EPILOGUE

26.5K 1.7K 1.7K
                                    

Omnisciente  𝔞𝔡 𝔪𝔬𝔯𝔱𝔢𝔪          𝐿&𝒟.

El miedo que presenciaba Emily en ese preciso momento no se comparaba con nada

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


El miedo que presenciaba Emily en ese preciso momento no se comparaba con nada. Subia desde la punta de sus dedos hasta la raíz de su cabello, envolviéndola y haciéndola temblar de mero terror y más nada.

Allí, en ese cuarto oscuro y sin colores más que el crudo color gris perteneciente al cemento.

Allí en aquel cuarto que olía a humedad y a moho, a tristeza, dolor, terror y muerte.

Su cabeza aún giraba y una de sus venas palpitaba, en respuesta al dolor que le punzaba la cabeza.

«¿Estoy drogada?».

La verdad era que no recordaba mucho, más que la noche de pasión que había tenido con su esposo.

No recordaba haber bebido o comido algo con algún sabor o aroma extraño. No recordaba...nada.

La puerta de madera se abrió y la silueta de alguién apareció acompañado de un rayo pequeño de luz, el cual penetro los ojos de Emily y aumentó el dolor.

Ella dejó salir un quejido y se tapó la cara con ambas manos.

Aquella persona —mago o bruja— se acercó a ella y sin decir palabra alguna, colocó la mano sobre su hombro y la obligó con agresividad a ponerse de pie.

Emily obedeció, solo porque su corazón se lo pedía a gritos. No levantó la cabeza en ningún momento y aunque sus piernas se sentían débiles y rígidas, ella trató de seguirle el paso al individuo.

Ni siquiera sabía qué tipo de prenda estaba vistiendo, por eso mismo la mestiza llevó las manos sudorosas a su cuerpo y se aseguró de llevar algo puesto.

Era un camisón, tal vez, le llegaba por los talones y era una tela rígida.

Subió unas cortas escaleras y el corazón cayó a sus pies cuando visualizó un tumulto de personas, abucheos y el sol sobre el cielo. Sin embargo, antes de llegar a aquella tarima que la esperaba a unos cuantos metros, el individuo colocó una tela oscura sobre sus ojos y la ató a su cabeza, así privándola de la vista.

Su corazón comenzó a acelerarse como loco y todos los sentidos de pánico se activaron en su interior.

«¿Era obra de Draco? ¿De Narcissa? ¿O estaba allí por las consecuencias de sus actos?».

¿Q-qué estoy haciendo aquí? —logró formular aquella pregunta temerosa y desesperada.

La risa ronca del individuo —el cual Emily pudo reconocer como la de un hombre— llegó a sus oídos y retumbó en su cabeza.

— Creo que su cuento de hadas ha llegado a su fin, mi señora.—le respondió en un tono burlón.

El aire empezó a disolverse en sus pulmones, era como si todo el mundo se detuviera; los sonidos, el aire, las personas.

Love and Darkness | Draco MalfoyWhere stories live. Discover now