Capítulo 19.

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Nuevo capítulo!! (Poner canción possibility)

Loving can hurt but it is the only thing that makes us feel alive.

Narra Amber.
Estaba encerrada en mi habitación mirando por la ventana. Veía como los días de invierno iban desapareciendo y llegaba la primavera. Un mes encerrada aquí. Estando allí sentada, empecé a pensar como llegué a estar en esta situación...

Rosalie: ¡Amber al fin despiertas!

Yo: ¿Que a pasado? ¿Dónde estoy?

Rosalie: Estás en un hospital... Ni se te ocurra volver a cometer una locura como esa...

Yo: ¿Que locura?

Rosalie: Para intentar salvar la vida de tu lobito cogiste un cuchillo y te cortaste. Casi no llegas con vida al hospital...

Yo: Ahora me acuerdo... -susurré- ¿Paul como está? -dije alterada.

Rosalie: En un par de horas te darán el alta y podrás ir a verle...

Yo: ¿Cuanto tiempo llevo aquí internada? -pregunté después de un tiempo.

Rosalie: Cuatro días... Amber él está muy dolido con lo que hiciste, él y todos.

La cabaña de Jake se iba haciendo cada vez más grande en la carretera hasta que Rosalie detuvo el auto y esperó a que yo bajara. Se despidió con una sonrisa y me dejó allí. Del interior de la cabaña salieron Billy y Sam.

Billy: ¿Amber como te encuentras?

Yo: Mejor. Paul...

Sam: Está dentro. Ve con cuidado.

Los dos me miraban apenados, supongo que sería así con todos a partir de ahora. Entré a la cabaña y caminé por un estrecho pasillo. Entonces la puerta de una habitación se abrió y de esta salió Jake, quién al verme hizo una mueca.

Yo: ¿Está aquí Paul? -pregunté lentamente.

Jake: .

Vi como se alejaba lentamente y salía de la casa. Tomé el pomo de la puerta entre mis manos y lo giré lentamente. La puerta se abrió y vi algo que me destrozó el alma... Paul se encontraba tumbado en una cama en la que a penas cabía. Tenía el brazo izquierdo pegado al pecho y envuelto en una venda. Sudaba a mares y estaba dormido. Agarré una silla y me situé a su lado. Había un cuenco con un trapo y agua. Se lo puse en la frente tratando de refrescarle. Se removió un poco pero no se despertó y allí permanecí toda la tarde con él.
Estaba viéndole cuándo de pronto se me cayó el teléfono al suelo haciendo un gran ruido. Me agaché a recogerlo y al volver me encontré con unos almendrados ojos mirándome atentamente. En ese instante, me sentía incómoda a su lado.

Paul: Amber... -dijo en susurros- ¿Que haces aquí? ¿No tenías que estar en el hospital?

Yo: Me han dado el alta y e venido a hacerte compañía -dije agarrando el trapo de su frente y mojándolo otra vez.

Paul: ¿Porque demonios hiciste esa locura?

Yo: Quería ayudar... -susurré poniéndole el trapo en la cabeza.

Paul: Estaba bien -dijo tenso.

Yo: ¿Que te a pasado? -pregunté a punto de llorar.

Paul: Cuándo te cortaste... Traté de ir por ti pero Scott me agarró y me rompió cinco costillas. Creíamos que habías muerto. Carlisle después de revisarte, vino aquí a casa de Billy y me reconstruyó las costillas. Dolía horrores, los chicos decían que mis gritos eran espeluznantes -dijo medio sonriendo pero volvió en una mueca.

Yo: Lo lamento...

Paul: Creo que lo mejor es que nos demos un tiempo -dijo después de un incómodo silencio.

Yo: ¿Que? -dije ahogando un grito.

Paul: Eso...

Yo: No lo estarás diciendo en serio, ¿verdad? ¡¿Verdad?! -grité.
Paul: Me duele más a mi que a ti...
Yo: Es increíble, ¿en todo este tiempo no te has dado cuenta de que yo te amo? -dije mirándole y este a mi- Si es lo que quieres me voy. Una última pregunta antes de irme... ¿Que pasó con la rubia y Scott?

Paul: Están muertos.

No le respondí así que agarré mis cosas y salí de esa habitación. Una vez fuera, me encontré a toda la manada quiénes se me quedaron viendo sorprendidos. Supongo que era por mi rostro bañado en lágrimas. Les ignoré y me adentré al bosque caminando hacia casa. Caminaba sin parar hasta que me di cuenta de que me había perdido en la oscuridad. Me tumbé en el frío suelo y aguardé. Lo único que recuerdo después es unos brazos fuertes cargándome y los gritos de mis tíos.

Así fueron todos mis días des de entonces. No iba al instituto, me quedaba en mi habitación mirando por la ventana, lloraba todas las noches, a penas comía... Estaba enferma. Mi enfermedad era el vacío que me había dejado Paul. ¿Como pude llegar a creer que el estaba enamorado de mi, que estaba imprimado de mi? Él solo se aprovechó y me usó como todos los otros, usar y tirar. Que ciega he sido al no darme cuenta, me entregué a él y recibí esto.

Sara: Amber abre la puerta a venido Seth a verte -dijo dulcemente pero yo no respondí- Amber por favor.

Seth: Tranquila señora... -oí unas pisadas que bajaban las escaleras- Amber abreme la puerta...

Yo: ¿Para que? -pregunté a penas sin voz.

Seth: Tengo que verte... Hace un mes que no apareces por el instituto, des de él día que fuiste a ver a Paul que no sé nada de ti. Tus tíos están muy preocupados. Todos estamos preocupados por ti. No seas infantil y sal de una vez.

Yo: Pues soy infantil, pero no pienso salir.

Seth: Dios mío... -dijo suspirando- Dentro de dos meses es la boda de Bella y Edward. Me han pedido que te dé la invitación, quieren que vayas así que te la dejo aquí en la puerta, cuándo quieras ya la tomarás. Espero que vayas.

Yo: Adiós Seth.

Le oí susurrar un par de palabrotas y después bajar las escaleras rápidamente. Me levanté del sillón lentamente envuelta en una fina sábana y me acerqué a la ventana que daba a la parte delantera de la casa. Había un auto negro aparcado. Seth apareció y empezó a hablar con alguien en el interior del auto. La puerta del copiloto se abrió y salió un Paul cabreado. Miró hacia arriba y yo me escondí detrás de la cortina. No me vió. Entonces Mark empezó a hablar con él, digamos que de muy buen humor no estaba. Me asomé a la ventana tratando de oír la conversación cuándo Seth, Mark y Paul miran en mi dirección. Les miré dolida y regresé a mi sitio. Oí el grito de Seth que le pedía a Paul que regresara, seguro que se había metido en el bosque para que mi tío no le viera entrar en fase. Me senté en el sillón y suspiré aliviada, me alegraba que sus costillas hubieran sanado. Eso por unos segundos me alegró pero el dolor anterior volvió y me derrumbé a llorar.
Dicen que amar puede hacer daño pero es lo único que nos hace sentir vivos... Es un gran mentira. ¿Nadie piensa en que sucede cuándo ese alguien te deja? El amor puede ser tan malo que puede llegar a matar eso es lo único que sé, si no el gran ejemplo que tengo es el de Romeo y Julieta o sinó mirad a mi amigo Scott. El amor lo llevó a la muerte. ¿Cruel verdad?

Love at first sight #Book1Where stories live. Discover now