53 | The Chain

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CAPÍTULO 53:"The Chain" - Fleetwood Mac

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CAPÍTULO 53:
"The Chain" - Fleetwood Mac

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Sábado 12 de Agosto de 2023.
Kearney, Nebraska, Estados Unidos.

Era temprano, Julie se encontraba haciendo el desayuno en la cocina invadida por el aroma a café que tan rico olía haciéndose en la cafetera, mientras untaba mermelada en unas rodajas de pan lactal que tenía separadas en un pequeño platito. El sol de la mañana entraba por las ventanas, iluminando de una forma preciosa y calma el ambiente, donde también se podía oír el cantar de los pájaros y el relinche lejano de los caballos esparcidos por la granja, algo que hacía sentir a la muchacha motivada, muy feliz mientras tarareaba una canción por lo bajo, con su cuerpo meneándose un poco en su short y una remera de algodón grises. Los últimos días habían sido muy divertidos y llenos de coquetería con Max, pues apenas podían separarse el uno del otro como si se tratara de una pareja en su luna de miel, conociéndose mucho más en la intimidad donde nadie más era testigo de sus románticas muestras de amor debajo de las sábanas blancas.

-Buen día, amor...- sonrió ella con tontera luego del susto que se había llevado al ser rodeada por los brazos del holandés por su torso, sin poder evitar sonrojarse al sentir su cuerpo caliente de recién haber salido de la cama impactar en su espalda y nalgas, como también una respiración pesada hacerse presente en su cuello. -¿Cómo has dormido?- preguntó curiosa, comenzando a percibir unos besitos en aquella sensible zona de su cuerpo que le hicieron temblar las piernas casi al borde de perder la estabilidad.

-Muy bien...- contestó con tontera y ambos rieron pícaros por lo bajo como si alguien pudiera escucharles y entender de qué estaban hablando, pues la noche anterior no había sido una excepción. -Te ves preciosa esta mañana, mijn liefje... [Mi amor.]- susurró en su oído con cierto tono caluroso mientras acariciaba su cuerpo con una lentitud tortuosa hasta para él mismo, envolviéndose en su perfume y en su lacio cabello que estaba peinado hacia un lado.

-Gracias...- respondió halagada y llena de amor por el hombre que no dejaba de plantar tímidos besitos en su piel, provocándole unos leves suspiros que no podía retener aunque quisiera. -No te pongas cariñoso que hoy tenemos planes...- lo separó de ella con un pequeño empujón con sus nalgas hacia atrás, haciendo reír tontamente al hombre para luego éste dejarle un último beso en su mejilla y distanciarse.

-¿Qué planes?- preguntó con un ligero ceño fruncido que indicaba intriga mientras daba unos pasos a la otra punta de la mesada donde la cafetera ya humeaba con intensidad al tener la jarra llena, con la muchacha continuando untando los pancitos para desayunar.

-Sorpresa, mi amor...- le regaló un guiño de ojo cuando le dirigió la mirada, sin poder evitar sonreír con tontera al ver a un completamente despeinado y aún adormilado Max que entrecerraba sus ojos por la intensa luz solar. -Que estoy segura que te va a encantar...- añadió cómplice y con cierto entusiasmo, riendo por la expresión de asombro formándose en él; con sus cejas levantadas totalmente incrédulo para luego éste sólo asentir en aceptación y comenzar a servir la bebida en ambas tazas que acababa de bajar de la alacena frente a él.

POLAROID | Max VerstappenWhere stories live. Discover now