—Creo que vas a querer esta interrupción, mamá...

Mi madre finalmente levanta la mirada de su pantalla y me observa, mientras que me escondo detrás de Jared debido a los nervios. ¡Realmente es ella! Todos estos años he estado idolatrando su trabajo, ella era mi heroína y ahora también mi madre, nunca supe que ella era mi mamá y que llevaba buscándome toda la vida después de que mi padre me llevará con él.

—¡Jared Massip Black! ¡¿Estás a punto de decirme que pronto seré abuela?! —le preguntaría mi madre a Jared y parece que está a punto de darle algo.

—Solo tengo veintitrés años mamá, así que todavía no. Y no soy el primero en la fila para darte nietos, no soy tu primogénito, ¿Recuerdas?

Una fugaz expresión de tristeza cruza el rostro de Olivia, antes de que ella la esconda detrás de una sonrisa cortés.

—Bueno, siendo así tal vez te gustaría presentarme a tu invitada, creo haberte enseñado mejores modales jovencito.

—Mamá ya no soy un jovencito —diría Jared con un poco de molestia—Pero ella es... —Jared se quedaría callado para darme un leve asentimiento que me transmitiría confianza.

—Hola...yo soy...Adrienne —diría con un tono de voz bajo y un poco penosa, manteniendo siempre mi vista en el suelo para no verla.

Je suis désolé. Lo siento, ¿nos hemos conocido antes? —me preguntaría con una sonrisa amable y familiar.

—Adrienne, habla. Vamos, todo estará bien —expresaría Jared hacia mí en un susurro.

—Um, yo...la cosa es...

Jared me empuja hacia adelante y puedo ver inmediatamente las similitudes entre mi madre y yo. Ella tiene una mirada confusa, pero al mismo tiempo cálida en su rostro sonriente.

—Intentemos presentarla una vez más, ¿les parece? —diría Jared tratando de aclarar la situación con una sonrisa  —Mamá, quiero que conozcas a Adrienne, aunque tú la conoces como Andrea...

Los ojos de Olivia se abren de par en par cuando el reconocimiento y el entendimiento cruzan en su rostro, parece una mujer que finalmente ha encontrado la última pieza de un rompecabezas que ha intentado resolver durante décadas. Sus ojos empezarían a nublarse de lágrimas y simplemente miraría a Jared sin poder creerlo aún.

—¿Nuestra Andrea, Jared? —preguntaría mi madre  con esperanza en un hilo de voz, escucharla decir esas palabras hacen que mis lagrimas salgan libremente por que hay amor en su voz, he estado esperando escuchar esa clase de amor toda mi vida —¿Puede esto ser verdad? ¿Mi pequeña regresa después de veintitrés años?

—Tengo tres resultados de pruebas de ADN que dicen que lo es —diría Jared secándose las lágrimas de sus ojos con una mirada sincera hacia nuestra madre.

Las lágrimas no paran de caer de los ojos de mi madre y ella corre alrededor del escritorio para darme el tan anhelado abrazo que he estado esperando toda mi vida, el rostro de ella está lleno de felicidad mientras me aprieta con fuerza, las lágrimas caen de mis ojos mientras disfruto el calor del amor de mi mamá

¡Mon Dieu! ¡Mi bebé! Pensé que te había perdido para siempre, ¿Dónde has estado todos estos años? ¿Tu padre ha sido bueno contigo? ¿Tuviste una buena vida? 

Empiezo a llorar con más fuerza, quería que esta fuera una reunión feliz y lo es pero, ¿cómo le cuento sobre la familia infernal que me crio? Eso le rompería el corazón...

—Yo solo estoy feliz de conocerte.

—Y yo estoy tan feliz de verte de nuevo, mi querida, mi amada niña —diría mi madre con una sonrisa brillante, sus ojos verdes resplandeciendo de felicidad.

Una señal del DestinoWhere stories live. Discover now