capitulo 24

7 2 0
                                    

T/N

Me despierto, con la luz de la mañana cayendo sobre mi cara, y me muevo bruscamente, apretando los ojos de nuevo cuando me doy la vuelta.

Pero al rodar sobre mi brazo izquierdo, el dolor se dispara hasta la punta de los dedos y todo vuelve a fluir. Gimoteo, sentándome en la cama.

La sábana cae a mi cintura mientras miro alrededor de la habitación, la habitación de jungkook, y veo que estoy sola.

Miro mi brazo vendado y veo que la sangre se filtra. Dios, ¿en qué estaba pensando anoche?

Un dolor se mete en mi cabeza y me estremezco, frotándome la nuca. Después del incendio y la lesión, decidí perder la cabeza y...

Las imágenes destellan de nosotros tres, y yo sacudo la cabeza. No puedo enfrentarlo. Todavía no. No es que no amara absolutamente todo lo que pasó aquí anoche, pero no debería haberlo hecho.

Dios mío. Salgo de la cama a trompicones, con las piernas débiles mientras agarro la primera pieza de ropa que encuentro en el suelo. Necesito un poco de ibuprofeno y una ducha. Todo mi cuerpo está en llamas.

La hora del reloj de la mesita de noche da las dos dieciséis de la mañana, pero sé que es más tarde que eso. Deben haber hecho funcionar la electricidad de nuevo.

Gracias a Dios. Me pongo la camiseta negra, el olor de jungkook me invade y la piel de gallina se extiende por mis piernas, recordando lo bien que se sentía.

Y por un momento casi me pierdo de nuevo. Me duele un poco el corazón, todavía siento sus ojos. Su boca. Sus brazos.

Algo empieza a pitar desde fuera, y parpadeo, escuchando la excavadora. Hace ese sonido cuando se pone en reversa. Deben estar lidiando con el daño.

Salgo de la habitación, bajo las escaleras, y miro a través de la puerta abierta de Jimin mientras me dirijo al baño. Su habitación está vacía. No es propio de él estar levantado y haciendo tareas a esta hora del día, al menos de buena gana. Debe estar muy asustado de su padre.

¿Cómo empezó el fuego? Ahora que tengo la cabeza despejada, no tiene sentido.

Han vivido aquí arriba toda su vida. Nam les enseñó a ser diligentes en apagar la maquinaria y a no dejar que prendan algún fuego sin vigilancia.

Entro suavemente en el baño y me pongo detrás de la cortina de la ducha, abriendo el agua. Debe ser algo de lo que no nos dimos cuenta que era un problema. Como dijo jimin, algo eléctrico, tal vez.

Apoyada en el lavabo, levanto un poco el brazo, gimiendo mientras me duele. Los músculos están tensos y miro hacia abajo, empezando a desenvolver la gasa. Pero oigo pasos que entran en el baño, y miro hacia arriba, viendo a jungkook. Duchado, afeitado, vestido con vaqueros limpios y una camiseta azul marino, y mis mejillas calientes, pensando en cómo me encantó todo sobre él anoche.

Y aquí estoy, sucia, con el pelo colgando de mi cara, y una noche de sangre y sudor sobre mí. No sólo mi sudor, de todos modos.

Lleva la pequeña caja roja de primeros auxilios, se acerca y la deja en la cómoda, me empuja el pelo hacia atrás, inspeccionando mi cara. Mi piel se calienta con su toque, y cuando gira mi cabeza, acariciando mi mejilla, me lleva un minuto averiguar lo que está haciendo.

Las bofetadas. Se está asegurando de que no tenga moretones.

Le miro fijamente a la boca, deseando haber podido oír su voz anoche. Casi pensé que lo había hecho un par de veces.

Levanto la mano, tocando su mejilla también, empezando a creer que imaginé todo lo que sentí saliendo de él anoche, pero... se da la vuelta, retrocediendo un poco.

El secreto en la cabaña by BTS   🔴+18Where stories live. Discover now