DRIFT KAULITZ; TOM KAULITZ Y ___ LAMBORDI.

Cap. 96 Espérame...

Decidimos no hacer nada por el día de hoy, ni una sola palabra, ni una sola mirada, Tom se quedó en la  habitación con los niños y yo me fui a otra, no fue por el fue por mi, yo lo decidí así y el lo entendió a la perfección, necesito llorar y sacar todo lo que estoy cargando, mil maneras de vengarme pasan por mi cabeza pero solo hay una que en verdad vale la pena, deseara morir por el resto de su vida, deseara que lo matemos y acabemos con su sufrimiento.

Llore hasta quedar sin lágrimas, llore hasta que se me olvidó que estaba esperando un hijo que no es de Tom, era de madrugada y desperté por un mal sueño, al abrir los ojos ví unos ojos cafés muy hermosos que se iluminaban por la luz de la luna, me dió una leve sonrisa y yo le extendí mis brazos para que se acostara a mi lado.

Tom-. ¿Que haremos?, ¿Quieres tener a ese bebe?.
___-. No... -aclare mi garganta-, mañana mismo iremos a la clínica Tom.
Tom-. De acuerdo, yo apoyo tú decisión.
___-. Pero no lo mataremos, no aún, a el hermano de Karina si pero a él no, debe sufrir.
Tom-. -me tomo del rostro-, sufrirá, se metió contigo y eso jamás se lo voy a perdonar.
___-. Lo que haga mañana no me define como persona, -sonreí-, ¿De acuerdo?.
Tom-. -confundido-, de acuerdo, ¿Quieres quedarte aquí?, o vienes conmigo.
___-. Voy contigo.

Ambos nos pusimos de pie y fuimos a la habitación solo a dormir, con mil cosas en la mente nos es hasta imposible hablar.
A la mañana salimos de casa solo los dos y nos dirigimos a la clínica, Tom ponía música y cantabamos para evitar el tema del bebé, Tom fue muy maduro al aceptar este error sin pelear, gritar o intentar matarnos, a diferencia de el mi padre pego el grito en el cielo, creo le dió depresión al saber que no tendrá otro nieto y en especial casi me mata por confiar en un desconocido.
Los minutos en la sala de espera se nos hacen eternos, Tom solo me tomo de la mano sin decir una sola palabra.

Enfermera-. Señora Kaulitz, pase por favor.

Me puse de pie y Tom me espero ahí, el procedimiento fue un poco doloroso a pesar de que me anestesiaron, trataron hacer que entrara en razón y pensará la situación pero no hay nada que pensar, el no es un hijo de Tom, el es un error, afortunadamente lo menciono antes de que fuera demaciado tarde.
Terminaron y tenía que esperar unos minutos para poder irme, Tom entro conmigo y se sentó a un lado, me miró con una sonrisa y dejo un pequeño beso en mi mano.

Tom-. Acabemos con esta mierda para poder tener nuestra vacaciones.

Yo solo asenti y salimos de ahí, volvimos con los demás quienes ya nos esperaban con los secuestrados, esto se pondrá demaciado interesante.

Marcus-. -nos miro entrar con una sonrisa de lado a lado-, ¿Comprobaste que si esperabas un hijo mío?.
___-. Así es puto enfermo.
Marcus-. Oh por favor mi amor, es lo que ambos queríamos.
___-. Sabes Marcus me caías bien de hecho pudimos ser buenos amigos pero lo jodiste todo.
Tom-. Eres una mierda de persona y aún así no te haré nada.
Bill-. -confundido-, ¿Cómo que no harás nada?, violo a tú mujer.
___-. Lo haré yo misma, -dije con una sonrisa de lado a lado-.

Saque de mi bolsa un frasco y se lo mostré a Marcus como si fuera un trofeo.

____-. Marcus te presento a tú hijo, -tome su mano y se lo di-,  quiero que te lo tragues.

Puedo jurar que aunque aún no lo hace Bill está a punto de vomitar, no e volteado a verlos pero puedo imaginar sus caras, Marcus me ve detenidamente y en ocasiones voltea a ver a Cardona ya que Gustav lo está torturando.

___-. Dije que te lo tragues, ¿O a caso eres sordo?.
Marcus-. -Sonrió-, ya basta con esto y mátame de una vez.
___-. No, te dejare vivir y te lo vas a tragar.
Tom-. Eso es demaciado incluso para mí.
***-. Eso es demaciado para cualquiera.