El mago, El Vampiro Y El Lobo

La boda mágica

Draco entendió por qué no quería el color así que al día siguiente le mando un esmoquin de color azul marino el cual le encantó a Harry.

El Aquelarre Collen avía aceptado ir a la boda de Harry aún con los múltiples viajes que se arian.

La boda mágica sería en Francia justo como Draco avía querido y deseado ese mismo día Harry, Draco, Jacob, su manada y ambos aquelarres viajarían a América más específicamente a México.

Draco tenía curiosidad Yucatán así que hay sería su boda Muggle al día siguiente viajarían a Noruega.

Dónde se llevaría a cabo la boda nórdica.

Racknar avía insistido por no decir rogado, en qué la boda fuera en el bosque a media noche cuando la luna estará en su mayor esplendor así el matrimonio sería más feliz y estaría bendecido por los dioses Nórdicos que según viejos relatos y canciones acostumbraban a festejar por la noche.

Después de la respectiva celebración y las tradiciones que se debían de seguir Draco y Harry tendrían su anhelada luna de miel puesto que ni en su boda mágica ni en su boda Muggle se tocarían más aya de los bailes que debían bailar o los besos que debian  darse la consumación sería en la boda Nórdica así sería más especial.

Sin embargo las tres bodas se llevarían a cabo en invierno puesto que Draco dijo que así quería que fuera...

Harry casi se agarra a madrazos con el ministro Británico cuando esté exigió que se casarán cómo se tenía planeado originalmente (el 14, 15 y 16 de mayo) pero Harry era un prometido consentidor que se empeño para que las tres bodas fueran en invierno (20, 22 y 23 de diciembre) por lo que asiendo uso de unas cuantas palabras, algunas amenazas, algunos golpes desmedidos y un buen Cruciatus para que el ministerio aceptará más que gustoso la fecha de la boda lo consiguió.

Los siguientes meses Harry se concentro en pulir bien sus votos, ir bien en la escuela, atender (cuando debía hacerlo) sexualmente a Jacob y preparar al aquelarre Collen puesto que al igual que la boda su prueba fue recorrida en tiempo, ahora sería en febrero.

Ahora por fin era el ansiado día que el mundo Mágico espero por 17 largos años, un día en el que su salvador Harry James Potter Black Evans Prince Gryffindor Hafulpoff Reybenclow Sliferin Gaunt desposaria a su prometido Draco Malfoy.

Las calles de la Francia mágica estaba llenas de nieve, la gente tenía salir con un gorro, una bufando, guantes y un buen abrigo, aún así su nariz y mejillas estaban rojas por el frío.

Harry ya esperaba a Draco en el altar mágico de la iglesia que fue elegida por el mismo Draco,  la iglesia entera estaba llena de rosas Blancas y Rojas, algunas rosas de cristal, de plata y de oro se colaban entre las rosas naturales, los listones dorados y plateados estaban por todos lados.

Parecía que nevaba dentro de la iglesia pero solo era un pequeño truco que fue creado por magia, Harry ya se imaginaba cuánto demonios avía gastado Draco en todos esos preparativos lamentaba el hecho de haberle dado carta libre a Draco con una de las bodegas.

Los invitados ya estaba hay del lado derecho estaban lo invitados de Draco que eran básicamente toda la gente importante de Francia y Inglaterra también estaban los gemelos Wesley que miraban todo con cara de poquer.

Del lado izquierdo donde los invitados de Harry estarían, solo se encontraban el aquelarre Locbrock y el aquelarre Collen, la manada de Jacob y la maldita Bella Suan que desgraciadamente avía ido con Edward (Bella ya sabe del mundo mágico desde Junio por qué Edward dijo que no podía guardarle secretos a su novia).

Bella miraba todo con asombro, rabia y envidia, a su punto de vista ella debería ser la que se casaba con Harry no el maldito de Draco (nadie acepto el aquelarre Locbrock conoce a Draco).