Cap 14: El acercamiento

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Jiang Cheng avanza como si tuviera un agujero en el corazón.

No es la primera vez, lo sabe.

Probablemente no será la última vez.

Pero ignora. Mientras la lámpara de papel se balancea para iluminar su camino, con el andar pausado de su XiaoLi, Jiang Cheng observa el camino oscuro del bosque con la esperanza de que no falte mucho para llegar al pueblo de Xiaogan. Se concentra en el dolor de trasero, en que tiene hambre y necesita un baño. Imagina, considerando que ya está más allá del horario Lan, que Lan Huan se quedará dormido sobre XinXin en cualquier momento.

El viaje ha sido llevadero en esa primera jornada, avanzando durante la noche, descansando un par de horas antes del amanecer y deteniéndose en el camino para comer lo que sus discípulas prepararon para ellos: bolas de arroz, las suyas especiadas y mantou. Se detuvieron más adelante frente a un río para que sus yeguas descansaran un rato y bebieran suficiente agua. De allí, no han tenido una real parada.

Una parte de él, ha estado evitando ese momento. Lan Huan se ve increíble con esos tonos oscuros que resaltan la blancura de su piel y el marrón de sus ojos. Odió como su omega se revolvió con intensidad y lo hizo sentir ansioso por todos lados. El viaje se suponía que era un escape, una necesidad de no estar en Muelle de loto para recordar todo lo pérdido, un impulso con lo cual liberarse, pero no pensó que ver a Lan Huan así haría que su interior se sintiera en llamas.

Por primera vez puede entender las palabras de Lan Huan: su cuerpo puede estar más que dispuesto, su omega ansioso del contacto, pero él simplemente no está conectado. Podría tener sexo, seguro lo disfrutaría y la pasaría bien, pero honestamente no tiene el deseo de iniciarlo.

Así que alargar el viaje hasta una posada fue, en cierta forma, un escape para evitar que se encontraran a solas. Pero ya ha llegado al límite considerando que ha pasado mucho tiempo sin tener que cabalgar por casi un día entero. Y no hay excusa de una guerra o una cacería nocturna para justificar el sobreesfuerzo.

Lan Huan cabalga suavemente apenas una cabeza atrás de él. Mira fijamente los tallos de los árboles iluminados por la lámpara y luego, Jiang Cheng siente su mirada fija en el cuello. Tal parece que está más despierto de lo que pensó.

—Ya casi llegamos, debemos estar cerca del pueblo. Conozco una posada aquí que podemos visitar.

No hay palabras de parte de ambos mientras avanzan. Lo que sí hay son miradas. Jiang Cheng no puede evitar ver el claro del cuello de Lan Huan ahora que su cabello recogido lo deja a la vista, se imagina morder justo en la nuca como hizo con tantos otros alfas o tenerlo bajo él, sea penetrándose o penetrándolo, mientras busca su propio placer y le prodiga placer al otro. Los recuerdos del celo son pocos, pero están plagados de todos los sentidos. Por lo que al ver las manos grandes tomando las riendas de XinXin se imagina esas mismas manos sujetando sus caderas y apretándolo contra la cama. Cuando ve el movimiento oscilante de su cuerpo por la cabalgata y la forma en que sus piernas fuertes encierran a la yegua, una parte de él quiere tenerlo así en su espalda.

Tiene un agujero en su corazón, sigue allí, incómodo y espeluznantemente doloroso.

Pero su omega, rechazado una vez más, todo lo que desea es el contacto y la seguridad de que hay un lugar que sí lo anhelan.

Ese lugar debería ser su alfa.

El pueblo se observa a los pocos minutos de silencio. Algunos locales están abiertos aún, pero la mayoría de los comerciantes ya han guardado todo y lo que funciona son las posadas y burdeles. Lan Huan se acerca a él mientras Jiang Cheng apaga la lámpara y ambos bajan de sus caballos cuando llegan a la posada que Jiang Cheng selecciona. Tiene su establo para guardar a las bestias y que estas descansen también. La encargada los recibe con una sonrisa al detectar la riqueza de sus túnicas. No los reconoce, pero no importa, basta con verlos juntos y notar la marca en su cuello para decidirlo.

(No) Nos amamos (MDZS)Where stories live. Discover now