𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟏𝟕

397 46 1
                                    

CAPÍTULO 17
"ALGO EXTRAÑO..."

♣️♣️♣️

Un nuevo día empezaba y Emma junto a Caroline ya estaban preparadas para iniciarlo.

—¿Informes de los meses previos?

—Listo.

—¿Portafolios de los maestros?

—Listo.

—¿Plan de actividades administrativas y la excursión del próximo mes?

—Listo y listo.

Caroline sonrió orgullosa de Emma, aunque ella era menor veía en su doppelgänger una mujer que siempre se esforzaba, amable y dedicada. Al igual que ella.

—Le agradezco a la vida haber conocido a la mujer más eficiente —dijo la directora— y tiene mi rostro.

Ambas rieron pero entonces Emma se tambaleó un poco tras un pequeño mareo.

—Ey —Caroline llegando con ella usando su velocidad vampírica la tomó entre sus brazos— ¿Estás bien?

—Si es solo que... me he sentido algo mal estos días.

—¿Le has dicho a alguien sobre esto? Bueno, técnicamente estamos muertas, no es normal.

La mayor de las rubias negó recomponiéndose un poco.

—Le diré a Bonnie o Freya, esto solo lo puede causar alguien con magia... —la mirada de la mujer fue a su doppelgänger—. No le digas a nadie, por favor.

—Emma... no deberías ocultar esto. ¿Los Salvatore saben?

La mujer negó.

—¿Ni siquiera Damon?

—No...

Caroline respetaba el hecho de que Emma no quisiera alarmar a los demás pero le preocupaba que ocultara esto tan extraño.

—Promete que hablarás con Bonnie o Freya, ¿de acuerdo?

Emma asintió luciendo algo débil pero en pie nuevamente.

—Te quiero. No quiero verte mal.

Emma sonrió conmovida por la mujer y la abrazó.

—Eres el mejor linaje que alguien podría pedir —una sonrisa se dibujó en las dos mujeres—. Buscaré a Emily un rato.

Y sin más, la mujer salió de la oficina para buscar a la pequeña. Tras caminar un poco por la escuela pensando en hablar con alguna de las brujas y sobre qué o quién estaba tras ello era casi que evidente.

—¡Emma!

La voz de Emily sacó de sus pensamientos a la rubia, haciéndola notar su lindo vestido color azul y sus cabello suelto.

—¿Cómo estás, pequeña?

—Bien, ¿qué haces?

—De hecho estaba buscándote —sonrió la mujer al ponerse a la altura de la niña— ¿No tienes clase?

—Hasta luego del almuerzo —aseguró la pequeña castaña— ¿Quieres ir a jugar conmigo?

—Claro.

Emma estaba cómoda con su nueva vida, una que había anhelado hace mucho. Elijah como su pareja, los Salvatore, los Mikaelson, Bonnie y Enzo como amigos y siendo parte de un lugar tan familiar como la escuela era como vivir en un sueño... un sueño que alguien supo que tenía.

𝐋𝐀 𝐔𝐋𝐓𝐈𝐌𝐀 𝐅𝐔𝐍𝐃𝐀𝐃𝐎𝐑𝐀Where stories live. Discover now