• Feelings •

Celos.

La presión de su pecho se extendió a más no poder. Haciéndole casi imposible respirar.

Su garganta retenía sus inmensas ganas de gritar para ser escuchado por toda la sociedad arácnida, dejando un muy amargo sabor en su boca y una mueca sobre sus labios; además de algunas arrugas en su entrecejo.

─ ¿Y? ─Espetó Peter conteniendo la incomodidad que se acrecentaba con cada segundo que transcurría.

─ ¿"Y" qué, Parker? ─Le contestó el otro con calma, hasta podría decirse que con frialdad.

─ ¿Quién es ella, O'Hara?- escupió con un dejo de desprecio en su voz.

El nombrado se quedó estático, tratando de procesar lo dicho por el otro hombre araña. Mientras que Peter esperaba molesto a que le respondiera.

─Dana D'Angelo. ─Contestó con neutralidad, volviendo a colocar sus dedos sobre el teclado de su escritorio. Dejando a Peter con la palabra en la boca, muy indignado.

Cuando acordaron de tener su relación abierta. Nunca dijeron algo de exparejas o de mujeres.

─ ¿Y por qué estaba en tu cuarto?

─No es de tu incumbencia ─Respondió.

Peter abrió un poco los ojos. Miguel nunca, casi nunca, le contestaba así. Bueno, casi siempre, pero había excepciones. Exaltado, empezó a dar vueltas por la habitación, con ambas manos en su cadera y una muy notable cara de descontento. No quería indagar más en el tema. No era necesario. ¿Acaso tenía derecho de quejarse cuando él mismo propuso tener algo abierto?

─Miguel O'Hara, cuando dijimos que tendríamos esto "abierto" nunca acordamos que podíamos salir con mujeres, especialmente si estás son exparejas. ─Refunfuñó. Haciendo al de ascendencia mexicana suspirar, tratando de tener paciencia. ─Además, ¿Acaso ella todavía guarda sentimientos por ti?

Miguel solo lo veía de reojo.

Vaya coraje tenía ahora.

Hablando de sentimientos guardados.

─ ¿Acaso tú no te acostaste con Wade? ─Reclamó con vehemencia, mostrando sus colmillos del enfado que tenía. ─Y con Edward. Con ellos dos, Parker. ─Escupió con enojo sus palabras.

Dejando boquiabierto a Peter, no espero para nada eso.

Oh, claro.

Él sabe eso. Y también sabía sobre los encuentros nocturnos que tuvieron a sus espaldas. Las miradas mal disimuladas, los coqueteos e indirectas entre su Peter y esos dos buenos para nada que trataban de quitárselo.

─ ¡Pero son hombres!

─ ¡Parker, esto no estaba en el trato!

─ ¡Entonces, rompamos el trato y seamos tú y yo!

Miguel se levantó de golpe y volteó a ver a Peter, quien se arrepentía de sus palabras al ver las intenciones del otro. O'Hara ya tenía la forma de romper con ese maldito contrato, marcándolo como suyo.

A paso lento se acercó al Spidey castaño.

Le haría saber a todos, sobre todo a Wade, que Peter le pertenecía a él y solo a él.