Cap 06: El primer fracaso

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Jiang Cheng lo sabe.

Sabe que algo está mal.

Sabe que no funcionó.

Decide ignorarlo.

Toma el té que le dieron, deja de beber el te negro como lo recomendaron, no entrena directamente con sus discipulos y se dedica a solo observar, cede la cacerias nocturnas para sus segundo al mando, come lo que le indican su médica y reposa tanto como puede. No hace movimientos bruscos, no se esfuerza de más, modera su propia irritación al sentirse limitado y solo respira para pensar que era necesario. Todo por su heredero.

Sabe que algo está mal.

Sabe que no funcionó.

Pero se levanta todos los días con la sensación de oscuridad intentando agarrarlo y hacer lo mejor que ha sabido hacer para evadirla: levantarse de la cama, trabajar, inventar nuevas tareas para mantener a su mente ocupada, para no sentarse con sus propios pensamientos y su omega llorando por dentro.

Camina los muelles con su espalda recta, sus manos atadas en la espalda. Avanza entre sus discípulos que saludan y hacen reverencia, mostrando su nuca marcada y haciendo caso omiso al poco olor que queda de su esposo sobre él. Sabe que deben haber rumores, pero camina. Sabe que no hay nada dentro de él, pero avanza. No va a darle nombre a lo que realmente pasa hasta que su médica no lo diga. No le dará voz a sus miedos, no...

—Zhongzhu, lo siento —escucha de Zu-popo, la médica de la secta. Ella suelta su muñeca después de haber revisado por enésima vez sus meridianos—. No hubo concepción.

La anciana se levanta de la silla y mueve cosas en su escritorio. Jiang Cheng traga en silencio su decepción mientras amarra de nuevo el brazalete de cuero de su brazo izquierdo.

—A veces pasa —dice ella, con la suavidad de una madre—. No todas las cúpulas de alfa y omega son fértiles. Se requieren de varios intentos para algunos, zhongzhu.

—¿Estás segura de que no soy yo el problema?

—Te presentaste mucho más temprano que otros omegas. —Ella lo sabe porque fue enviada de Meishan Yu para atender eso cuando su madre pidió ayuda—. Eso implica que tu tiempo es más corto para ser fértil, pero aún eres joven, zhongzhu.

—Fueron cinco malditos días con él follándome como un animal —Jiang Cheng suelta las palabras como si fueran acero caliente en su lengua. Tuerce sus dedos y Zidian chispea en sus muñecas. Siente un poco de paz con el golpe eléctrico que intentan calmar su malestar—. Cinco días de maldito celo, sin nada más que su semilla, ¿cómo es que...?

—Zhongzhu... es probable que el efecto del té haya sido un atenuante. Aceleró el celo de ambos y es probable que tu cuerpo aún no estuviera preparado.

—¡Mierda...!

Respira.

Ya lo sabía.

Ya su omega lo sabía.

Respira.

—Zhongzhu, no se haga daño —La anciana lo sujeta de su hombro. Jiang Cheng abre los ojos para notar que está apretando su puño derecho y que zidian está enviando ligeras líneas de energía por su brazo. Lo suficiente para doler y no marcar—. A madam Yu no le hubiera gustado eso.

—Honestamente poco entiendo de lo que hubiera querido a-niang. ¿Cuánto debo esperar para intentarlo de nuevo?

—Este tipo de té suele afectar la frecuencia del ciclo. Prepararé un brebaje para que tu cuerpo se limpie del efecto del té de primavera. Probablemente para primavera tendrás de nuevo un celo. Este celo natural será auspicioso para que pueda yacer con su zhangfu.

(No) Nos amamos (MDZS)Where stories live. Discover now