Príncipe de la Oscuridad [ vhope ]

5

Las cosas que más amaba hacer eran bailar y pasar tiempo con sus amigos. Aunque esto último comenzaba a ser un inconveniente porque cuanto más mayores se hacían, sus amigos comenzaban a actuar diferente. Comenzaban a tener otros tipos de gustos y hacían otras cosas, cosas de más adultos... Los quince años pudieron haber sido sus menos favoritos por esta razón. Se sentía atrasado casi en todo, sobre todo cuando iba a fiestas, porque las pocas veces que había ido sus amigos habían terminado en casi un coma alcohólico. O al menos eso decían, Hoseok seguía los consejos de sus padres y hermanos acerca de eso. Ellos lo cuidaban como a un bebé.

Y, ciertamente, Hoseok amaba ser el "bebé" de la familia. El más mimado.

Sus hermanos mayores siempre lo protegían y hacían lo que les pedía. Le gustaba porque si alguien lo molestaba siempre estaba la opción de decirle a alguno de sus hermanos para que lo alejara. Ningún chico había vuelto a acosarlo para salir con él, desde que Dareum había golpeado hasta hacer desmayar a uno de ellos hacía unos meses... Si, Dareum era muy extremo, aunque aquel tipo se lo merecía porque prácticamente había dado a entender que se había acostado con Hoseok por venganza a que lo haya rechazado.

Lo gracioso era que Dareum era el hermano del medio pero parecía el mayor a los dos, mentalmente y físicamente también, porque a pesar de que recién había cumplido diecinueve era el mas alto y ancho de los dos. Por desgracia el más serio y más sobreprotector. Estaba en, prácticamente, todas partes.

—¿A dónde vas? —soltó Dareum, sentado en el sillón de la sala con su celular en mano y los pies sobre la mesa. Últimamente estaba siendo más sobre protector que de costumbre, y suponía que era porque se había enterado de que sus amigos fumaban hierva.

No sabía cómo se había entrado y tampoco era que le sorprendía... Dareum se enteraba de todo siempre. Parecía que no tenía más vida a parte de sus prácticas de rugby.

—Por ahí... —Fue épica la expresión de su rostro, lo miró con amplios ojos cuando se puso de pie repentinamente.

—¿Solo?

Era bueno mintiendo: —Claro que si.

—Iré contigo. —No era pregunta. Casi jadeó sin poder creérselo. ¿Y ahora qué?

No es que iba a hacer algo malo, simplemente se iba a encontrar con sus amigos... esos que fumaban hierva e iban a citas a ciegas con tipos adultos que conocían por una aplicación de citas. Claro que esto último le parecía mal.

—No es necesario-

—Abrígate, hace frío afuera —irrumpió pasándole su abrigo del perchero cercano a la puerta.

Hoseok gritó por dentro, pero por fuera sonrió agradeciéndolo.

¿Era en serio? ¡No hacía frío! ¡Solo lo decía porque llevaba una camisa fina y pantalones con agujeros!

¡No era un "abrígate" era un "tápate"!

Dareum abrió la puerta para él y Hoseok salió enviando un rápido mensaje a su grupo de amigos, con el abrigo cubriendo su cuerpo hasta casi las rodillas, se sentía como si fuera un monje. No podía creer que lo hiciera abrigarse. Bueno, no es que tampoco hiciera mucho calor, era una noche lluviosa y casi la mayoría de las personas estaban abrigadas pero Hoseok era de ese tipo de personas que el frío le afectaba muy poco, y toda su familia sabía esto.

—¿Hoy no tuviste práctica? —preguntó, Dareum jugaba para un equipo de rugby que estaba haciendo cada vez mas conocido.

—No.

Su respuesta corta y fría no le sorprendió. Su hermano caminaba con las manos en los bolsillos, siempre estaba serio, calmado y era muy silencioso. Callado. Era la definición perfecta de un viejo aburrido, sacando lo viejo porque técnicamente aún era joven. A veces le daba ganas de preguntarle porque era así pero el hermano mayor de ambos ya lo había hecho y su única respuesta fue "¿así como?" con una expresión y tono que hasta el mismo Hoseok se había asustado a pesar que estuviera a metros de ellos en ese momento.