pueden oírnos -tiré de su brazo y lo llevé al baño, ya que estábamos al lado.

-Verás, ¿recuerdas que querías que hablaras con Nathan? Bueno, pues...

***

-¿Enserio te gusta?

-Sí, le quiero mucho...

-Es un idiota.

-¿Qué? -levanté la vista del suelo.

-Es un completo idiota. ¿Quién se fijaría antes en Dionne que en ti? Tiene gustos muy raros.

-Gracias Jay -sonreí-. Ahora necesito olvidarme de él, pero se me hace imposible. ¿Crees que podrías ayudarme?

-Claro.

No sé qué tenía en mente este chico pero en un visto y no visto me apegó a él y unió mis labios con los suyos. Nos separamos repentinamente porque la puerta se abrió de par en par.

-Perdón, no quería interrumpir -dijo Max con expresión divertida mientras cerraba de nuevo.

Ambos nos miramos avergonzados. ¡Con "olvidarme de él" no me refería a esto! No quería esto, yo a él lo veía como un mejor amigo, no como a nada más. "¿Se sentiría así Nathan conmigo?" Me pregunté "¿Dejaría de ser mi amigo porque descubrió que le quería y él como no quería nada más conmigo se enfadó?" Pensé. Quizá había sucedido eso.

Dejando a un lado a Nath, tenía que aclararle a Jay que entre nosotros no habría nada.

-____, lo siento, fue un impulso. En realidad no quería hacerlo, solo te quiero como a una amiga.

-No, tranquilo, yo también pensaba eso -sonreí. Vaya, no pensé que fuera él el que dijese eso.

-Menos mal -suspiró-. Por favor, no le digas nada de esto a Saray.

-Un momento, ¿te mola Saray? -arqueé una ceja con picardía. Saray, eh. La verdad, no se verían mal juntos. Pero nada mal.

-Bueno... Un poco, ¡pero tú calla! ¡O sino suelto lo de Nathan!