all the pretty stars shine for you, my love

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Camille salió de la ducha envuelta en una toalla, mientras se dirigía a la habitación dirigió su mirada hacia el gran ventanal de la suite, el cielo se dejaba ver claramente mientras era adornado por pequeños rayos violáceos y rosas, solo se detuvo unos segundos a contemplarlo ya que algo mas logro acaparar su atención. Sobre la cama de la abogada se encontraba una gran caja blanca con un listón plateado, acompañada de una carta.

Rápidamente se sentó junto a ella para inspeccionarla, tomo el sobre en sus manos y no pudo evitar sonreír cuando vio como en una fina y delicada letra podía leerse el nombre de Johnny, con las manos temblorosas como si fuese la primera vez tiro de una esquina para ver el contenido. Sus ojos rápidamente comenzaban a cristalizarse, y mientras continuaba deslizando sus ojos por cada frase pronto sus mejillas empezaban a humedecerse también.

Johnny realmente sabia como hacerla sentir la mujer mas afortunada del mundo, limpio el resto de una quisquillosa lagrima que se escurría y dejo salir una pequeña risa, sin duda ese hombre era lo mas parecido al amor que alguna vez conoció, un amor puro, sano. Lleno de magia que la hacia sentir como sus pies se elevaran del suelo. Cada palabra volvía a sonar en su memoria tratando de comprender como la vida fue tan miserable con un hombre tan noble. 

Dejo la carta a un lado y procedió a desatar el listón, ahogo un grito cuando levanto la tapa y pudo ver un hermoso vestido color rojo. Lo tomo cuidadosamente mientras daba pequeños saltos de felicidad.

"Cuando lo vi no pude hacer mas que imaginar lo hermosa que te verías con él, te veo esta noche princesa." -JD

Se desplomo en la cama mientras con sus brazos rodeaba el vestido trayéndolo mas a su pecho, no podía creerlo, hacia tanto que no veía a Johnny. Su cuerpo cada vez se lo exigía más, necesitaba verlo, sentir su piel y su característica fragancia a tabaco y chocolate. Dirigió su mirada a la puerta mientras esta lentamente se abría dejando ver a Shannon todavía con la ropa de playa.

—Te oí gritar y pensé que sucedió algo malo, pero es todo lo contrario por lo que puedo ver — Soltó la rubia mientras Camille se incorporaba para mostrarle el precioso vestido. —Santo cielo Camille, es hermoso —

—¿Verdad que sí? Johnny me lo dio, dice que nos veremos hoy — respondió mientras una gran sonrisa iluminaba su rostro, Shannon le devolvió la sonrisa mientras inspeccionaba la prenda. —Tu sabias ¿verdad? —

—Pues... —

—En otro momento de mi vida estaría muy furiosa con ustedes por llenarme las vacaciones de tanto misterio, pero ahora lo único que puedo decir es gracias, son lo mas hermoso que la vida pudo darme, Jess y tu —

—Camille, haríamos lo que sea por ti, incluso ocultarte información — La castaña la rodeo en un abrazo mientras intentaba no quebrarse nuevamente. —Ahora ve y ponte ese vestido, necesito ser la primera en verlo.

La castaña le dedico un pequeño baile de felicidad antes de correr al baño para seguir las ordenes de su amiga. Dejo caer la toalla y se coloco el vestido. No encontraba palabras para describir lo que veía al espejo, quizás la mas acertada seria una completa obra de arte. La prenda se ajustaba perfectamente a cada una de sus curvas, delineando por completo toda su anatomía. El intenso rojo contrastaba con su cabello color chocolate y hacia destacar sus ojos todavía más, se dio un ultimo vistazo antes de girar sobre sus tobillos para ver la reacción de su amiga.

 —Y .. ¿Qué opinas? —

—No sabía que los ángeles podían hablar — la abogada rio ante el comentario mientras daba una pequeña vuelta para que se pudiese apreciar el vestido en su totalidad —Pareciera que hubiese sido hecho única y especialmente para ti. —

don't blame love made me crazy Where stories live. Discover now