𝑼𝒏 𝑺𝒆𝒎𝒊𝒅𝒊𝒐𝒔 𝑬𝒏𝒂𝒎𝒐𝒓𝒂𝒅𝒐 ✵ 𝑱𝑱𝑲

❄Capítulo 27❄

《Lais》

Empecé abrir mis ojos lentamente, me sentía un poco mareada como si me faltaran fuerzas.

Analizó el lugar donde estoy y odiaba ser tan débil, lo que me molestaba era ese molesto ruidito de la máquina que monitorea mi pulso y luego veo donde esta la ventana.

Lo escuchó dar un suspiró y luego gira a verme. Nuevamente conectamos miradas pero no pasa nada, ¿será que solo lo soñé?

Al fin despiertas - Dijo al verme y empezó acercarse a mí, con su firmeza y expresión seria, mientras caminaba con sus manos dentro de los bolsillos de su pantalón.

¿Cuanto tiempo llevo aquí? - Fue lo primero que pregunte estaba sintiéndome mal por preocupar a todos.

Una hora y media - No era mucho el tiempo pero sabía que ya era tarde, al menos debía avisar en donde estaba.

¿Donde están mis cosas? -

En el auto - Se limitó a decir - Pero tu teléfono esta aquí - Metió la mano en su bolsillo derecho y saco mi teléfono para entregarmelo.

No dejaba de sonar hace 10 minutos, así que me atreví a contestar e informar a la persona que estabas aquí. - Terminó de decir.

Gracias - Dije apenada, nunca me gustaba dar problemas a las personas. - Lamento si..

No importa - Dijo cortante, la verdad que su actitud no era amable pero podía sentir que me ayudaba con sinceridad, cómo lo sabía, ni yo misma lo sé.

Después de unos momentos de silencio él habló primero.

Lais.. - Me llamó pero su voz estaba algo ¿nerviosa?

Mm ¿si? - Levante la mirada para verlo un momento pero no salía palabra alguna de él.

¿Habías estado enferma antes? -

Tenía la impresión que eso no era lo que quería preguntar pero igual lo contestaría.

Si, hace unas semanas había salido del hospital por síntomas de hipotermia - Levante la mirada para verlo un momento.

¿Hipertermia? Si este tipo de clima te hace mal ¿porque no cuidas mejor tu salud? - Frunci mi ceño pues pareciera que me regañaba.

¿Me estaba reclamando, enserio?

No fue porque quise estar enferma solo sucedió en un momento inesperado - Hablé algo firme pero sin ser brusca.

Tienes suerte que estaba paseando por ahí y te encontré sino aún estuvieras en ese bosque congelandote -

Sonreí un poco porque era verdad.

Últimamente casi nada me sale bien, pero.. - Lo miré fijo de forma amable aunque él no lo era tanto. - Gracias por ayudarme señor Jeon.

Miré su expresión de asombro aunque no sabía porque si para nadie era un misterio saber el nombre o conocer a los dioses. Pero luego pensé que había sido inrrespetuosa y estaba por disculparme pero la puerta de la habitación es abierta y veo a Taehyung entrar.

Lais, santo cielo niña.. ¿quieres matarme de un susto? - Cerró la puerta y se acerco a mi rápidamente para tomar mi mano y besar mi frente.

Lo siento, no es que me guste estar aquí - Le dije comprensiva.

Creo que debemos tomar medidas más preventivas para ti, ya no puedes estar sola,  al menos hasta que realmente hayas sanado. - Acarició mi mano con su leve sonrisa.

Recordé que no estábamos solo y giró viendo a su dirección haciendo que Taehyung también lo hiciera pero pareciera que no era de su agrado pues sentí que apretó un poco mi mano al verlo.