¿Te has enamorado de una persona diferente a ti?
Es lo que le sucedió al gran semidios Jeon Jungkook quien es hijo legítimo y heredo al trono en el Olimpo.
Su padre esta por morir y su último deseo es ver a su único hijo casado, este decide cumplir...
¿Qué era lo que pidió? - Me pregunte a mi misma viendo los pedidos.
Estaba trabajando en la panadería y debía llevar unos pedido a dos clientes pero el problema era que había confundido los notas donde estaba escrito lo que pidieron y ahora no sabía si el primer cliente que llamó quería pan dulce o simple.
El señor Kang quien era mi jefe estaba de viaje y regresaba mañana y me había dejado a cargo de la panadería. Era un hombre firme y flexible a la vez pero muy estricto en cuanto al servicio de los clientes con sus pedidos, por eso no podía darme el lujo de equivocarme.
No puede ser - Murmure para mi misma angustiada. Pase mis manos por mi rostro frustada. - ¿Como fue que confundí los pedidos?
Escuche la campana de la puerta indicando un cliente. Di un suspiró y me gire mostrando una sonrisa olvidando un momento mi problema.
Buenas tardes ¿en que puedo ayudarle? - Pregunté a la persona frente a mi.
Hola señorita, decidí mejor venir a comprar mi pedido - Dijo, frunci mi ceño no entendiendo.
¿Disculpe? ¿De que pedido habla? - Parece que mi problema no me dejaba analizar bien las cosas a veces pienso que soy muy distraída.
El hombre solo se reía sutilmente para después responder.
En la mañana hable pidiendo pan dulce.. soy el señor Jung - Dijo con una sonrisa. El hombre no se miraba molesto ni nada y era raro que un cliente esté así de tranquilo, pues la mayoría son muy exigentes.
¡Oh! Yo.. lo siento mucho - Me disculpe estaba muy avergonzada pero ya había recordado. - Estaba por empacar su pedido y mandarlo.
Esta bien, no será necesario. Lo pagaré ahora - Sacó de su bolsillo su cartera donde busca dinero. - ¿Cuanto sería?
Son cuatro cozonac, cuatro buñuelos y dos donas tradicionales. El total sería L. 573.00 Leus. - Indiqué.
El hombre me extiende un billete que no era de Rumanía y solo lo miré confundida.
Ah señor.. - Este hablo antes de que pudiera continuar.
Soy extranjero para ser exacto de Corea, pero he vivido una parte de mi vida en Estados Unidos y me mude hace poco aquí. Aún no recibi dinero de mi hijo y se me terminaron los Leus ¿puedo pagarle en dólares?
Bueno.. yo.. - No sabia que decirle pues ningún cliente hasta el momento había pagado en dólares. Aunque no habría problemas pues se puede ir al banco hacer el cambio pero eso sería otro asunto aparte.
El hombre seguía esperando mi respuesta y se que todos tenemos necesidades y al menos yo no soy una persona que se niega ayudar a otras.
Esta bien.. puede pagar en dólares yo me haré cargó del cambió - Mencionó con una leve sonrisa amistosa.
Tomo el billete, en una calculadora hago lo que sería el cambio pero el señor habla.
Quédese con el cambio.. esta bien -
No como cree debo darle el cambio de su compra - Dije inmediatamente
No se preocupe jovencita, es muy amable en ayudarme y quiero recompensarle con eso - Insistió.
Resignada acepté aunque no era muy propio de mi hacerlo.
Le agradezco mucho señor Kang y gracias por su compra - Dije y le entregué su pedido donde se despidió con una sonrisa e igualmente se la devolví.
Negué con mi cabeza con una leve sonrisa por lo ocurrido, pero agradecía que gracias a él pude saber ahora a quien debo entregar el pedido de los panes simples. Así que preparé todo para darselo a Raúl quien hace las entregas. Así pase el dia trabajando hasta que llego la hora que finaliza mi jornada de trabajo y poder irme a mi casa a descansar y ver a mi padre.
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《Jungkook》
Buscaba una carpeta que me había dicho mi padre que lo había mandado a dejar en mi oficina pero no la encontraba.
Tenía unas dos horas de estar en mi oficina trabajando. La había mandado a limpiar antes y botar aquello que ya no servía y eso incluía esa fotografía que vieron de ahí aproveche a deshacerme de todo lo relacionado a ella y de otras cosas que ya no eran útiles. Después de ese encuentro me puse a pensar bien las cosas y debía ordenar mi vida seriamente.
Cuando terminé de revisar los asuntos legales de algunas empresas de Rumanía me había quedado una más y era la que no encontraba ya que era una panadería pequeña pero muy concurrida así que decidí revisarla de ultimo, pero ahora no sabia donde la había dejado.
Como dioses somos dueños de todos los negocios y empresas en Rumanía y si alguien quiere ya sea comprar, construir o invertir debe ser aprobado por nosotros y en este caso por mi persona o por Namjoon quienes somos los encargados de todo ello.
Rayos ¿dónde los deje? - Me queje por no encontrarlos. Las que manejabamos son una original y una copia más otro original que tenían los dueños de negocios y esas cosas.
Empecé a buscar en los cajones del escritorio pero nada. Me levante y seguí buscando en el armario pero nada y asi busque prácticamente en toda mi oficina pero seguía sin encontrarlo. Tampoco encontraba la copia en el armario.
Pasé mis manos hacia mi rostro de la frustración de no encontrarlo. La única solución sería ir a ese negocio y pedir los papeles originales y sacarlos de nuevo por medio del código de empresario.
Literalmente tendría que ir solo para saber unos benditos números. Di un suspiró porque no quedaba otra opción. Lo peor es que no puedo mandar a otra persona en mi lugar ya que nadie más maneja estos asuntos.
Podía ir Namjoon en mi lugar pero recordé que él se fue esta mañana a la ciudad de Banat pues había un problema en un negocio de juguetería. Así que yo estoy aquí en Transilvania gestionando los alrededores.
Más que derrotado decidí ordenar todo y cenar un poco para el día siguiente visitar la panadería.
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-Se acerca el encuentro de ambos- 👑❄
Esta semana publicó diario, la próxima será los lunes, miércoles y viernes.
