Capítulo 39

2.3K 130 11
                                    

Abrí los ojos de golpe, sentándome sobre la cama casi de un gran salto. Busqué con la mirada a Shawn, por todo el lugar, pero no estaba. Me encontraba en un lugar parecido a las enfermerías de los colegios, estaba sobre una pequeña camilla, rodeada por repisas con algunos cuantos medicamentos.
La puerta se abrió, y esperé ver a Shawn ahí, pero no.

-______, haz despertado. -dijo Matthew, caminando a pasos rápidos hasta mi. Sus ojos estaban rojos y denotaban tanto cansancio como tristeza, demasiada. Fue así cuando me di cuenta que había sido un completo sueño, y si había sucedido.

-Matt, dime que no sucedió.. -rogué, esperando que su respuesta fuese la que deseaba. Matthew bajó la mirada, quedándose en completo silencio.- Matthew, respóndeme. -exigí, sintiendo mi voz quebrarse.

-Sucedió.. -murmuró, apretando los labios.

-Oh, no. -negué frenéticamente, llevando mis manos a mi rostro, cubriéndolo y llorando contra ellas.- Es mi culpa, todo es mi culpa. -sollocé. Sentí como Matt se acomodaba a mi lado, rodeándome con sus brazos y atrayéndome a él en un protector abrazo.

-No digas eso jamás. No es tu culpa. -susurró, su voz se cortaba un poco.

-Claro que lo es. Esto le ha sucedido por mis estúpidas decisiones. -dije, molesta conmigo misma por todo.

-Por favor, no te alteres. No quiero que te vuelvas a sentir mal, linda. -pidió el de ojos claros, besando mi frente con suavidad y atrayéndome un poco más hasta él.

-No me pidas eso. No puedo. ¿Cómo podría tranquilizarme cuando acaba de morir una persona que quería demasiado? -dije, subiendo ligeramente mi tono de voz.

-¿Recuerdas que se trata de mi mejor amigo? -cuestionó Matthew, en un susurro. Tenía razón, me estaba olvidando completamente de todos ellos, que también habían perdido a un gran amigo.
{...}

Ver de nuevo a la señora Mendes fue tan duro, y yo era tan débil. Ella lloraba sin consuelo alguno, su corazón estaba hecho pedazos, su amado hijo se había ido, y no había marcha atrás.

Me observé en el espejo sin animo alguno. Mis ojos demostraban mi falta de sueño, estando rojos e hinchados por llorar demasiado. Odiaba vestirme de negro, peor para este tipo de ocaciones las cuales deseaba poder evitar, pero era imposible.
Acomodé mi cabello en una desordenada coleta, la apariencia no me interesaba ahora.
Di un profundo y pesado suspiro, soltándolo de golpe mientras me sentaba en la orilla de mi cama. Mi mirada estaba en un punto fijo en el suelo, mientras mi mente daba vueltas y vueltas. Mordisquee mis labios en busca de control, pero fue inútil, rompí en un sonoro llanto.

Agradecía profundamente que él hubiese sido parte de mi vida. Era un grandioso chico, que se merecía todo el amor del mundo, pero yo sólo lo defraudé y le mentí.
Sentía tranquilidad al saber que, al menos, logré escuchar de su voz que me perdonaba..y me quería.

«FLASHBACK»

"-Lindo auto, Shawn. -dije mientras sonreía. Él no apartaba su vista del camino.

-Ya sabes lo que dicen. "Las cosas se parecen a su dueño". -bromeo, para después soltar una carcajada al igual que yo.

-Bueno, creo que si aplica esa frase en tu caso. -dije, sonreí guiñándole un ojo, a lo cual él me observó de reojo y rió.
{...}

Estaba tan sorprendida, el rostro de Shawn estaba cubierto de un par de moretones, su labio inferior lucía rojo, su ojo izquierdo revelaba un color morado ligeramente. Miré a los chicos en busca de que alguien explicara algo, pero fue en vano, todos callaban.

-¿Qué pasó, Shawn? ¿e-estás bien? -pregunté, me trababa con las palabras. Me arrodillé frente a él para poder verlo mejor. Su mirada se fijó en mi ojos y yo no supe qué decir. Nadie dijo nada, ninguno fue capaz de decir una sola palabra.- ¡Chicos, por dios! ¿Qué sucede? -pregunté, girandome sobre mis pies para ver a Cameron, Nash y Hayes.

-Bueno, Shawn... -comenzó Cameron, hizo una gran pausa, donde yo me desesperé aún más.

-Hace un par de días.. dos para ser exactos.. -siguió Nash, daban tantas vueltas y no me decían nada.- Shaw.. -fue interrumpido por Shawn.

-¡Peleé con.. -esta vez Shawn fue interrumpido por Hayes.

-¡Con un gran amigo suyo! No lo conoces, _____. -dijo al instante. No podía creerlo. Me refiero a que, Shawn no es así, él es tan pacífico y tolerante. De hecho, jamás lo he visto molesto del todo.
{...}

-¡No, Shawn! No puedo creerlo. -dije indignada y salí de ahí. Detrás de mi logré escuchar las sonoras carcajadas de mamá.

Caminé hasta el living, Shawn solía caer en mis bromas todo el tiempo. Me senté en una de las orillas del sofá más grande, dándole la espalda a Shawn, quien entraba a él living.

-Princesa, yo no quería que te molestaras, sólo bromeaba. -se defendió. Yo no soporté más y solté una suave risita. Shawn abrió sus ojos como platos al darse cuenta que de nuevo había caído en mis bromas.- Te detesto. -dijo entre risas.

-Me adoras. -aseguré con aires de grandeza.

-Demasiado. -aceptó y reímos. Me lancé a sus brazos y besé sus labios de la forma más tierna posible.

-Wo, wo, wo, no frente a mi. -se quejó Ethan, mientras se adentraba en el lugar. Me separé ligeramente de Shawn, ambos reíamos.

-Entonces vete. -sugerí.

-No, es mi casa. -argumentó mi castaño hermano. Besé cortamente los labios de Shawn, haciendo que Ethan se molestara un poco.

-Siento que me estás utilizando a tu favor. -comentó Shawn entre risas.

-Sólo un poco. -dije acompañado de una sonora carcajada."

«FIN FLASHBACK»

No pude evitar sonreír ligeramente al recordar todos aquellos momentos junto a Shawn. Siempre estaré tan agradecida de haber tenido que mudarme a California, pues aquí conocí a grandiosos chicos, tan dulces y divertidos.

Oí un par de golpes suaves en mi puerta, sacándome de mis pensamientos. Tomé una gran bocanada de aire, sabiendo que ya era hora. Coloqué mis zapatos y fui hasta la puerta, abriéndola. Y ahí estaba Matthew, con su mirada perdida, llena de dolor.
No dije nada, sólo me abalancé hasta él, abrazándolo. Apoyó con suavidad su mentón sobre mi cabeza.

-No puedo creer que se haya ido. -susurré, sintiendo las lagrimas caer ya por mis mejillas.

-Está en un mejor lugar. -susurró, depositando un pequeño beso en mi cabeza, para después tomar mi mano.

Bajamos, él jamás soltó mi mano, al contrario, la tomaba con más fuerza.
En el living ya esperaban Ethan, Grayson y mamá, quien realmente entristeció con la noticia, ella adoraba a Shawn.
Me era aún más depresivo vernos a todos vestidos de negro, sabiendo la razón. Simplemente deseaba poder tener la oportunidad de volver a aquel día e impedirle salir de casa de Matthew, y todo estaría bien ahora.

El camino al cementerio fue aún peor, nadie decía nada, el ambiente era demasiado triste y deprimente para decir algo.
Yo, por mi parte, observaba por la ventana, era como mi pequeño escape a pensar. Jamás había sufrido tanto..

Waiting for this love » Matt EspinosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora