We're drunk on love (Nathan Sykes y tú) TERMINADA

-Capítulo 20-

-¿Nunca habéis jugado? -negamos- Bueno, pues es muy fácil. Uno de nosotros será "el hombre de las sombras", tal y como su nombre indica, su misión es ocultarse en la oscuridad de la noche. En grupos de dos debemos encontrarle en el bosque y una vez que lo hagamos, él formulará un acertijo. Si logramos resolverlo, este nos entregará uno de los treinta pañuelos. Cada equipo deberá hacerse con seis de ellos para ganar y luego regresar al campamento con ellos, ¿entendido?

-Sí -respondimos al unísono.

-Está bien... -suspiró Nathan al ver la cara suplicante del moreno- Siva, puedes ser "hombre de las sombras".

-¡Chupi!

-Jo, no es justo, me hacía mucha ilusión.

-Jaybird, otra vez será -se encogió de hombros el de ojos verdes mientras reíamos.

-¿Y los equipos?

-Serán los mismos que los de el otro día para ahorrarnos complicaciones. Como Seev será "el hombre de las sombras" Carolina y Dionne irán juntas -"vaya par..." pensé "____, míralo por el lado bueno, irás con Nathan" "¡No, eso no es bueno!" Me contradije "Tienes que olvidarte de ese chico, él está con Dionne" "¡Pero yo le quiero!" "Quererle te está haciendo daño" "Lo sé, pero no me quiero olvidar de él" y una batalla mental comenzó a disputarse en mi mente y antes de que se me diese cuenta, ya estábamos en medio del monte.

-¡____!

-¿Ah?

-Qué susto me has dado, pensé que te habías muerto en el sitio -reí. "Si tú supieses en lo que estába pensando..."- Al loro, Siva debe andar por aquí cerca.

-¿Y tú como sabes eso?

-Si hubieras estado atenta, habrías escuchado cuando Max dijo que cada cierto tiempo emitiría sonidos -rodó los ojos.

-Vale, lo siento -el tono en el que me había hablado me resultó bastante irritante. Estar con Dionne le estaba afectando y eso no me molaba un pelo.

-Vamos, anda.

Comenzamos a caminar entre los árboles, esquivando arbustos y sosteniendo la linterna en mano. De repente, la luz comenzó a parpadear.

-¿Qué sucede?

-Creo que se ha quedado sin batería.

-¡Ya te dije la noche pasada qué la apagaras! ¿Y qué hiciste? ¡Nada, pasar de mí! Por tu culpa nos hemos quedado sin ver, enhorabuena.

Ahora se había pasado tres pueblos. Estaba completamente harta, así que decidí ignorarle por un largo rato.

Por fin escuchamos unos graznidos que para nada parecían de un cuervo, pertenecían a Siva. Gracias a ellos, pudimos seguir la pista del sonido hasta dar con él.

-¡Felicidades, chicos, sois los primeros en encontrarme! -sonrió. Con el reflejo tenue de la luna iluminando su rostro debo admitir que me causaba algo de miedo. Mierda, si aún tuviese mi linterna...- Ya sabéis como va la cosa, para que os dé un pañuelo tenéis que adivinar mi acertijo. ¿Estáis preparados? Bien -se aclaró la garganta- "¿Qué tiene bosques pero no árboles, tiene rios pero no agua, tiene ciudades pero no edificios?"

No me hizo mucha falta pensar para resolver la adivinanza, pero no la diría en voz alta. No le daría ese gusto a Nathan. No me estaba gustando como actuaba.

-Vamos, dilo -fingió una sonrisa delante del moreno, quién esperaba con impaciencia una respuesta.

Negué con la cabeza. Tampoco hablaría.

-____, sé que la sabes.

Ni me di por aludida cuando dijo mi nombre.

-¡Dila, joder!