Educando a la futura princesa (Re-subiendo)

CAPITULO 19: "La cita perfecta"

― No deberías parecer tan decepcionada ― La rubia me miró con los ojos entrecerrados.

― ¿Quién es Gray? ― preguntó Mi prima levantándose.

― Si, yo tambien necesito el chisme completo ― Tabita se cruzó de brazos.

― Es el chico del que ha estado enamorada desde que usa pañales.

La golpeé en el brazo.

― No es cierto, no usaba pañales en primaria.

Las dos chicas rieron.

― ¿Amor de la infancia? ― preguntó Karla alzando una ceja divertida ― Esto se pone cada vez mejor.

― Sora y yo creímos que jamás lo superaría, por eso fue una sorpresa lo de Will, su nuevo NOVIO.

Recalcó.

Asentí abrumada.

― No estoy obsesionada con él, ya pasaron años, desde luego que no me gusta ahora, ya olvidé eso sentimientos.

No es cierto.

Gray es mi mejor amigo desde que soy pequeña, él siempre me había gustado aunque jamás fui capaz de decírselo, porque creía que solo me veía como su amiga y nada más.

De pequeños todos se burlaban de él, porque su peso estaba más arriba del promedio, en un mundo lleno de etiquetas, el recibió una "Gordo". Pero eso no importaba realmente, Gray es una persona amable, generosa, dulce, dedicado, comprometido y muchas cosas más. Como si todas las virtudes del mundo le fueran dadas.

Pero cuando cumplió trece años sus padres se lo llevaron de vuelta a Inglaterra y desde entonces no lo he vuelto a ver, no había regresado ni para vacaciones al país. Solo estuvimos un años juntos en Dream High, pero el alcanzó la clase A con su unirme rojo, era el único con uniforme rojo con alma de uniforme azul. Como estábamos en clases diferentes, no nos veíamos mucho, pero siempre estábamos juntos fuera de eso.

Cuando recién se fue, hablábamos mucho por mensajes pero como pasaron los años se fue haciendo cada vez más difícil, pero eso no significaba que nos olvidáramos del otro, lo sabía.

Y ahora estaba de vuelta.

― Eché sus gritos desde el pasillo ― Dylan entró a la sala de estar ― ¿Qué sucede? ¿Lograste lanzarte encima de esa chica de risos?

El idiota había olvidado su nombre otra vez.

― Algo mucho más interesante aun, querido príncipe ― anunció mi prima con una sonrisa, lo que al chico le extrañó.

― ¿Debería preocúpame? ― le preguntó con los ojos entrecerrados.

― Dime tú ― le respondió ella ― ¿Deberías?

― Solo está jugando contigo ― le dije negando ― No pasa nada.

― Ya lo veremos....

Mi prima comía de una bolsa de galleras como la mujer más sospechosa del mundo. De algún modo parecía que esperaba que la función por la que había pagado un boleto en el cine comenzara.

― ¿A qué se refiere? ― Me preguntó, pero yo lo ignoré y pase por su lado empujándolo cuando escuché las puertas abrirse a lo lejos.

― Estorbas Dylan, hazte un lado.

Casi corrí por el corto pasillo y llegue a la entrada del edificio, el estaba desconcentrado porque los guardias le habían abierto la puerta.

La persona que se encontraba ahí no era nada parecido al chico que yo había conocido, era alto y delgado, quizas hasta fornido, pero yo solo pude ver su rostro, sus ojos brillaban como siempre lo había hecho. Tan azules y claros, que era hipnotizaste.