don't blame love made me crazy

johnny

Johnny's pov 

6 años casi pasaron desde aquel tormentoso día, el día en que mi vida fue arrebatada completamente de mis manos y puesta en el ojo de miles de personas, las peores acusaciones que podrían hacerle a alguien, la mayor angustia que un ser humano podría atravesar. De esas situaciones que parecen estar demasiado lejos de uno, esas mismas situaciones me atormentan desde hace 6 años. Pero hoy al fin decidí ponerles un punto final, total, ¿qué puedo perder? Si ya me sacaron todo lo que más quería.

Pase demasiado tiempo llenando mi mente de preguntas ¿Por qué? ¿Para que? ¿Merezco esto? ¿Soy realmente una mala persona?. Pero nunca obtenía respuesta, quizás las desiciones que tome en mi vida no hayan sido las mejores. Me deje llevar por la belleza exterior sin darme cuenta que no es lo que más importa. En realidad nada significa si no la puedes acompañar con un corazón puro y libre de maldad.
...

Johnny había estado hablando de la idea de demandar a su ex esposa con su abogado hace semanas, pero solo eran ideas vagas, hasta que tomo el valor de aceptar el riesgo. Ben acepto mas que encantado y le proporciono los perfiles de las personas que pensaba que podrían ayudarlo en esta gran tarea, de los mas de 20 nombres que el le proporciono uno llamo mas su atención. "Camille Vásquez, 37 años" su cv incluía una foto suya sonriendo, y el inmediatamente pensó "es ella, ella tiene que ser". 

Después de seleccionar aproximadamente a 12 personas el volvió a revisar el perfil de la abogada que tanto lo intrigaba, tenia unos brillantes ojos cafés y una sonrisa que transmitía paz, esa paz que tanto necesitaba, la misma que el mundo le arrebato hace 6 años.

—¿Estas seguro que podríamos ganar? — pregunta Johnny mientras habla con Ben por teléfono. 

—Por supuesto, tenemos a los mejores en nuestro equipo, los avengers estarían celosos —Johnny ríe ante la acotación. 

—Eso me deja un poco más tranquilo— 

—No tienes nada de que preocuparte Johnny, haremos todo lo que este a nuestro alcance para recuperar tu vida— 

—Gracias Ben, ah y una última cosa— da un suspiro y finaliza la oración — ¿Podrías decirle a Camille que venga también a la reunión del miércoles? — 

—Si ella no tiene inconvenientes aquí estará — responde Ben.

Se despiden y cuelga la llamada, ¿"estaré haciendo lo correcto?" pensó, sacudió su cabeza y se dirigió al living quería terminar la canción en la que estaba trabajando antes de que ben lo llamase, pero algo o mejor dicho alguien no dejaba de ocupar su mente, esos profundos ojos cafés ocultaban dolor, él lo podía sentir y necesitaba descubrir quién podría hacerle tanto daño a una mujer como ella. Tomo su guitarra y la melodía opaco el espeso silencio de la habitación.

Miércoles 

El día había llegado, sus manos temblaban, su cabeza divagaba entre cientos de pensamientos que se disparaban más rápido de lo que él podría anticipar, bebió otro sorbo de café y encendió otro cigarrillo. Los minutos parecían eternos y los nervios lo estaban comiendo vivo, sentía que podría desvanecerse en cualquier momento, pero el sonido de su teléfono lo hizo volver al mundo real en menos de 1 segundo. 

Camille ya llego, yo tardare por el tráfico.  

Está bien, te esperamos.

Johnny bloqueo su celular y se encamino a la puerta principal, tomo una bocanada de aire y abrió la puerta. Allí estaba ella, vestida con un elegante traje negro que la hacia resaltar entre los brillantes tonos amarillos del otoño. Su cabello color chocolate caía delicadamente sobre sus hombros, el color negro de su traje contrastaba con el paisaje amarillento que la estación estaba proporcionando. Era más pequeña de lo que Johnny pensó, no debía medir más de un metro sesenta, pero su presencia en ese lugar sin duda se podía percibir. Ella le devolvió la mirada aterrada, sin embargo, el se abrió paso hasta donde ella se encontraba.

—Hola ¿Eres Camille cierto? — soltó acomodándose sus gafas.

—S s sí, soy yo, ¿Me equivoque de dirección? Ben me dijo que tenía que venir aquí—

—No, no te equivocaste, ¿No te dijo que yo era el cliente importante que tenían que ver hoy? —

—Creo que olvido mencionar ese pequeño detalle, es un placer señor Depp —

—Oh por favor solo dime Johnny— el aprovecho la proximidad para dar otro vistazo a la joven abogada, sus ojos cafés sin dudas eran más penetrantes y oscuros de lo que la fotografía que había visto podían mostrar, reprimió una sonrisa al notar como el nerviosismo se iba apoderando de la castaña.

—Bueno parece que ya se conocieron— dice Ben saliendo del mercedes negro.

Ambos asienten y se dirigen al interior de la gran casa de Johnny. 

Las horas se hicieron pesadas relatando todo lo que tuvo que pasar los últimos 6 años, se sentía vulnerable y desprotegido, sin embargo, la presencia de Camille en la sala lo hacia sentir solo un poco menos miserable. Tuvo la oportunidad de observarla en el transcurso del día y no solo confirmo la tristeza que se asomaba por sus ojos, también quedo cautivado con su imponente manera de hablar, y su voz, por dios su voz, era como si estuviese escuchando a un ángel en persona. Trataba de concentrarse, pero perdía cada vez que ella le devolvía la mirada, esos oscuros ojos cafés parecían ver dentro de su propia alma. 

Después de largas horas de discusión sobre que harían y como lo harían, observo a Camille correr hacia afuera. "mierda seguro la asuste con todo lo que acaba de oír" pensó antes de levantarse para seguirle el paso. 

—Hey, ¿Que haces aquí? Está haciendo algo de frio— dice Johnny caminando hacia ella. 

—Necesitaba un poco de aire— 

—¿Estas bien? — su pregunta denotaba una verdadera preocupación. 

—Sí, no te preocupes, vamos adentro que tenemos que terminar con esto lo más antes posible—

...

Después de que el despidiese a ambos, se sentó en el sillón de la sala principal, lleno de pensamientos, de preguntas sin respuestas, pero sobre todo ella, acaparo sus pensamientos desde el primer momento. La joven se había preocupado por el de una forma que nunca nadie lo había hecho. Tener que exponer su vida ante el mundo no era la mejor de las situaciones que alguien quisiera vivir. Menos el, uno de los actores más conocidos de Hollywood, la persona que trabajo duro por años para darse un nombre en la industria del cine. Que cultivo con tanto amor cada personaje, dejando un pequeño trozo de si en cada uno de ellos. Nadie jamás imaginaria que mientras estaba haciendo sonreír al mundo con sus increíbles dotes actorales estaba viviendo un mismisimo infierno a manos de alguien que había jurado amarlo en la salud y en la enfermedad. Lo que el actor no sabía, es que Camille lo comprendía mejor que nadie, sabía realmente lo que era ser maltratada, ignorada, que machacasen sus sueños como si de aplastar una pequeña nuez se tratara. Ella siempre se destacó academicamente, cosa que no significaba mucho en un mundo de adolescentes superficiales que solo competían por ver quién era más bonita. Sus años en la secundaria la habían marcado como una espina incrustada en su piel, siempre recordaba esos años para no olvidar que jamás debería dejar que alguien la hiciera sentir inferior.
Miro a su derecha y vio su saco, lo tomo y se lo acerco al rostro para sentir que todavía tenia su perfume. Ahora si tenia la excusa perfecta para poder verla otra vez, dejo el abrigo a un lado y se puso a pensar de qué manera le hablaría sin espantarla aun todavía más. 

Una vez que envió el último mensaje, su corazón se aliviano, empezó a recuperar de a poco la esperanza, realmente deseaba recuperar su vida, había puesto todo en juego para conseguirlo, pero al poco tiempo el miedo empezó a acorralarlo. Entonces otra vez pensó en ella, confiaba en ella mas de lo que confiaba en si mismo, a pesar de haberla conocido hace pocas horas, ella pudo transmitirle esa tranquilidad que pocas personas sabían darle, decidió poner su vida en manos de esa astuta abogada de intrigantes ojos cafés.